No merezco ser amado

Capitulo 6

[Narra Jeff]

Pensé que al despertar Slender seguiría a mi lado y que después de tanto tiempo tendría a quien darle un beso de bueno días.

No fue así.

En lugar de Slender solo había una nota, la cual tomé y leí.

Tuve que salir.
Si tienes hambre puedes tomar lo que quieras de la nevera. Si te aburres toma alguno de los libros de el estante, pero sobre todo..

No salgas de la cabaña.

Volveré pronto, lamento no despertar a tu lado. Tendremos más tiempo después.

-Slender

Comprendo.
Un hombre con tanta "influencia" en este bosque debe estar siempre ocupado.

Cuando me senté en la cama sentí un dolor punzante en la parte baja de mi espalda.

«Jeff, pequeña mierda, mide tus súplicas la próxima vez» Me regañé a mi mismo al recordar que yo fui quien pidió algo más rudo de su parte.

Sabia que debía replantearme toda mi vida justo ahora después de haberme acostado con un demonio que conocí hace un día, pero seamos claros.

Lo que hago no tiene sentido, estoy fuera de mi mente y así soy yo.

Me follaría a todo el infierno si me dieran esa oportunidad solo para demostrar que no solo soy UN asesino más en la lista de los mas buscados.

Yo soy Jeff The Killer, nadie puede superarme.

Tomé mi ropa, me vestí y bajé a comer algo. Mientras bajaba las escaleras escuchaba las infantiles risas y leves golpes de dos chicos en la cocina.

Cuando llegue allí, estaban los siervos de Slender -Toby y Masky- jugando con los cubiertos y todo utensilio de cocina.

Pensé que el más infantil era yo...

- ¿Qué hacen aquí?.- le pregunte a ambos a pesar de que me parecía divertido, los miré serio y con los brazos cruzados.

- Eh...¡Ah! Hola, solo hacemos nuestro trabajo de niñeras.- Dijo Toby, lanzando el cubierto que tenía en su manos y apoyando sus codos sobre la barra de la cocina.

-Si, El Operador nos pidió que te cuidáramos.- Continuó Masky poniéndose serio y escondiendo el cubierto en su espalda.

-No necesito de un par de niñeras. Así que pueden irse.- Me encogí de hombros y me acerqué a la nevera a tomar una manzana.

Ambos se miraron entre sí, no presté atención al porqué y solo le di una mordida a la manzana.

- No, el dijo que teníamos que estar aquí hasta que regresara.

De este par de chicos, el más serio sin duda era Masky. Siempre llevaba máscara, pero esta vez no la tenía.

Sus ojos eran azules y su piel era clara. No había necesidad de esconderla, supongo que no es algo que no me incumbe.

Toby tampoco llevaba máscara y sus lentes los tenía en la cabeza. Este si tenía algo, una cicatriz mucho más grande que la mía en una de sus mejillas. Sus ojos eran café claro y brillantes.