Capitulo 10

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Lauren's POV:

Abrí las puertas de la sala y salí apresuradamente en busca de Camila.

Camila: Una gran película –escuche su voz detrás de mí–

Me di la vuelta y la encontré sentada, en uno de los pequeños sofás frente a la dulcería.

-Sí. Es conmovedora –me acerque lentamente a ella– Oye escucha...

Camila: Lamento... –Me interrumpió– Lamento haberte hecho saltar desde el techo. Eso fue muy loco, y peligroso. Y lo siento si estaba un poco, como... Ya sabes, en el teléfono. Yo sólo... Me pongo nerviosa a veces.

Ella no tenía que pedirme disculpas, en realidad yo ya lo había olvidado. Y sobre todo ya la había perdonado. Es decir, no fue culpa suya que yo me quedara dormida.

Además su reacción es comprensible, hubiese estado loca si ella no hubiera actuado así.

-Dame tú número... –Le pedí mientras me sentaba junto a ella–

Ella saco su iPhone de su bolso y me lo entrego. Al desbloquearlo pude ver una foto de Ed Sheeran como fondo de pantalla y sonreí. Registre mi número en sus contactos y busque el suyo en ellos. Al encontrarlo registrado como "Mío" mi sonrisa se hizo más grande.

-Bien, te perdono...

Registre su número en mi propio teléfono y le devolví el suyo a Camila.

Camila: Así que... –Suspiró incomoda–

-¿Sí?

Camila: Así que estas con Keana... Ella es realmente bonita –halagó–

-Sí, ella está bien.

Respondí simplemente, yo no quería hablar sobre Keana. Yo quería hablar sobre ella, quería aprovechar el tiempo a solas que teníamos ahora.

Camila: Y está sentada a tu lado y sostiene tu mano –Ella estaba celosa, esa simple frase lo comprobó–: Pareciera que le gustas.

-No –susurré exasperada, para poder cambiar de tema– No lo sé.

Camila: Bien –se encogió de hombros–

-Definitivamente estoy pensando acerca de cosas sexys con ella, eso sí.

¿Qué? ¿Qué mierda estás haciendo Jauregui? Se suponía que cambiaría de tema, no que le contaría acerca de mis recientes fantasías sexuales.

Camila: ¡Wow! –rió–

-Así que. Definitivamente, gracias por eso.

Camila: Quizás eso es bueno –replicó con una sonrisa– bájala del pedestal. Además, ¿esa cosa de drama romántico? Eso es estrictamente para libros de Shakespeare...

Vaya, ella ha comenzado a divagar y es muy bonita cuando hace eso. Inconscientemente una sonrisa apareció en mi rostro y la mire fijamente, mientras la escuchaba con atención.

Camila: Es como Zussman dice, todo es biología. Selección natural. Una hembra escoge a su pareja más fuerte... Así su descendencia tiene una mejor chance de sobrevivir.

-¿Zussman? –Pregunté divertida–

Camila: El señor Zussman. Es mi profesor de biología –aclaró– Aunque supongo que él está vendiendo algo también.

-Bueno, no estoy segura de ser la pareja más fuerte en mi particular piscina de genes –bromeé– Pero, supongo que podemos darle una chance, ¿no?

Ella simplemente rió y golpeó mi hombro ligeramente.

Camila: Vamos. La confianza es sexy Jauregui –Aconsejó–

-Lo sé. Es lo que mi madre no deja de decirme –sonreí–

Camila: Debería volver adentro –aviso–

-Sí.

Ella se levantó y cuando estaba a punto de irse la detuve.

-Bueno, Ronny parece un tipo genial –mentí–

Camila: ¿Lo parece? –Sonrió perspicaz–

-No, realmente. –Confesé– Bueno, no puedo decirlo aún.

Ella soltó una carcajada por mi estupidez y no pude resistir a unírmele con una suave risa.

Camila: Como digas

Comenzó a alejarse lentamente, pero la detuve una vez más.

-Oye, escucha... Unas cuantas de nosotras iremos a la casa de esa chica después, de Brianna –la invité– Supongo que otra gente también irá. No es una fiesta, sólo es algo.

Camila: Bien –se encogió de hombros–: Déjame hablar con él.

-Genial. Habla con él... Supongo que disfruta del fin del mundo.

Explique referente a la película y sonreí falsamente. Era una invitación para ella, no para Ronny. ¡Demonios Camila!

Ella volvió a alejarse y esta vez no la detuve, ya no tenía ninguna escusa.

La de ojos marrones se detuvo justo enfrente de la entrada de la sala.

Camila: Quiero viajar –susurró–

Eso me extrañó un poco y no sabía que decir. Por lo visto, ella lo notó.

Camila: Anoche me dejaste pensando... Acerca de que quiero hacer y definitivamente quiero viajar.

-Oh –me sorprendí por su revelación–: Como... ¿Cómo una profesión?

Camila: El verano pasado, visité a mi tío y a su novio en Madrid. Un día yo estaba paseando por los alrededores y me perdí. Mi celular no funcionaba y no tenía idea de cómo regresar a su departamento. Y luego me preocupe porque debía... Adaptarme a vivir como una vagabunda en Madrid –bromeó– Finalmente llegué a la plaza... Y me senté junto a esta fuente donde simplemente, respiré. Y me di cuenta que estaba tan concentrada sobre a dónde ir y cómo volver... Que ni siquiera me di cuenta de dónde estaba.

A este punto ella estaba inmersa en sus pensamientos, se acercaba lentamente a mí. Mientras yo solamente la observaba, con una gran sonrisa en mi rostro.

Camila: ¡No había notado nada! Así que comencé a hacerlo... Comencé a notar, la personalidad de las arquitecturas, en cómo la gente simplemente se saludaba en las calles. E incluso el cielo se veía diferente ahí. Y sentí que estaba dejando ir algo... Pero también sentí que finalmente estoy en este mundo. Eventualmente encontré el camino de regreso, pero esas pocas horas fueron como, lo mejor... Fue la mejor parte de mi viaje y yo sólo... Deseo tanto volver ahí –sus ojos brillaban ligeramente con admiración– Hay tantas cosas que deseo ver.

Al igual que Camila había dicho en su historia, yo también sentí que estaba dejando ir algo... Keana ya no me importaba en este momento, ni siquiera la estúpida película. Lo único que quería ver ahora era a la linda chica que estaba frente a mí, quería hablar con ella. Conocerla más y que nos contásemos historias y aventuras mutuamente.

Mi rostro seguramente demostró la ternura y admiración que sentía en este momento... Me había enamorado de ella.

Camila: ¿Qué? –Sus ojos se abrieron como platos y su cara se torno arrepentida– Wow, eso fue tan estúpido. Lo siento, fue raro...

-No –La interrumpí– No fue estúpido, es solo que... Estaba escuchándote y... Y quiero ir contigo.

Ella simplemente sonrió y me miro fijamente, el mar chocolate en sus pupilas perdiéndose con mi lago verde esmeralda. Estábamos perdidas mirándonos la una a la otra y cuando iba a inclinarme a besarla...

Ronny: Oye amor, ¿estoy viendo esta mierda solo?

"¡Maldita sea! Púdrete Ronny..." Pensé.

Camila: Sí. –Sacudió su cabeza– Quiero decir, no. No, no. Ya voy. Toma.

Ella le lanzó un paquete de galletas, que supuse había comprado antes de que yo saliera de la sala y ambos volvieron a entrar a ver la película.

The First Time (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora