Viernes 13 de noviembre del 2015
La semana pasó demasiado rápido. No deseaba que este día llegara. Hannah viene conmigo, quería acompañarme a venir hoy a la casa de mis padres. Todo pasó tan rápido, primero con la invitación de Jason y ahora con la llamada de mi padre. Tuve que cancelar la cita que tenía para hoy con Jason, para venir al homenaje de...
- Erika. ¿Estás bien? –me pregunta Hannah irrumpiendo en mis pensamientos.
- Sí. Estoy bien –digo con tono triste.
- ¡Erika! Mi niña bella. Tanto tiempo princesa –me saluda mi abuelo muy amoroso y con un cálido abrazo, como hace años no lo hacía–. ¡¿Cómo has estado, preciosa?!
- Muy bien abuelo.
- ¡Ah! Qué bueno, linda. Pero mira qué guapa estás... toda una mujer. Si tu abuela estuviera viva, diría que estás preciosa.
- Gracias, abuelo. Te quiero.
- Yo también, linda –me abraza y se dirige a Hannah–. Tú también estás preciosa, Hannah.
- Muchas gracias señor –mi abuelo se va hacia la cocina. Es el mismo de siempre, nunca cambia.
Hay mucha gente, están los vecinos y mi familia. Todos están aquí, todos la queríamos mucho. ¿Por qué se tuvo que ir de esa manera? Es injusto. No lo entiendo, ¡no tiene sentido!
- ¡Hannah! Cariño, ¿cómo estás? –saluda la mamá de Hannah.
- Hola mamá –dice Hannah con un tono raro como queriendo decir: "¡Ay! Sáquenme de aquí".
- No me has llamado. Se supone que me ibas avisar... –es interrumpida por Hannah.
- ¡Madre! Ahora no. No es el momento –dice entre susurros.
- Cierto. Tienes razón, discúlpame –sonríe hacia mí.
- ¿Cómo estás, Erika? ¿Cómo te sientes?
- Mamá no seas imprudente. Mejor vámonos tenemos que hablar. Dejémosla sola. –se la lleva empujando–. Lo siento. –me susurra y se van murmurando algo a lo lejos.
Noto que todos me están mirando, hablan de lo que paso hace 16 años. Yo los miro, siento como si me asfixiara, miro a mi alrededor y de repente me encuentro mirando mi reflejo en el espejo y doy un pequeño salto de la impresión. Pongo mi mano en el pecho para tratando de calmar mi corazón.
- Erika, hija.
- Hola... –digo un poco incómoda y él me abraza–, padre.
- Qué bueno que hayas venido. Me hace muy feliz.
- ¿En serio?
- Sí. Por cierto, ahí está tu madre –apunta detrás de él. Miro por encima de su hombro y la encuentro con la mirada. Está atendiendo a los invitados. Se ve tan hermosa como siempre, pero triste también. Luce un hermoso vestido azul y trae el cabello recogido.
- Se ve bien –le digo.
- Sí. Estaba feliz cuando le dije que vendrías.
- ¡¿En serio?! –digo sorprendida, con el ceño fruncido.
- Sí, en serio. Bueno no hizo una cara de alegría, no celebro con fuegos artificiales, pero estaba feliz.
Claro. Así es mi madre. Ya me lo esperaba, a ella no le interesa que yo falte o que venga, pero mi padre está haciendo un buen esfuerzo para llevar la fiesta en paz. Es un gran padre, muy amoroso y bueno. Lo amo, no podría haber deseado un mejor papá que el que tengo. Lo amo tanto que si se llega a morir se llevaría mi alma; él es la única persona a la que le intereso de verdad. Mientras me habla de cómo ha sido todo este tiempo para ellos, lo miro con ojos de admiración. Es un padre ejemplar.
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¿Enamorarme de ti?... Imposible [PRIMERA PARTE]
RomanceErika Jones y Sebástian O'Donell se enfrentan a su destino y juntos lucharán contra la sombra de un pasado que los atormenta día y noche. Sin embargo, el amor que se tienen es lo único que les da la fuerza para enfrentar cualquier adversidad. Enamór...