F o u r t y - t w o

28 5 3
                                    

Querido diario:
He quedado con X. Narraré de nuevo lo sucedido tal y como pasó.
Quedaba más o menos una hora para la cita con X.¿Cita?
No era una cita, nosotros no éramos nada.
Tras ducharme e intentar domar mi pelo, me decidí por unos vaqueros negros y una camisa de cuadros.Alisé mi pelo para que dejara de parecer el de un león y me delineé los ojos con lápiz negro.
X había insistido en recogerme en la puerta de casa, ya que el sitio al que íbamos sería una sorpresa.
Estaba muy nerviosa.Bueno nerviosa no, estaba atacada de los nervios.
Comencé a andar de un lado hacia otro en mi habitación como una loca, cuando sin darme cuenta, apareció de la nada mi madre.

-¿Por qué estás tan nerviosa?

-¿Yo?¿Nerviosa? Qué va, mamá.-dije sonriendo un poco.

-Ya bueno, espero que hoy no salgas, estás castigada.

En ese momento el mundo se me cayó encima.

-¿Castigada?¿Desde cuándo?¿Por qué?

-Estoy harta de que llegues a las tantas. Dices que llegarás sobre las once, pero anteayer llegaste a las una. ¿Acaso no sabes que siempre me quedo despierta hasta que llegas?

-Lo sé mamá, y lo siento, pero te prometo que hoy a las ocho estaré aquí.

-No me vale. Estarás aquí una semana sin salir-dijo cerrando la puerta de mi cuarto de un portazo.

Mierda. La había chafado pero bien. Todo porque Rose insistió en que fuéramos a una nueva discoteca y... el caso es que llegué tarde y medio borracha a casa. Vaya mierda.

"Lo siento muchísimo X. No puedo salir hoy, estoy castigada por una semana."

A los pocos minutos me llegó una nota.

"No te preocupes. ¿Tus padres van a salir hoy?Tengo una idea."

"Sé lo que está pensando y sí, me quedo sola en casa dentro de una media hora."

"Perfecto, nos vemos."

Mierda. ¿En serio iba a invitar a casa a mi acosador? Definitivamente algo no estaba bien en mí.Después de que mi familia se despidiera de mí para ir a una cena a no se donde,comencé a arreglar un poco mi cuarto para que X no se asustara al entrar.

Hey...un momento..nadie dijo que X entraría a mi cuarto. Antes de que me pudiera tiempo a reprimirme mentalmente, el timbre sonó.

Fui hasta la entrada prácticamente levitando.Abrí la puerta con algo de precipitación y me choqué ligeramente con X. Me quedé mirando su vestimenta. Como de costumbre, de negro.Subí mi mirada hacia su rostro y en menos de un segundo me había sumergido en sus oscuros e irresistibles ojos.

-Dios, te he echado de menos-dijo acariciando ligeramente mi mejilla con su mano derecha. Yo sólo miré hacia el suelo evidentemente roja.

-Pasa-susurré.

Él entró en la casa con paso lento. Parecía totalmente fuera de lugar en la habitación, y eso me encantaba. Lo miré con recelo.

-¿Dónde tenías pensado llevarme?-pregunté.

-Como siempre, mi pequeña Jane con sus preguntas-dijo girándose por completo hacia mí.-No te lo diré, es una sorpresa para el próximo día que salgamos.

Mi corazón se agitó al oír esa frase. Él tenía planes de salir conmigo. Él. Conmigo.Sonreí levemente.

-¿Quieres hacer algo?

-Querría hacer contigo bastante cosas, pero no creo que te refieras a eso-dijo con una sonrisa socarrona.

Aguanté una nerviosa carcajada en mi garganta.

XDonde viven las historias. Descúbrelo ahora