Capitulo 27: Lágrima de dragón

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Sophia y Khilaf ya tienen la protección necesaria para crear el tanbarikh, salen de la Cueva de los Milagros para ir a un volcán con el objetivo de recolectar en una pequeña maceta suficiente suelo volcánico para que crezca el árbol que contiene la gema.

Luego de haberlo recogido, es tiempo de que Khilaf haga llorar al dragón pero antes que eso deben conseguir a un dragón, por suerte para ellos, cerca de los volcanes son los lugares preferidos por dichas criaturas, el suelo volcánico hace que los dragones se sientan cálidos y muy cómodos a pesar de las altas temperaturas.

—Sophia, prepara tus alas, después de esto deberás seguirlo —le dice Khilaf a Sophia.

—Estoy lista, puedes comenzar cuando quieras —responde Sophia luego de haber estirado y movido sus enormes alas.

Khilaf comienza a acercarse poco a poco a aquella sublime criatura quien de inmediato sospecha de las malas intenciones de Khilaf, desde la ultima vez que hizo llorar a un indefenso dragón, entre los mismos dragones se contó esa historia razón por la cual prefieren evitarlo cada vez que se acerque.

—Hola pequeño —dice Khilaf al pequeño dragón.

Pero este simplemente ignora tanto las palabras como la presencia de Khilaf.

—Quiero que me ayudes a ayudarte —continua Khilaf hablándole mientras Sophia solo observa con intriga.

El pequeño dragón sigue sin mostrar interés por lo que Khilaf tenga que decirle.

—¡Oh, vamos! ¿de verdad harás que haga las cosas por las malas? —Khilaf se queda callado por unos segundos esperando una reacción pero al ver que no pasa nada, procede a hacerlo por las malas —Entonces esto es lo que realmente quieres.

Khilaf chasquea sus dedos haciendo que aparezcan cadenas que amarran por todo el cuerpo a aquella pequeña criatura, al no ser una demostración propia de su poder, las cadenas son muy débiles pero ella no intenta siquiera liberarse, y eso es muy bueno para Khilaf puesto que lo que hará luego le resulta bastante útil haberla encadenado.

—¡Khilaf, tienes que hacerlo llorar, no matarlo! —le grita Sophia.

Khilaf la ignora y procede con su plan, comienza a meterse en la mente del dragón buscando y distorsionando sus recuerdos más lindos, creando discordia en su mente, hace que incluso sus recuerdos malos sean peor de lo que ella se acuerda, el pequeño dragón comienza a tratar de liberarse de sus cadenas pero por ahora le resulta imposible pues no lo esta haciendo con suficiente fuerza, Khilaf continua haciendo discordia, sus ojos empiezan a volverse de un color muy brillante y aumenta cada vez que él incrementa la cantidad de poder que utiliza para distorsionarle los recuerdos; es imposible para Khilaf no disfrutar de ese momento en el que ve su poder en su máximo esplendor, pero para ella solo es una tortura que aumenta cada vez más haciendo que no resista más y rompa las cadenas para irse volando lejos de donde se encuentra Khilaf, y es una pena porque ya faltaba poco para que Miss comenzara a llorar.

Sophia sale volando detrás de ella para evitar que sus lagrimas caigan en un lugar diferente a lo querido, a pesar de que el dragón se liberó de las cadena, Khilaf todavía sigue en su mente, en sus recuerdos puesto que ella sigue en el radio de alcance de él. Finalmente el pequeño dragón no aguanta más y se le sale una lágrima mientras esta volando tan lejos como puede, Sophia ve esa pequeña gota y concentra su visión en atraparla en la maceta que tiene suelo volcánico.

El objetivo de Sophia y Khilaf ha sido logrado, la lágrima calló en el lugar que ambos querían y solo queda esperar a que crezca el pequeño árbol que tiene en el la gema "Lágrima de Dragón", mientras eso pasa, Sophia se devuelve hasta el lugar donde estaba Khilaf para informarle que se había cumplido con el objetivo, pero a mitad de camino aparece una kirihayai de parte de él diciendo

"Ya te he ayudado a conseguir lo que querías, ahora ya no te seré útil continuaré con mi meditación y no tienes que preocuparte por el praesidium, aquí mismo te lo envío. –Khilaf".

Luego de haber leído la carta finalmente el árbol germina, un pequeño árbol sin hojas y de ramas secas, en medio de esas ramas esta la gema; detiene su vuelo y se va a lo más alejado del bosque donde no haya ningún tipo de criatura y ningún dios este para dejar ahí la gema; llega al lugar que ella considera adecuado, coloca la maceta en el suelo y crea una barrera que lo cubre por completo, pero crea varias capas para que el poder de la gema sea contenido y no perjudique a nadie.

Desaparece de ahí y va al salón principal del templo de Trems, y desde allí le le envía un kirihayai a Cosmo en el que dice

"Cosmo ya es tiempo de que me des la energía que vas a aportar, te espero en el templo de Trems, salón principal, tengo buenas noticias, ya se logró hacer la "Lágrima de Dragón". –Sophia"

Cosmo lee inmediatamente la carta y se apresura a ir al salón principal donde se encuentra Sophia.

—¿Cómo vas con la creación del tanbarikh? —pregunta Trems al ver llegar a Sophia.

—Ya logramos conseguir la gema principal, faltan los aportes de energía para comenzar con la elaboración del hechizo para hacer el tanbarikh.

—Aquí también esta Maísha —dice Trems señalando con su mano a Maísha comenzaremos a transmitirte nuestra energía.

—Pueden comenzar cuando se encuentren listos.

Maísha y Trems se preparan para transmitirle la energía, extienden sus brazos enfrente de ella, con las manos bien abiertas y comienzan con el proceso; acumulan la cantidad de energía en las palmas de sus manos que van a pasarle cada vez que van aumentando el nivel de poder, Sophia comienza a levitar poco a poco, hasta que han terminado, ambos dioses bajan sus brazos dándolo por finalizado.

—Con esa cantidad de energía será suficiente para que hagas el tanbarikh, además de la que tu misma aportes.- le dice Trems a Sophia.

—Más la energía de Cosmo, con eso bastará, gracias por su ayuda —responde Sophia haciendo una reverencia en señal de agradecimiento.

—¿Cómo que energía de Cosmo? —Pregunta Trems —Acabamos de darte suficiente energía, no necesitas la de otro dios.

—Es mejor que sobre energía y no que falte —responde Sophia.

—Esperamos que nuestra energía se use de la mejor manera para que no haya sido en vano —menciona Maísha.

—Sí, mi señora.

Luego de que los supremos se han ido del salón principal, aparece Cosmo preparado para repetir el mismo proceso.

—Eso es todo, a partir de aquí me encargo yo con Jádu —le dice Sophia a Cosmo cuando termina de pasarle energía.

Cosmo no le responde nada, solo inclina la cabeza en forma de reverencia.

Dulce vida destruida. (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora