Me sentía algo sola sin Konoe, había ido al Carnaval con los chicos, pero el ser la única chica en un grupo de chicos, es algo aburrido en cierto modo.
-¿Sucede algo? -volví a ver a Reiji, el cual me había traído unos dulces-. Imagine que tendrías hambre.
-Gracias, Reiji -dije al momento que los tomaba en mis manos-. Tengo un mal presentimiento -susurré, Reiji se sentó a mi lado, normalmente me pondría nerviosa por el solo hecho de estar a su lado, pero el no estar con Konoe me hacia algo insegura y que le suceda algo es mi mayor temor, después de todo es la única amiga que he tenido desde que entre a esa escuela-. Quiero ver a Konoe.
-Bien sabes que no puedes -le escuche decir, claro que lo sabia, pero no podía evitar sentirme así.
-Iré a dar una vuelta -fue todo lo que dije para después comenzar a caminar por el carnaval, el olor a vampiro se sentía en todos lados, en cierta manera no me agradaba, por eso deseaba que Konoe estuviera aquí, por lo menos así nos acompañaríamos una a la otra.
-Oh! ¡Koneko-chan! -volví a ver al rubio Ídol.
-¡Kou! -me emocione por un momento mientras me acercaba a él-. ¿Cómo esta Konoe?
-Estoy bien gracias, solo algo cansado por el concierto, pero no te preocupes, eso pasara -comenzó a hablar con sarcasmo-. Ella esta bien, aunque se nota que algo aburrida, justo ahora me iré a la mansión ¿quieres decirle algo?
-Dile que la extraño -Kou solo asintió para después despedirse de mí.
Seguí caminando hasta llegar al final del carnaval, se veían las luces de la ciudad se notaban a lo lejos, se veía hermoso e incluso romántico, pero no podía disfrutarla como quisiera.
-¡Quiero a Konoe! -hice un berrinche al momento que tome la barandilla, llamando la atención de los pocos que estaban ahí.
-No pensé que te aburriera tanto -escuche detrás de mi provocando que me sobresaltara.
-N-No es eso, Reiji -mierda, ahora si estaba avergonzada, si me vio hacer ese berrinche no se que pensara de mi-. E-Es que no es lo mismo sin Konoe.
-Ah, ya veo -lo vi apoyarse a la barandilla mientras miraba a la ciudad, en cierta manera podía ver a Reiji algo diferente, era como si no se comportara como siempre-. Este... -le escuche dudar-. ¿Ya pensaste en quien escogeras de prometido?... Digo Konoe ya tiene a Shuu -era cierto, después de todo lo que ha sucedido aun no le he dicho a mi padre a quien deseo de prometido, estoy segura que se molestara por no haberle hablado en todo este tiempo.
-Aun no lo he decidido -mentí, desde el primer momento ya sabia a quien quería de prometido, pero no estaba segura de que él me aceptaría.
-¿Te apetece caminar? -me ofreció al momento que extendía su mano, la cual acepte.
Caminamos en silencio hasta salir del carnaval, subiendo una de las colinas hasta llegar a un campo lleno de flores de color rojizo, el que una tenue luz de luna ayudaba a que el paisaje se viera más irreal.
-No sabia que este campo existía -mencione con asombro, siempre venia al carnaval, el cual siempre era en el mismo lugar, pero nunca vi tal paisaje tan mágico.
-Lo encontré en el carnaval pasado, no muchos saben que esto existe -dijo Reiji al momento que tomaba una de las tantas flores-. Jade... -me llamó, volví a verle, se había arrodillado frente a mi mientras extendía su mano para tomar la mía-. Mirai Jade, deseo que seas mi prometida -sentí como mis mejillas ardían, debía estar soñando, ver a Reiji frente a mi, pedirme que fuera su prometida-. ¿Sucede algo, Jade? -me volví a ver a otro lado a la vez que tocaba mis mejillas, es muy seguro que estuviera completamente roja, podía apostar lo que sea por eso-. ¿Eso es un no?
-¡No es eso! -grite al momento que lo volví a ver-. Es solo que nunca me imagine que tu me lo pedirlas, Reiji -comencé a jugar con mis dedos nerviosa, Reiji simplemente se puso de pie para después entregarme la flor que había recogido antes.
-Entonces responde, porque no lo repetiré otra vez -fue lo que dijo para después volver a ver a otro lado, sonreí levemente al ver la flor.
-Claro que acepto Reiji -sonreí mas ampliamente-. A decir verdad, mentí cuando dije que no había escogido a nadie -Reiji me volvió a ver-. Siempre, siempre quise que fueras tú.
-Entonces fue una suerte que yo también lo haya decidido -sonrió de manera leve, provocando que me sonrojara el doble de lo que ya estaba-. Lamento haberte hecho esperar -susurro al momento que besaba mi mejilla.
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-Teddy, Jade me esta dando miedo -escuche a Kanato hablarle a su oso-. No ha parado de sonreír desde que nos reunimos -íbamos en la limusina para ir a la mansión, mire a Subaru, se veía algo molesto y deprimido al mismo tiempo, si es que eso era posible.
-¿Subaru? -le llame, los ojos rojizos me volvieron a ver-. ¿Estas bien? -Subaru solamente acaricio mi cabello para después seguir viendo por la ventana, al llegar a la mansión nos sorprendimos al ver a los Mukami en la entrada-. ¡Kou! ¡Azusa! ¿Están bien? -pregunte asustada al verlos heridos.
-¿Qué sucedió? -pregunto Shuu, los Mukami no respondieron.
-¿Dónde esta Konoe? -pregunto Subaru provocando que los demás nos diéramos cuenta de lo que hacia falta-. ¡Responde! -grito al momento que tomaba a Kou por el cuello.
-¡Subaru no! -le detuve, Kou miro a otro lado.
-Konoe... fue secuestrada... -respondió Yuma, la exclamación de los demás no se hizo esperar-. Los Tsukinami... Nos hicieron una emboscada, no pudimos evitarlo -Subaru soltó a Kou, mientras que yo por el shock caí al suelo.
-No puede ser cierto -susurré.
-Así que ya les llego la noticia -volvimos a ver al peliblanco de ojos dorados-. Solo les vine a decir que ella esta bien.
-¡Maldito! ¡Devuelvemela! -grito Subaru al momento que le golpeo en el estómago-. ¡Devuelve a Konoe!
-¿En serio creíste que eso me dañaría? -sonrió al momento que se ponía de pie y aparecía al lado de Subaru para después golpearlo-. Si mi hermano pudo solo con los Mukami ¿no crees que podría solo contigo a pesar de que eres el más fuerte?
-Maldito -sentí una ráfaga de viento venir a mi, para cuando me di cuenta se encontraba detrás de mi.
-Tu debes de ser Jade -me quede en shock al verle detrás de mi-. Debería agradecerte por cuidarla, pero creo que ya no es necesario.
-¿D-De qué hablas?
-Konoe no volverá a este lugar -fue todo lo que dijo para después aparecer nuevamente frente a nosotros.
-¡No puedes obligar a Konoe a estar contigo! -le grito Subaru mientras se intentaba poner de pie con ayuda de Ayato.
-La decisión esta tomada, la sangre de Eve me pertenece por derecho -fue todo lo que dijo para después desaparecer frente a nosotros.
-Debo ir tras ella -trato de caminar Subaru, pero Shuu se puso al frente de él deteniéndolo-. Quitate del frente, Shuu -las exclamaciones se hicieron presentes al momento que vimos a Shuu golpear en el estómago a Subaru.
-No iras tras de ella así de herido -le reprochó-. Debemos pensar como lo haremos, cualquier movimiento en falso podría provocar que dañen a Konoe.
-Shuu tiene razón, Subaru, no es bueno que actúes ahora -comenzó a hablar Ayato-. Pero lo que si debes saber es que no iras solo, Konoe es de nuestra propiedad, nadie tiene el derecho de arrebatárnosla.
-¿No te hizo nada? -me preguntó Reiji después de un rato a lo que solo negué.
-Ahora lo que me importa es lo que sucederá con Konoe.
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Dark Fate [Diabolik Lovers]
FanfictionFanfic: Diabolik Lovers Nunca considere que fuera una chica "normal", la mayoría de las veces soy muuuuy agresiva, odio que me pongan sobrenombres, y mucho menos que me traten como un objeto. Pero jamás pensé que mi actitud y mi forma de vida cambia...