¡Otra Vez No! Pausada

8. "yo no se que te pasa, pero, si se que te pasa"

Me bajé del auto de Cloe, ya habíamos llegado a la fiesta, y lo primero que veo es a miles de personas acaparando la entrada como hormigas.

Antes de entrar mire todo a mi alrededor, borrachos, personas en posiciones... comprometedoras, más las otras fumando. La casa era inmensa, y aún así se veía que no cabía un alma más. Al acercarnos más la música electrónica se hacía cada vez más fuerte.

—Oye esto... no es lo que imaginé —le dije a Cloe fuerte para que oyera por sobre la música.

—¿Por qué? —respondió de igual modo.

—¿Recuerdas la fiesta de Alisse? Era igual a ésta, y ya sabes lo que paso.

En resumen, Cloe y yo terminamos encima de una mesa cantando, bailando, con botellas en nuestras manos, ¡Ah! Y sin vestidos. Digamos que no me controlo mucho cuando bebo.

—Eso, nunca lo volveremos a hacer. Solo nos divertiremos, sin tomar tanto, vamos ¿siiii? —comenzó a dar saltitos agarrada de mi brazo.

Sabía que no iba a parar de hacer eso hasta que accediera.

—Ya, está bien. —accedí derrotada, y finalmente entramos a la casa, o mansión en realidad.

Al entrar el olor a alcohol invadió mis fosas nasales. Las luces neón me cegaban y a cada paso que daba un cuerpo me empujaba, pateaba, pisoteaba o tocaba, sí, tocaba. MI trasero fue abruptamente apretado por una mano.

Después de pasar al montón de personas llegamos a la barra, que también estaba llena. Pero luego de aproximadamente diez minutos pudimos pedir dos cervezas.

—Hey chicas, ¿quieren jugar? —un grupo de chicos se nos acercaron, el chico del frente señalaba con su dedo una bandeja, en ella habían vasos de tequila y vodka.

—¿A qué? —pregunté.

—La verdad o reto o vodka —me respondió con una sonrisa adornada en su rostro.

Soy malísima en éste juego, siempre termino muy borracha.

—¡Si! —dijo Cloe animada.

—No. —dije yo, hablamos al unísono.

Voltee a ver a Cloe, tenía una cara muy alegre, reconocía esa cara, estaba comenzando a emborracharse, ¿Pero cómo? Si solo tomo una cer... veo la barra y al lado de ella habían como seis botellas de cervezas vacías.

¿Y en qué momento tomó tanto?

—No. —volví a decir, ésta vez a Cloe. Quien ya comenzaba a tambalearse.

—Vamoooos, por mi ¿Si? —volvió a saltar una y otra vez, esto ya comenzaba a hartarme.

Pero que mas da, estoy en una fiesta y quiero divertirme, unos cuantos tragos no estarían mal.

—Esta bien. —le dije a los chicos quienes asintieron, Cloe y yo los seguimos a una rueda en la que estaban más personas. Me senté en una esquina y Cloe a unos dos chicos de mí.

Bueno tal vez no me toque tomar tanto...

30 minutos después...

—Oiiyee Cloe —miré a mi amiga, wao no sabía que tenía dos gemelas. —¿Sabiiiasss que yio te quiero mushiooo? —me reí descontroladamente.

Estoy tan feliz, y no se porque. Solo quiero bailar, y tomar.

Cloe me miró, sonrió, y finalmente vomitó en una planta.

Es tan tierna.

Giré mi cabeza, wow, no debí voltearme tan rápido, ahora me duele la cabeza. Las luces de colores me cegaban aun más, y yo solo quería bailar.