Mi corazón dejó de latir. Dios! Porqué me metía en tal embrollo. No podía articular ninguna palabra.
- Yo... - Puso un dedo en mi boca.
- No me lo digas ahora. – Sonrió.
- Está bien. - sonreí.
Desprevenidamente tomó mis mejillas y me acercó hacía su boca. Era un beso tierno y dulce. Suavemente acariciaba mi mejilla. Automáticamente coloqué mi mano en su nuca profundizando más el beso. Lentamente comenzó a introducir su lengua... Debía admitir que el chico sabía besar. Antes de separar nuestros labios mordí su labio inferior.
- Auch! – Dijo riendo.
- Te lo merecías! – reí tiernamente. – Me dejaste marcas en el cuello.
- Lo siento. – sonrió. – Espero que no te haya causado problemas.
- No, mi hermano no lo notó. – Hice una mueca.
Nos quedamos abrazados viendo el resto de la película. El olor de su perfume me embriagaba y sentir sus enormes músculos me hacían sentir protegida.
Al terminar la película nos levantamos y fuimos con Ashley y Mau, que los habíamos dejado solos todo ese tiempo.
- Donde se metieron? – Dijo Mau levantando una ceja.
- Fuimos a arreglar un par de cosas. – Dijo Mario guiñándome el ojo.
- ________, me acompañas al baño? – Ashley quería contarme algo, Me había dado cuanta por la mueca que había hecho.
- Claro, ya volvemos. – Dije sonriendo.
Nos dirigimos la baño y ni bien terminamos de entrar Ashley comenzó a hablar todo mezclado.
- Espera! – dije tranquilizándola. – Despacio. – Reí.
- Mau dijo que hace mucho que yo le gustaba y quiere que andemos en "algo" – Dije haciendo comillas imaginarias.
- Que bien. – Sonreí.
- Y tú? – Dijo emocionada.
- Jake me pidió ser su novia. – Dije no con tanto entusiasmo.
- OHH eso es genial! – Dijo emocionada. – Pero, no te veo tan contenta. – Dijo seria. – Pasó algo?
- Es que... - Suspiré. – No entenderías. Tal vez... otro día te lo explique.
- Ok. – Dijo. – Vamos, los chicos nos deben estar esperando.
- Está bien. – sonreí.
Los chicos no estaban esperando sentados en una mesa.
- Listas? – Dijo Mau.
- Si. – Dijimos al unísono.
- Donde iremos? – Pregunté.
- Las llevaremos a un lugar especial. – Dijo Mario.
Salimos del cine y nos caminamos hasta un parque con un lago. El lugar era hermoso. En el agua se reflejaba la luna llena.
- Es bello. – Dije admirando el lugar.
- Ashley ven que quiero enseñarte algo. – Mau tomó su mano y se fueron.
- Supongo que quedamos nosotros dos. – sonrió.
- Si.. Oye Mario... - Me interrumpió.
- Mario? – Se sorprendió. – Como sabes que es mi nombre?
- Hoy en tu habitación. – Dije nerviosa... Cómo fue posible que se me escapara!!! – Vi en la puerta que decía Mario.
- Oh... - Dijo agachando la cabeza.
- Porqué mentiste tu nombre?
- No me entenderías... - Dijo cabizbajo. – Pero no le digas a nadie que ese es mi verdadero nombre. – Suplico. – Eres la única que lo sabe.
- Ok... - Dije aliviada, Al parecer se había creído lo de la puerta.
Caminamos de la mano cerca del lago. Conversando un poco más para "Conocernos" Le gustan los deportes extremos y jugar basketball. También anda en skate y le encanta cantar desde pequeño. Él no era malo, era tierno, dulce y muy lindo. Estaba comenzando a pensar en dejar la misión. Como haría para matarlo si yo ya le tenía muchísimo afecto. Cada vez que veía sus labios quería besarlos.
- Mario... - dije abrasándolo del cuello.
- Que linda?
- Creo que ya es tarde...
- Si, quieres que te lleve a casa? – Sonrió.
- Por favor. – Dejé un tierno beso en su boca.
- Ok, Pero donde estarán Mau y Ashley? – Dijo sin soltarme de la cintura.
- No creo que debamos preocuparnos por ellos. – Sonreí. – Pero voy a mandarle un Mensaje a Ashley diciéndole que ya nos vamos. – Saqué mi celular y envié el mensaje. Al instante Ashley me contesto que estaba todo bien que ella se quedaría con Mau.
Mario me dejó en mi casa.
- La pasé muy lindo contigo. – Sonreí.
- Yo también. – sonrió. – Te veo después. – Beso mis labios.
- Adiós. – entré a la casa