Amando En Silencio

☆Capitulo 9: "No Te Vallas"

Por fin e decidido declararle mi amor a mi vocalista y luchar por estar a su lado, pero la vida me tenia otra cosa preparada. Algo que me hará sufrir por el resto de mi vida.
Cuando entre al baño buscando a Taka, me encontre lo mas doloroso que e visto en mi vida... el gran vitral de la regadera estaba destrozado, el piso estaba lleno de vidrios y sangre... y mi vocalista estaba inconsciente, dentro del agua roja de la bañera.

- Taka!!- grito el guitarrista con fuerzas, mientras se levantaba del suelo lleno de vidrios rotos y corria hacia la bañera - Taka!!- seguía gritando, mientras entraba a la gran bañera y sacaba a Taka del agua, la desesperación y el miedo se apoderaban de él, tomó al cantante en brazos y con mucha dificultad lo sacó de la bañera, casi resvalandose, con las piernas temblando y un gran dolor en el pecho. ¿aun seguía vivo?

- Taka!! Porfavor resiste, quédate conmigo-

El guitarrista recosto a Taka en el suelo de la habitación con cuidado y pego su cabeza al pecho del cantante para percibir algún latido ya que literalmente sus muñecas estaban destrozadas ¡¡no esta respirando!! inmediatamente comenzo a golpear el pecho del cantante con fuerza y a darle respiracion boca a boca, pero el azabache seguia sin reacciónar, quiza ya era tardé y el destino no quería que estuvieran juntos.

- Quedate!! No me dejes!!- exclamó el guitarrista entre sollozos sin dejar de comprimir el pecho del cantante pero al parecer ya era tarde... - Taka!! Porfavor quédate! !- seguía exclamando Toru mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.

Ese momento marcaría la vida del guitarrista de una manera cruel , ese momento en que te das cuenta de lo que as perdido y la gran falta que te ara, cuándo tus esfuerzos por no perder a esa persona especial para ti son inútiles y todo parece en vano.

-¡¡Taka!! ¡¡Porfavor no me dejes!!- gritaba Toru con la esperanza de que no fuera tarde y que siguiera vivo hasta que por fin sucedió.

- ahh... cof cof cof! !- ¡el vocalista reacciono! y comenzó a toser toda el agua que habia tragado.

- ¡¡estas vivo!!- grito el guitarrista con bastante felicidad y alivio mientras abrazaba al cantante y lo ayudaba a sentarse para que el aire llegara a sus pulmones lo más pronto posible.

- Toru... - habló débilmente el vocalista sonriendo sutilmente al ver al guitarrista a su lado, pues al parecer si se preocupo por él.

- shhh! calla- dijo el guitarrista abrazando al cantante a su pecho, como si se tratara de un bebe- no te esfuerzes-

-Toru...tengo que decirlo - insistió el vocalista con mucha dificultad.

- ¡calla! Tengo que llevarte a un hospital, ¡¡te estas desangrando!!- el guitarrista al ver a Taka una vez mas y lo palido y devil que estaba, rompió su camisa y con ella vendo los brazos del cantante.

- !Ahhh! - exclamó el vocalista al sentir la presión de la tela en sus heridas y acto seguido se retorcio levemente por el dolor.

- ¡¿porque me hiciste esto?! ¡no se que haría si murieras!- gritaba el guitarrista aún desesperado -¡¿quieres verme muerto verdad!? ¡porque si algo te pasa me muero!- dijo Toru intentando calmarse y una de sus manos se poso en la cara húmeda de Taka acercandola a él.

-To...ru- habló el azabache una vez mas, temblando levenente debido al frio y dolor en las muñecas, pero no le dio importancia, sentia que moria... que se dormiria para ya no despertar, pero estaba feliz pues moriria en brazos de su amor... con bastante dificultad y reuniendo el resto de sus fuerzas intento hablar...pero el guitarrista poso un par de sus dedos sobré los labios del vocalista para impedir que hablara.

- Shh, no te esfuerzes-dijo el guitarrista acercandose peligrosamente a los labios del vocalista y pegando su frente con la de Taka.

-¡To...!- de un solo movimiento el guitarrista plantó un suave beso en los labios del cantante quien estaba algo impactado ante el acto... primero estaba algo sorprendido, pero segundos después se dejo llevar por el momento y correspondió el besó el cual fue muy intenso, ya que por medio de ese beso expresaron su amor el uno por el otro y por fin pudieron llenar el gran vacío que tenían en el pecho.