Esa noche había algo extraño en el aire. Todo estaba extrañamente silencioso. Me costó bastante quedarme dormida por lo ya mencionado, a parte del miedo que tenía a volver a tener una pesadilla como la de hace dos noches. Además, tenía esa horrible sensación de que alguien me estaba mirando desde algún punto de mi habitación. Esa cosa estaba ahí, yo lo sabía, y más que asustarme, llegó el momento en el que me molestaba. Aunque quizá podría ponerle nombre... Laura. ¿Quién sería Laura y de donde viene, y por qué ese mensaje? Sabía con certeza que ese cadáver tenía algo que ver con lo que estaba pasándome. Quizá ese cadáver era Laura, o quizá no. El caso es que al día siguiente por fin descubriría de quién era ese cuerpo, y de dónde había salido ese mensaje.
Esa mañana me desperté tarde. No fui al instituto tampoco ese día, ya que mi madre consideró que sería bueno para la salud familiar que pasasemos un día todos juntos. Sin embargo, esto estaba muy alejado a la realidad. Raúl seguía muy triste y no se hablaba con mi padre. Ella, al ver la situación se pasó bastante rato en el baño llorando. Yo, por mi parte, decidí continuar mi investigación. Fui a la comisaría donde había quedado con ese hombre. Le pregunté que qué se sabía sobre el cuerpo, pero me pidió que le contase toda la historia que había pasado con lo de el mensaje y demás. Tras explicarle toda la historia, le volví a preguntar.
-¿Acaso no has visto las noticias?
-No, ¿por qué?
-Mira, ven aquí.
Comenzó a buscar en una carpeta llena de fotos. Pude observar una serie de fotos bastante escalofriantes que parecían ser de escenas de crímenes. Finalmente, sacó una foto de una chica de unos 12 años. Era muy guapa y tenía un pelo largo, rubio y rizado, tal y como el fantasma de mi sueño.
-Te presento a María Ordoñez. A ella pertenece el cadáver que ayer encontrásteis. Es uno de los casos de desapariciones más sonados desde finales de la década de los noventa. Desapareció el 8 de julio de 1997, hace ya 18 años, dejando varios interrogantes en su misteriosa desaparición. Nunca se supo absolutamente nada acerca de su paradero y nunca nadie pensó que pudiera haber acabado ahí. Corre la leyenda urbana de que la madre llegó a volverse tan loca con la desaparición de su hija que hizo un pacto con el Demonio para poder encontrarla , pero que murió.
-¿María? ¿Cómo María? ¿No es Laura?
-Parece que no.
-Entonces... ¿Quién es la chica de mi mensaje? ¿Y por qué me pasa a mi esto? A parte, ella es la chica que ví en mi sueño y que me intentó asfixiar... ¿Qué es lo que me está pasando?
-No lo sé. Pero creo que quizá estás bastante sugestionada. Te llegó ese mensaje y estás malinterpretando las cosas ahora.
-No, yo sé que es real, mi hermano también sabe lo que está pasando, y Paula y Virginia... TODOS han visto que es real... Y si no, ¿Cómo supe que ahí había un... cadáver?
-Coincidencias.
-No... yo sé que es real... y... voy a averiguar qué es lo que está pasando.
-Por cierto, tu amiga Virginia... está ingresada en un hospital psiquiátrico.
-¿¿Qué??
-Sí... parece que después de lo que le pasó ayer... ha enloquecido. Ha comenzado a decir que la muerta la persigue y... en fin.
-No... eso es... horrible...
-Deberías dejar el tema y hacerte a la idea de que no hay nada.
-No... esa cosa es real, y lo demostraré.
Dicho esto salí del lugar mucho mas confusa que antes. Si el cuerpo era de una tal María... ¿Quién era Laura, y qué tenía que ver con el mensaje?
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El Mensaje: Primera Parte
Horror¿Qué tal si los mensajes en cadena de terror fuesen reales...?