No merezco ser amado

Capítulo 14

[Narra: Jeff]

-Liu, debe haber alguna forma de salir de aqui.- Insistí.

¡Yo no tenía ni idea de como salir de aqui!

Offender había tomado mi cuchillo, no teníamos armas, pero no es imposible.
No voy a permitir que un hijo de perra me mantenga aqui encerrado.

Soy un asesino, no un niño.

-Claro, cuando encuentres la salida, me avisas.- El estaba acostado en la cama, con las manos en la nuca; parecía no importarle la situacion en la que estábamos. ¿Que demonios le pasa?

Liu solía ser tan pacífico y ahora parecía ser incluso más cretino que yo.

Me levanté y comencé a buscar por todos lados algo que sirviera como arma. No había mucho, solo una cajonera vacía y la cama.

- ¡Oh, vamos! ¿Te quedaras allí relajándote? ¿¡Acaso no has puesto atención de el lugar donde estamos?!.- Deje de buscar y me pare frente a la cama donde el estaba.- ¡Ayúdame un poco!

- Shh...ya he intentado todo y creeme: no hay oportunidad de salir.- dijo.- Además, no es tan malo.

¿"No es tan malo"?

No puedo creer que el esté diciendo algo tan descabellado. No hay forma en la que...

¿Se habrá enamorado de su secuestrador?

Me siento tan culpable por haberlo dejado tan dañado psicológicamente.

-Repite eso para asegurarme de que no te confundes ¿"No es tan malo"?.- Bufé.

Me cruze de brazos; el frunció el ceño y se levanto de la cama para ponerse frente mío.

Era ligeramente más alto que yo, pero no me intimida en lo absoluto. Yo era más fuerte que él.

-Dije que no es tan malo, ¿Ya?.- Espetó.

Se atrevió a repetirlo.

Que hijo de perra.

Yo me sentía tan mal por sentir que me enamoraba de un ser más allá de la comprensión humana y este imbécil se enamora de eso y le agregamos que ese ser es su secuestrador.

No pude evitar mirar las cadenas en sus tobillos y llevarme una mano a la cara como un gesto de total decepción.

Me senté en la cama sin decir nada mientras el me miraba fríamente sin entender mi reacción.

[Narra: Slender]

Habíamos encontrado una puerta debajo de la alfombra, pero tenía llave. Esa llave estaba en manos de Offender.

Él me reto a a conseguir las llaves, pero yo tenía una mejor idea y mas efectiva.
Mostré mis tentáculos y...enredé uno al cuello de Offender y otro lo enredé al rededor del candado. Arranque él candado y lancé a Offender sobre una mesa de madera, la cual, quedó rota.

Normalmente no habría podido arrancar el candado. Era una puerta vieja de metal. Nosotros no tenemos permitido tocarlo.

Los proxys modificaron las caballas para evitar lo mayor posible la presencia de este o cubrirlo para evitar el contacto con nuestra piel.

El dolor no me importó cuando pensé en Jeff.

Le hice una señal a Lau para que entrara a averiguar si ellos estaban allí abajo, por lo mientras tuve que encargarme de mi hermanastro.