This Girl.

215 23 20
                                    

John.

La estoy viendo ir...

Veo como se aleja dolida.

Quisiera ir detrás de ella, decirle que no es lo que parece, que lo que acaba de ver es una confusión, podría hacer eso, pero no lo haré, di mucho por ella y ella no lo valoró, no merece mi amor.

Culmino mi abrazo con Kiera, mi prima.

Antes de que pueda decir alguna palabra veo que Colleen esta regresando.

Dio media vuelta y ahora de dirige hacia mi.

Mi corazón comienza a latir rápido, ella viene con pasos firmes y rápidos.

Nuestras miradas están conectadas, me mira fijamente sin ninguna expresión especifica.

No logro saber si esta feliz, triste, bien o mal, simplemente su rostro no tienen expresión.

-John, ¿me das diez minutos de tu tiempo? -Dice cuando esta finalmente delante de mi.

Me he quedado sin palabras, no se que responder, quiere hablar conmigo, ¿Que me quiere decir? ¿De que quiere que hablemos? ¿Porque diez minutos? ¿Porque no más?

Tomo una postura firme y me aclaro la garganta.

-¿Pediste cita? -Pregunto aún sabiendo la respuesta, no puedo lucir débil delante de ella, no puede saber que sigue siendo mi debilidad.

Un momento.

¿Acabo de pensar eso?

¿Acabo de pensar que es mi debilidad?

¿Colleen sigue siendo mi debilidad?

Dios... Lo sigue siendo.

-Sabes muy bien que no lo hice, son sólo diez minutos, por favor.

Me muerdo la lengua para no responder apresuradamente, me encantaría decirle que le doy la vida entera, pero no sucederá, simplemente no.

-Sólo diez. -Respondo secamente.

-Sólo diez. -Dice ella asintiendo.

-Vamos a mi oficina. -Le digo dándome media vuelta sin despedirme ni siquiera de Kiera.

Tomo el ascensor y antes que Colleen se pueda montar cierro las puertas de éste.

No podría compartir el ascensor con ella, serían los segundos más largos de mi vida.

Fue un poco descortés de mi parte hacer eso, pero al fin y al cabo ella puede tomar el otro ascensor.

Mientras estoy en el ascensor, trato de calmarme, pienso en las respuestas que le puedo dar ante algunas preguntas que pienso que me hará.

Como por ejemplo: "¿Me personas?"

¿Qué le diré?

¿Si?

¿No?

¿No lo sé?

Rayos, esto me ésta matando.

Llego a el último piso y camino hacia mi oficina, entro en ella y voy directamente a detrás de mi escritorio, me siento y espero que ella llame a la puerta.

Pasan unos segundos antes que lo haga.

Le digo que puede pasar y ella lo hace.

Se sienta delante de mi, ahora puedo observarla mejor.

Tiene bolsas bajo sus ojos, su cabello esta un tanto despeinado, no lleva sus uñas con esmalte y va sin maquillaje, lleva una simple camiseta sin mangas y un jean, a pesar de como luce me sigue pareciendo la mujer más hermosa del mundo.

¿Qué abra pasado con ella?

¿Porque estará así?

¿Porque abra pasado estos cuatro años?

¿Donde abra estado?

Tengo tantas preguntas que me gustaría hacerle pero se que no es el momento, y quizás nunca lo será.

-¿Qué quieres Colleen? -Digo secamente.

-Necesito empleo. -Me responde.

-¿Por eso viniste? -Pregunto con la esperanza que responda que no, que vino porque quiere arreglar las cosas entre nosotros.

-Si, esa fue la razón por la que vine.

Su respuesta me duele, ella no vino por mi, vino por un empleo.

Ella no quiere arreglar las cosas entre nosotros.

No me vino a dar una explicación de el porque desapareció.

Simplemente vino por trabajo.

Suspiro y me aclaro la garganta.

-Lo siento, no estoy buscando empleadas, por ahora no, te aviso cualquier cosa -Redondo mirándola a los ojos, esos perfectos ojos que tanto me gustan.

-Oh John... La verdad es que necesito un empleo, en serio lo necesito, es urgente.

-Lo siento Colleen pero no te puedo ayudar esta vez.

Ella asiente y se levanta de la silla.

Pudiese darle empleo, claro que pudiese, pero se que si le doy empleo la tendré cerca de mi, y tenerla cerca de mi, y que no sea mía, duele.

Duele querer algo y no poder tenerlo, la quiero a ella, pero se que no la puedo tener, no puedo seguir así, causandome dolor, no más

Esta apuntó de salir la oficina cuando voltea a verme.

-Lamento haberte roto el corazón John. -Dice mirándome a los ojos, sus palabras hacen que todo mi cuerpo vibre.

-Yo también lo lamento. -Respondo sin ninguna expresión.

Ella asiente y sale de la oficina.

Una vez que cierra la puerta suelto un grito.

Un grito de frustración, un grito de molestia, un grito de tristeza.

Cuatro años no fueron suficiente para olvidarla.

¿Cuanto tiempo será necesario?

Colleen.

Quería estar más cerca de el.

Le pedí trabajo por esa razón.

No necesito trabajo la verdad.

Llevo ahorrando cuatro años, no me hace falta dinero.

Sólo quería estar cerca de el, sólo quería recuperar lo que había perdido.

Pero simplemente no es posible...

El ya tiene su vida echa, ya tiene una esposa, un perfecto trabajo, una perfecta vida.

Una vida en la cual yo sólo fui un capítulo, no la historia.

Ahora debo yo crear mi propia historia, trazar mi propio rumbo, hacer mi propia vida, lejos de el, lejos de John...






ElocuenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora