¿Enamorarme de ti?... Imposible [PRIMERA PARTE]

Capitulo 5

Lunes 16 de noviembre del 2015

El fin de semana fue muy duro para mí. Hannah se quedó en la casa de un chico nuevo que conoció el viernes pasado en el homenaje de mi hermana. Ella nunca cambia, siempre tiene la esperanza de que alguno de ellos sea el indicado. Desbloqueo mi teléfono y miro la hora, es temprano aún, son las 7: 33am y el café de George abre hasta las 8:00am y por dicha hoy es día de pago. El autobus se detiene en la parada justo a tiempo y camino hasta el café. Cuando llego saludo a todos, tratando de disimular la tristeza que llevo dentro, por lo que pasó en casa de mi padres. O mejor dicho: con la tristeza que llevo cargando durante toda mi vida.

- Hola a todas.

- ¡Hola, Erika! –saludan en coro con tono de cansancio.

- Hola George –saludo a mi jefe.

- ¡Oh! Qué bueno que llegaste, ahora que están todas aquí, podré empezar el día diciendo que alguna de ustedes será la afortunada de... –hace una pausa de suspenso y golpea la mesa del mostrador con sus dedos como si fuera un tambor–. ¡Hacer las entregas a domicilio! ¿Qué dicen? –dice extendiendo los brazos con emoción.

- ¡¿Esa es la sorpresa?! –dice Paige, con tono de decepción.

- Sí –le responde George.

- Ese es el trabajo de Billy, ¿qué pasó con él?

- ¡¿Se acuerdan que este fin de semana se casó?! –todas asentimos con la cabeza–. Bueno, se fue de luna de miel y no volverá hasta marzo. Se sacó la lotería y le pudo Pagar a su esposa un viaje de lujo por cuatro meses por toda Europa.

- Genial, bien por Billy, pero ¿por qué nosotras? ¿No puedes contratar a alguien temporalmente?

- ¡Noup! Estamos cortos de presupuesto y es por eso la otra noticia. Hasta el próximo lunes les podré dar su quincena –dice con tono de tristeza.

- ¡¿Qué?! –decimos todas al unísono impactadas.

- Lo siento chicas. En verdad me apena, lo siento.

- Al menos nos pagarás por el doble servicio, ¿cierto? –pregunta Paige, un poco enojada.

- No, como les dije estamos cortos de presupuesto. Pero ahora, ¿quién se quedará con el trabajo de Billy?

- A mí no me mires –responde Paige–. Si no hay doble paga no pienso hacerlo.

- A mí menos –dice Darnell levantando las manos.

- Bueno sólo quedas tu Erika.

- ¿Yo?... –los miro a todos y George me hace ojitos... – ¡Ah! Está bien, yo lo haré.

- ¡Excelente! Ahora levanten las miradas y pongan caras felices. Abrimos en cinco minutos.

- ¡Yei, yupy! –dice Paige con tono sarcástico rodando los ojos.

El día se hace lento y cansado. Como cerraron la competencia de este café, entonces tenemos muchos clientes ahora. Órdenes para arriba, cafés para abajo, muffins para un lado, crepas para el otro y pies de limón por todas partes. Es un caos. Desearía salirme por un rato. Cuando son las 12: 00 p.m cerramos para almorzar. Yo como siempre, traigo mi almuerzo y lo caliento en uno de los microondas de la cocina.

Las chicas siempre van a comprar sus almuerzos al restaurante de la esquina sólo para ver al muchacho guapo que trabaja allí, pero siempre vuelven al café para comer conmigo; sólo compran para llevar. Cuando son las 2: 00 pm, volvemos abrir, porque a esas horas la gente desea un café cargado para no dormirse en el trabajo, es cuando comienza el trabajo pesado. Es mi doble turno.