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-Amor ya nos vamos, mira mi hermano Diego te trajo algo de ropa, necesitas ayuda...

-No por favor no quiero que me veas desnudo, me da pena.

-No corazón yo no, cómo crees, buscaré a la enfermera.

Andrea salió roja de la pena ella no se estaba ofreciendo a vestirlo, buscó a la enfermera y después fue a alcanzar a sus hermanos, Niall por su parte no había podido hablar con Alfredo y estaba esperando el momento propicio para decir toda la verdad.

Niall salió en silla de ruedas, lo condujeron hasta el carro y entre mis dos hijos lo subieron, Andrea iba con él en el asiento trasero

-Qué gusto ya no tienes vendado el brazo izquierdo

-Ya puedo moverlo un poco más

-Llegando a casa veré si ya puedo quitarle lo que trae en la cara —dijo Alfredo—

Niall sentía que la sangre se le iba de cabeza a pies, no quería que Andrea lo viera antes de que él le dijera la verdad.

Llegaron a casa y lo cargaron hasta el sillón...

-Bienvenido, te voy a presentar a mi esposo

-Mucho gusto señor, gracias por recibirme en su casa

-Esperamos estés cómodo, siéntete como en tu casa

-Siéntenlo a comer, veo que ya puedes sostener la cuchara, pero si necesitas ayuda con confianza dinos, te preparé sopa espero te guste

-Mil gracias por sus atenciones

Mi madre apareció en ese momento y aproveché para presentarle a nuestro huésped...

-Mira ella es mi mamá, somos vecinas

-Mucho gusto señora

-Mucho gusto mijo soy Kika y tú cómo te llamas?

-Mamá, el chico perdió la memoria no recuerda su nombre

-Y si se lo llevamos al cura a bautizar?

-No madre, no. Pero dinos tú cómo te gustaría que te llamásemos

-Si le preguntan a mi hermana seguro lo llama Niall —dijo Diego—

Niall escupió la sopa y no paraba de toser...

-Estás bien mijo?

-Sí señora Kika, es que estaba caliente disculpen

-Yo creo que es importante ponerte un nombre, no puedes seguir siendo "el paciente de Alfredo"

-Pues si te parece la palabra que más decías era ángel, te gusta? —dijo Alfredo—

-Sí, me parece bonito, gracias Alfredo

Niall terminó de comer y los chicos sugirieron subirlo a la recámara de Andrea, a Niall le invadió algo de temor, estaba a punto de darse cuenta cuál de ellos era el que le gustaba a su ángel, mi casa le resultaba familiar pues se parecía un poco a la casa en donde creció, pero al entrar a la habitación de mi hija, se sintió totalmente en familia

-Bueno Ángel, *dijo Diego cuando lo colocaron en la cama* ojalá puedas dormir entre tanto cabrón.

A Niall le dio risa la expresión de Diego y aprovechó para preguntarle...

-Y le gustan todos o tiene algún favorito?

-Puedes voltear? Mira...

A Niall le dio una enorme alegría voltear y ver un póster de él todo besuqueado. ("me ama a mi" pensó)

El Ángel de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora