Capitulo 4: "Un gran pequeño amor"

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Desde lo que dijo Andrea, José Antonio tomo valor suficiente para poder decirle sobre sus sentimientos a la princesa Meztli. A tan solo unos cuantos kilómetros del reino Casandra noto la presencia de un gran ejercito que al poco tiempo los termino rodeando y no muy lejos de ellos se podía escuchar una voz que gritaba: "ataquen".

Tan rápido se escucho eso los soldados comenzaron a lanzar flechas las cuales algunas estaban impregnadas de fuertes calmantes una de ellas le dio a José que lo iso caer sin poder moverse. En ese preciso instante se volvió a escuchar la misma voz pero esta vez decía "quemen al gigante".

Al escuchar eso Andrea saco su espada cuando vio que los soldados comenzaron a acercarse y cuando estaba apunto de atacarlos sintió que la sujetaban del brazo haciéndola retroceder, era probable que su valor se estaba agotando o al menos eso era lo que ella creía pero la verdad era que se trataba de Jaya que al principio Casandra solo lo había visto como una sombra que la sujetaba pero que poco a poco fue tomando color y si lo reconoció y aun así ella al verlo bien se preguntaba si era su espíritu o solo no había muerto.

En ese instante la espada que sostenía Andrea comenzó a moverse sola y emitir una especie de vibración que esta a su vez comenzó a sacar un resplendor blanco que comenzó a expandirse rápidamente creando una especie de barrera pero aun después de ver eso el príncipe Diego ordeno a sus tropas a no detenerse. Una vez teniendo los en frente Andrea corrió hacia ellos pero algo la detuvo, como si una especie de pared estuviese frente a ella y era así solo que en vez de muro era un campo de energía que las protegía a ellas junto con el gigante. Esta les impedía el paso a los soldados pero el problema era que no tenía idea de como salir.

Andrea sin saber que hacer comenzó a empujar a el gigante bueno lo intentaba y mientras lo hacia repetía-despierta José tenemos que irnos-

Casandra al verla tan desesperada le decía

-Andrea tranquilizante pronto se resolverá

-como?! , quien nos ayudara?!-exclamo mientras seguía empujando a José o al menos lo intentaba.

Ambas estaban desesperadas y con un gran miedo, sabían que aquella muralla de energía no duraría mucho y que tan solo les quedaban unos minutos cuando de pronto-!!Alto!!-. Alguien grito con tal intensidad que detrás de todo ese ejercito se encontraba la princesa Meztli que corría hacia la barrera la cual con el solo rose de sus manos le permitió pasar dejándola acercarse al gigante.el cual al verlo comenzó a llorar.

En ese mismo instante el al verla despertó y le dijo-no llores- y rosando sus mejillas de la princesa con sus grandes manos lo volvió a decir.-no llores-

Al escuchar eso la princesa le respondió.

-te extrañe tanto

-yo también

-te extrañe tanto

Entre los pensamientos de José solo repetía una y otra vez la misma palabra"gracias",el solo podía pensar en eso. Al ver este suceso el príncipe Diego retiro sus tropas y comprendió de que solo así vería feliz a su querida hermanita,así que mando a alguien para que los escoltara hacia el castillo donde Diego y Jose Antonio esperaban a su llegada.

Cuando llegaron Diego se acerco a su hermana y con lagrimas en los ojos le dijo.

-perdoname por favor

-tu eres mi hermano y no te puedo odiar

Mientras ellos se reconsiliavan Andrea solo los veía y decía.

-creo que voy a llorar

-Andrea contrólate

-es que no puedo

-como es posible que hace unos instantes estabas dispuesta a pelear con cientos de soldados y ahora estas llorando por esto

-soy sentimental ok

-si ok pero sera mejor irnos ya no crees

-si vayámonos

Justo antes de que desaparecieran en el bosque la princesa las detuvo y les dijo.

-esperen tengo que agradecerles de algún modo

-no... no es necesario

-espera un momento Casandra si nos quieren recompensar quienes somos para negarles ese derecho

-entonces que necesitan-sonrió la princesa-

-caballos para no tener que seguir a pie

-de esos no tenemos pero tenemos algo mejor-contesto algo dudosa

-que son dime

La princesa no le dijo nada ya que al parecer la gustaba la expresión de impaciencia de Andrea.

-les presento a Tena y Vera sus nuevos pegasos

-pegasos genial

-espero que les sirvan para su viaje en busca de Vegetta

-como es que lo sabe-le respondió de inmediato Casandra

-solo con escuchar tu nombre me lo dice

-tan bien conoce la leyenda-pregunto Andrea

-todo mundo conoce la leyenda, bueno adiós y suerte

Poco a poco ambas se iban alejando montadas en sus pegasos ya que eran muy flojas para caminar y al parecer estos las ayudaran.

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