Antes de ti

Capitulo 20

Hayley.

Cuando vi el auto afuera de su departamento di pequeños saltos, era mas que evidente que el era un amante de los deportivos, para lo cual el me compro uno negro, era hermoso, pero mi celular sonó, la voz de Nick retumbó por las bocinas de mi celular diciéndome donde seria la cena, Kerem solo me dedico una sola mirada, el sabia al igual que yo que al momento de emprender este largo viaje en carretera me estaría enfrentando a la decisión más difícil, es extraño dar un vistazo atrás y saber que en tan poco tiempo que eh estado con el lo tenga tan adherido a mi como cada extremidad de mi cuerpo, el camino era obscuro y cada minuto que transcurría se hacían eternos, respire hondo al ver el restaurante alado de la bahía, mis manos comenzaban a sudar y mi cuerpo a temblar, esto ya estaba echo, no había marcha atrás;cada paso que daba se sentía como volar, tome la bolsa de mi auto y salí de el, mire a los lados caminando directo a la puerta del restaurante, lo vi sentado con su cabello desordenado como de costumbre, bebiendo el líquido rojo de una copa, mis ojos comenzaron a cristalizarse mientras los de el me miraban fijo, llegue hasta la mesa y Nick se levanto, no podía ni verlo a los ojos sin querer llorar, me ayudó a sentarme y después el se sentó enfrente mío.

—¿Y bien?—dijo acabando con el silencio que había entre nosotros dos, pero lo que el no sabia era que entre mas silencio había yo podría mirarlo y grabarme su rostro por ultima vez.

—Si...—respondi mirándolo, el inclino un poco su cabeza y miro mis ojos, los de el se empezaron a tornar rojizos.

—Se cual será tu decisión de tan solo mirarte— mis lagrimas quería bajar pero tenía que retenerlas, sus ojos se dirigieron a la ventana esquivándome.

—Lo siento Nick—mi voz se quebró.—Pero no te puedo tener en mi vida de la manera en la que tu y yo queremos—dije cerrando mis ojos con fuerza tratando de no dejar caer ninguna lagrima.—Es mejor así, tu y yo sabemos que es mejor así.

—Repíteselo a el hasta que tu también lo creas—dijo seco, me levante de la silla sin ni siquiera mirarlo.— Cada despertar y cada noche para cuando llegue el tiempo...

—Solo los recuerdos vacíos de una mente inflexible se agote— dije junto con el citando mi frase favorita de El dolor mas grande.

—Espero que el te haya dicho que se va a ir a Rusia y que tal vez no regrese, dejándote a ti aquí sola, desamparada sin nadie a tu alrededor, por que el te va a dejar Hayley, el te va a destruir solo es cuestión de tiempo.— dijo frío, sus palabras empezaban a clavarse dentro de mis pensamientos.

—El no me dejaría.—el río.

—Solo recuerda Hayley que no puedes huir de ti misma— tome mi bolsa y gire sobre mis talones dispuesta a irme sin mirar atrás y caminar.— ¡ Y Hayley!—dijo en voz alta deteniéndome en seco.— Volví con Layla —sentí como mi sangre corrió rápido dentro de mis venas, como yo apretaba los puños y como mis lagrimas comenzaban a descender por mis mejillas al darme cuenta que no solo estaba perdiendo a un amigo si no a algo mas. Salí de ahí con la mirada baja, con mis lagrimas callendo poco a poco por mis mejillas, corrí hasta el auto entrando a el, saque las llaves de la bolsa, encendí el auto quería ver la silueta de Nick afuera de ahí pero el no estaba y ya no lo iba a estar de nuevo, Arranque el auto adentrándome a la carretera obscura, tome el teléfono y le marque a Kat.

—¿Hayley?—contesto desorientada.— ¿Esta todo bien?

—No, nada esta bien—dije destrozada.—No se quien soy, no creo saberlo, cada paso que doy se me hace mas difícil de sostenerlo, no puedo mantener nada estable ya no soy quien creí ser...— un silencio se escucho y de pronto no tenía ya nada por que llorar si no el por que luchar, pare en un lugar que no estaba segura de que era solo se miraba personas entrando y saliendo, tenía música era el único lugar con luz.—te voy a decir donde estoy, necesito que vengas a compañarme.—dije apagando el auto, saliendo de el y adentrándome a esa caverna, era un bar lleno de personas me senté en una mesa con dos sillones rojos, pedí whisky, dos personas se sentaron a mi lado.