LXXXVIII

17 2 1
                                    

                  

-Dios santo que pena se me pegaron las cobijas chicos ya deben tener hambre

-No se preocupe señora, Louis y yo ya hicimos desayuno, esperamos le guste

-Chicos, ustedes son nuestros invitados como creen?

-Señor, señora siéntense y déjense querer —dice Harry—

-Mmmm esto huele muy bien, y los demás?

-Zain tiene malestares, está embarazado

-Cómo?

-Si don Luis, bueno su esposa.

-Ah eso es normal, a mí me daban antojos terribles

-Liam está atendiendo a Niall

Alfredo llega de pronto

-Buen día a todos

-Doctor siéntate a desayunar —dice Louis—

-Gracias qué prepararon?

-Como no sabíamos qué les gustaba preparamos de todo

-Gracias, como amaneció el paciente?

-Pues creo que no durmió muy bien y no dejó dormir a Liam, yo me morí —dice Harry—

-Voy a verlo y regreso para desayunar

Alfredo sube y encuentra a Liam intentando apoyar a Niall para que se levante.

-Buen día, déjame ayudarte, se ocupan dos, qué pasa no dormiste bien?

-Ni durmió ni dejó dormir

-Te sientes mal Niall?

-No podía dormir, extraño a mi ángel

-Físicamente, cómo te sientes?

-Solo un poco de sueño pero bien

-En cuanto a la pequeña molestia no te preocupes, seguramente pronto se verán. Ayúdame vamos a apoyarlo en las muletas para que baje a desayunar, por cierto Silvia y Juanita quieren venir a visitarte

-Me dará mucho gusto verlas

-Guuuuuuuuuaaaaaaaaaaaac, Guuuuuuuuuuuaaaaaaac

-Qué le pasa a tu amigo?

-Está embarazado, bueno su esposa y él vomita, come chilaquiles verdes o duerme. —dice  Liam—

Zain sale del baño amarillo como un limón

-Estás bien? —pregunta Alfredo—

-Mareado, peor que si estuviera crudo

-Quieres que te revise?

-Sí por favor

Alfredo lo revisa y le dice:

-Tendrás que hacerte éstos análisis, mira puedes estar anémico, no puedes vivir a base de chilaquiles, debes tomar hierro

-Niall que afortunado eres de tener un médico en la familia, gracias Alfredo debo tomar esto en serio, voy a ser papá y tengo que ponerme muy fuerte para mi hijo

-Vamos a desayunar me quedé un par de horas extras y muero de hambre

Los chicos bajaron a desayunar, me pidieron invitar a Mark a comer-cenar por la tarde, quien diría que ese hombre que me llamó pidiendo consulta buscaba al chico sin memoria que estaba en mi casa.

El Ángel de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora