John.
-Buenos Días Keri.
-Buenos Días Sr. John. ¿Como amanece?
-La verdad bien. ¿Tengo correspondencia?
-No, bueno el día de hoy sólo llegó éste paquete para usted. -Keri extiende su mano entregándome un sobre de manila.
Lo tomo y de inmediato se que es un libro, suelen mandarme libros todas las semanas, pero por alguna razón me parece importante.
-Vale, gracias Keri, ten un buen día.
-Igualmente Sr. John.
Subo al ascensor y deseo que llegue a mi piso rápidamente, tengo ansias de abrir este paquete.
Llego a mi piso y camino apresuradamente hacia mi oficina.
Una vez en ella me siento en el escritorio y abro el paquete.
Es un libro, esta envuelto en papel, lo desgarro y me encuentro con algo que simplemente no me esperaba...
En la portada del libro estamos Colleen y yo mirándonos y sonriendo, estamos rodeados de libros.
Recuerdo cuando nos tomamos esa foto, no las tomó Blue en la biblioteca.
El título del libro es "Elocuencia"
Veo una y otra vez el libro, detallo cada parte de la portada, es perfecta.
Tomo valor y abro el libro, en la segunda página me encuentro con una frase.
"Aquellas cosas que nunca te dije..."
Tomo una larga respiración y paso la página.
Un chico hoy me mencionó a mis padres, me dolió, han pasado tantos años pero el dolor sigue allí, pensé que cuando me los mencionarán no dolería, me equivoque, me sigue doliendo, el me hizo saber que aún me duele como el día después de su pérdida.
Trago saliva ante las palabras que acabó de leer, ese chico soy yo.
Fui a la poesía, mi medio de escape, en donde me puedo desahogar sin que nadie lo sepa, donde puedo decir lo que pienso y que las personas lo vean como "arte", lo que no saben es que todo lo que relato es verdadero, desde la pérdida de mis padres, hasta contar sobre una niña de 14 años que es juguete sexual de un hombre.
Me detengo ante lo que acabo de leer.
Un momento...
¿Colleen fue violada?
¿Eso es lo que me temía decir?
No comprendo.
Recuerdo aquellos años como que si fuese ayer, cuando mis padres se fueron y mi familia me abandonó, quede sola en la calle, una niña de tan poca edad en la calle sin un techo donde dormir, durmiendo encima de cartones y teniendo como almohada viejas sabanas... Recuerdo que en una de esas noches de soledad un hombre llegó, de traje y corbata, me ofreció ayuda y la acepte, lo que no sabía es que tiempo después tendría que pagar una consecuencia, una terrible consecuencia. A veces tengo pesadillas con respecto esos momentos, quisiera borrar cada uno de esos recursos pero creo que es imposible... Cuando lo amenacé con la policía me golpeó, luego abuso de mi por última vez y me dejó en la calle, cuando quede salí de su casa me sentí libre, sentí que había salido de la cueva del león.
Lágrimas caen de mi rostro de manera incontrolable, no puedo creer que todo esto le paso, no puedo creer todas las cosas que Colleen relata.
Seco mis lágrimas y continuó leyendo.
