John.
Y lo peor es que se va y no se ni siquiera donde es su casa, la chica no es nada normal.
Continuo con mi trabajo y las horas se me van volando, cuando vuelvo a ver mi reloj ya son las cinco y cuarenta, guardo el manuscrito y apago la computadora, tomo mi bolso y salgo del cubículo.
Una vez afuera de la gran empresa veo a la loca, ella me ve y se acerca a mi, me da un papel y se va.
Abro el papel y esta la dirección de su departamento y la hora de encuentro, meto el papel en mi bolsillo y me voy a la estación del metro, iré a mi casa a cambiarme y comer algo para despues enfrentar a la fiera.
Una vez en mi departamento tomo una corta ducha, me pongo unos jeans y una camisa blanca, nada del otro mundo, me preparo un sándwich de atún y lo acompaño con jugo de naranja. Cepillo mis dientes y me dirijo a el departamento de la fiera.
Unos veinte minutos mas tarde ya me encuentro delante de la puerta de su departamento, toco y minutos mas tarde aparece delante de mi, luce diferente, luce como una ¿chica?
Vale siempre luce como una chica, a lo que me refiero es que lleva unos shors de jean y un simple sueter de lana, además, va descalza y sin maquillaje, no es como suelo verla habitualmente, vestida elegante de pies a cabeza, montada en unos altas tacones y cubierta de maquillaje.
-¿Qué ves?
-Nada. –Respondo un tanto apenado. –Solo luces diferente.
-Oh... tu tampoco luces nada mal.
Un momento, UN MOMENTO, STOP, PAREN EL MUNDO, ¿ME ACABA DE HACER UN CUMPLIDO? ¡HOY LLUEVE CHOCOLATE!
-Gracias. –Me limito a decir.
-Por nada. –Dice y se aparta de la puerta. –Pasa.
Entro, su departamento es pequeño y ordenado, todo está colocado en el lugar correcto y no hay una señal de polvo.
-Pedí pizza hace unos minutos, llegara en cualquier momento.
-Genial.
-Bueno, vamos a mi habitación, tengo varias ideas en mente.
-Vale. –Respondo y la sigo a su habitación.
Detallo su habitación de pies a cabeza, paredes vino tinto, sabanas blancas, un pequeño escritorio, un gran televisor pegado a la pared y una linda biblioteca, es mas pequeña que la mía pero es muy linda, esta ordenada de manera de arco iris, muy creativo.
-Muy bonita tu biblioteca.
-Gracias, la cambie hace poco.
-Quedo genial.
-Gracias.
La pizza llega unos minutos mas tarde, ambos nos encontramos sentados en su cama devorándola, es la segunda vez que paga mi comida, le dije que yo la pagaría pero se negó, es toda una caballera.
-Bueno, yo quiero que la historia tenga fantasía. –Dice y limpia su boca con una servilleta.
-Yo quiero que tenga Romance, y no se me da muy bien lo de escribir fantasia.
-¡Pues a mi no se meda bien escribir romance!
-Vale, calma. Necesitamos soluciones, no discusiones. –Exclamo ella asiente.
-Dame ideas.
-Pues... ¿Qué tal si unimos los dos géneros?
-¿Qué quieres decir?
-Bueno. –Digo y tomo aire para proponer mi idea. –La historia que sea narrada por una chica, y pues mi idea es la siguiente, en su cuarto hay gran baúl, cuando te metes en el te lleva a otro mundo, un mundo de fantasía.
-Narnia y tal. –Resopla ella.
-¿Puedes terminar de escuchar?
-Bueno.
-En el otro mundo es una reconocida princesa, que pronto se casara y se convertirá en reina, mientras que en la vida real es una simple chica que va a la secundaria y prácticamente es invisible, sufre bullying y es criticada por sus compañeros de clases debido a su timidez.
-Suena bien, muy bien. ¿Pero no se supone que para ser princesa ya se tiene que haber casado?
-Es fantasía querida, no hay reglas, podemos decir que el mundo es rosado si queremos, ahora déjame terminar la idea.
-Vale.
-Bueno, un chico, de los mas populares se comienza interesar en ella.
-Ya decía yo... -Resopla ella.
-¿Te puedes callar dejarme hablar?
-Lo siento.
-Bueno, como seguía diciendo, uno de los chicos mas populares dela escuela se comienza a interesar por ella, comienzan un romance y todo eso, un día el descubre el portal y viaja a través de éste, descubre que su novia es una princesa llena de súbditos, el chico se encuentra con el príncipe y le dice quien es el, de donde viene y quien es su novia, el príncipe no le cree hasta que el lo lleva al portal, es entonces cuando se enfrenta el problema, debido a que ponen a la chica a elegir entre el mundo real o el mundo de fantasía, una vez que ella elija en cual de los dos mundos se queda, el cajón será destruido y ella deberá convivir para siempre en el mundo que escogió.
-Wow wow, ¡wow! Esta genial, tu escribirás los capítulos de la chica cuando esta en la vida real, y yo en el mundo de fantasía, me parece perfecto, comencemos a trabajar.
Ambos comenzamos a trabajar, no hablamos, cada quien esta concentrado en lo suyo, el silencio reina en la habitación y es genial, ya yo hice la sinopsis y ella esta trabajando en el segundo capitulo y yo en el primero, queremos adelantar lo mas posible.
Termino el primer capitulo y mis ojos prácticamente se esta cerrando por si mismos, ella aun tiene mucha energia por lo que me dice que me recueste un rato que ella corregirá el capitulo.
No se de donde saco tanta amabilidad, creo la pizza la puso de buen humor, pero si así llueve, que no escampe.
Collen.
Termino de corregir el capitulo y ya son las tres de la mañana, el romeo loco resulto por fin tener una buena idea, la pude haber tenido yo, fue solo suerte.
El romeo esta dormido profundamente, lo despertaría para que se vaya al sofá pero no tengo energías para eso.
Me acuesto a su lado dejando una gran separación, lentamente me quedo dormida...
-Patch no te vayas, quédate conmigo por favor. –Digo abrazándolo aun mas fuerte.
-Hey ¿me puedes soltar?
-Patch no, no quiero soltarte quédate conmigo.
-¡Colleen despierta!
¿Despierta? ¿Por qué Patch quiere que despierte? Un momento.
¿A quien estoy abrazando? Abro los ojos y me encuentro con la mirada de John, tengo mi cabeza en su pecho y mis brazos están alrededor de su cintura.
-¡AHHHHHHHHHHHHHH! –Grito y salto de la cama.
-¡AHHHHHHHHHHHHHH! –Grita el.
-¿POR QUÉ GRITAS?
-Suelo gritar cuando alguien grita. –Responde el.
-¡Fuera de mi casa! ¡FUERA DE MI CASA! –Grito y lo comienzo a empujar el intenta hablar pero no se lo permito, lo hecho fuera de la casa y le tiro sus zapatos
-¡VIOLADOR! -Le grito antes de cerrar la puerta.
¡Uf!