Escucha esa melodía
que habla en tu corazón
de aquella melancolía
que tortura nuestra razón.
Escucha aquella poesía
en versos de plata cantada,
que dice la noche y el día,
la luna y la estrella dorada.
Escucha que el pájaro es libre
al lanzar sus alas al mar,
y que no por no estar entre rejas,
está uno en libertad.
Escucha que no es un poeta
quien escribe tinta rosa en papel,
y que alguien sin una probeta
también es capaz de estudiar.
Escucha que no es siempre amor
todo el impulso que sientes,
y que puede ser bueno aún
aquello que uno no entiende.
Escucha que todos estamos
llamados a ser artistas,
aunque ni tú ni yo tengamos
nuestros nombres en las listas.
Y escucha, por favor, te pido,
que poesía no es labor,
a pesar de ser explotada
es la lengua de la pasión.
