El mundo de la magia

Capítulo 46: Noticia inesperada (Parte 1)

Nota: Pueden poner la multimedia de una vez, si quieren.

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...Todavía recuerdo la primera vez que oí la frase "Esto va a salir en primera plana"... Fue el inicio de una gran relación con los inventos del futuro.

Cuando casi llegábamos al final, Akira se desvió del camino y, claramente, tuvimos la obligación de perseguirlo. No pasamos mucho cuando descubrimos una cabaña llena de... híbridos... Menos mal sujetamos bien a Akira antes de formar más alboroto del que se puede dar.

-Uh... Shin... ¿Crees que esta gente sabe de nosotros?- me preguntó Minako.

-Ciertamente, estamos muy lejos de Pánida como para que nos reconozcan...- respondí.

-¡Pero suéltenme ya, que tengo mucha hambre!- replicaba Akira, como niño mimado. En cierta parte, admito que tenía gracia.

-Y también dudo que humanos puedan entrar ahí...- dije.

-¡Yay! ¡Volveré a usar mi disfraz de linda conejita!- Minako estaba bastante contenta por no dejar eso en Pánida... yo, en cambio, me estaba preocupando un poco. -Me infiltro, saco comida de ahí y... ¡listo! Nos ahorramos de problemas...-

-Y seguimos escalando...- continué y acepté.

-Vale. Quédense ocultos mientras aprenden de una Aprendiz...- se notaba la arrogancia de esa Aprendiz...

En parte era un buen plan, puesto que a mí no me quedaba nada de un híbrido, mientras que Akira... sí o sí se le notaban una o dos cosas, en el mejor de los casos... Pero también era cuestionable el hecho de dejar que Minako se encargase de algo sin dejar el lugar un desastre.

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Punto de vista de Minako:

Je... no pasó nada para que me volviesen a llamar para narrar.

En fin, como linda conejita que me volví a convertir, me fui directo a lo que se llamaba "la Taberna Youkai". Por si todavía no lo saben, todo lo que nos habíamos encontrado al llegar a Pánida son apenas la mitad de estas criaturas llamadas "Youkai", las cuales en su mundo deben ser conocidas por la mitología japonesa.

En fin, la taberna era de puros híbridos, y al parecer era sagrada, según el mismo cartel que me dijo el nombre del sitio. Por lo fácil que era, me pude adentrar sin problemas en la taberna. No es por nada, pero por dentro no hay diferencia de por fuera, y a eso me refiero a que ese lugar se tomaba muy en serio lo de "al aire libre".

En cuanto a lo que había, era:

-Agua (lo cual es redundante, viniendo de una cascada)

-Pan... vale.

-Ensalada... tal vez

-Puré... no se veía apetecible

-Un trozo de carne (era inseguro saber de qué animal, para no cometer canibalismo). Ya que Akira es prácticamente de todo, descarté esa.

-Galletas... perfectas para refrigerio.

-Jugo... también buena elección.

-Batido de leche... perfecto con las galletas.

-Cerve... muy bien, para Akira no es recomendable.

-Café... muy relajante como para el ambiente en el que estábamos...

-Té... Shin decía que sin eso no podría continuar en esta vida. Yo pienso que a él le encanta.

Más o menos ese fue el menú que dije. Al final, Akira optó por galletas y una ensalada de hojas junto con jugo, mientras Shin ya pedía la segunda taza de té.

En realidad, lo difícil no fue conseguir todo lo de la lista de compras. Lo difícil empezó con la llegada de Kyasuto y Komondai.

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Nota adicional del autor: Es opcional, pero también pueden revisar capítulos anteriores y poner el tema de ciertos personajes, como lo es el de Kyasuto/Viral.

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-Es un gesto amable el tuyo, Kyasuto...- decía Komondai. Al parecer, él la había invitado a esta taberna como una cita...

-Es lo menos que puedo hacer por ti, cariño...- le respondió Kyasuto, para luego mirarme a mí y decir... -Oye... esa chica... ¿no te parece conocida?-

-¡Kyasuto!- Komondai le pegó una de esas bofetadas de comedia. -¡No debes andar mirando a otras chicas durante una cita! ¡Es irrespeto!-

-¡Pero no la miraba de ese modo! Me refiero a que... ¿de verdad no te acuerdas de si alguna vez la viste?-

-Bueno... se me hace familiar...- cuando paró la comedia, me dispuse a acelerar el paso, antes de que me descubriesen. Tonta de mí...

-Sigámosla...- alcancé a escuchar de Kyasuto esa frase, para luego andar tras de mí. Al salir de la taberna, me dispuse a correr lo más rápido posible hacia el lugar donde estaba mi equipo. Pero al llegar, me encontré con un infortunio...

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Narra Shin:

Desde el momento en el que vi a Minako a paso apresurado, supe que algo andaba mal al instante. Luego, se vinieron Kyasuto y Komondai, quienes al menos no nos delatarían porque eran gente de fiar... pero luego... ¿saben qué? Lo diré por orden...

-¡Aquí traje la comida!- dijo Minako, cansada del paso veloz. Luego saben quiénes llegaron...

-¿Akira? ¿Shin?- Kyasuto se sorprendió de vernos a nosotros aquí.

-Alto... ¿Qué hacen ustedes aquí? ¿Cómo subieron?- también Komondai quería respuestas, así que nos especificó la pregunta.

-Alto, ¿y yo qué?- Minako parecía indignada.

-Tampoco te olvidamos a ti, Tanaka...- Kyasuto lo decía en un tono un poco... raro.

-¡Oye!- Komondai abofeteó a Kyasuto, y a juzgar por su rostro, parecía la segunda vez...

-Ay, mi vida...- murmulló Kyasuto...

-¿Y qué hacen ustedes aquí?- se preguntó Akira. -¿También tienen curiosidad de ver quién está en la cima?-

-En realidad, vinimos por una cita...- dijo Komondai.

-¿Y ustedes? Acá sólo entran híbridos...- replicó Kyasuto...

-Bueno...- no nos dejaron tiempo de hablar cuando...

*Paren cualquier multimedia activada*

-¡Oh, genial!- dijo alguien entre los arbustos... -¡Esto va a salir en primera plana!-

Continuará...