*Capítulo X: Flipo con este tío*
Él me miró, yo lo miré, nos miramos, quedando ambos congelados por esta desgraciada coincidencia. ¡Sabía que esto no podía salir bien! Pero no pensé que podría llegar a este punto. Alejandro se levantó de la mesa y fue hacia él, que mantenía la mirada sobre mí.
-Hijo, ¡al fin has llegado!-lo abrazó y él le correspondió inexpresivo-Mira, ven, te presentaré a mi esposa.
Lo condujo hacia mí. Me levanté rápidamente completamente nerviosa, creo que estaba pálida, o tal vez roja, no sé la verdad… ¡Joder! Odio esto. Me coloqué enfrente de él y sonreí, bueno, intenté sonreír.
-Hola…-dije tan bajito que me parece que no se escuchó, Alex alzó una ceja y me abrazó.
-Rubí, este es mi hijo Luca. Luca, ella es mi esposa.
-E-encantado… -soltó cómo si no me conociese. Cogió mi mano y posó un beso sobre ella, me estremecí.
-Igualmente-musité como pude, aún perpleja ¿qué clase de broma es esta? Si lo es… ¡No me gusta una mierda! Y cómo no lo sea… ¿qué cojones voy a hacer ahora?
Alex sonrió.
- Espero que oz llevéis bien y que…-su móvil comenzó a sonar y volcó los ojos-Lo siento mucho, tengo que cogerlo, en un momentito vuelvo…
Se giró y salió por la puerta, descolgando el teléfono y alejándose, llenando el silencio del comedor con su voz lejana. Los sirvientes seguían inmóviles, mirando a cualquier parte, no sé si observándonos a Luca y a mí, o simplemente aburridos, queriendo largarse de aquí y irse a su casa, no a la “pensión” que tienen aquí, si no su verdadera casa.
-Claro padre-Luca asintió y cuándo perdió a Alejandro de su vista me miró serio-Rubí ¿podrías acompañarme un momento?
Miré a los empleados que seguían sin inmutarse y asentí, lo más seguro es que Luca no quiere escándalos en su casa, ni que nadie sepa más de la cuenta, sobretodo porque, ni siquiera Alejandro sabe que nos conocemos, por lo que puse observar cuándo nos presentó…
-Claro.
Cuándo salimos de la casa; por la puerta trasera, Luca me agarró fuertemente por el brazo, haciéndome, prácticamente correr por el jardín, guiándome a un banco que estaba situado bastante lejos de la casa.
¡Maldita sea! Este cabrón me está tratando cómo a un trapo, por lo único que no lo pongo en su lugar… es porque a fin de cuentas, no me conviene que algún sirviente chismoso o el mismísimo Alejandro se entere de que yo… pues que yo… ¡Pues que quiero demostrarle al engreído de Luca que para irresistible, irresistible yo, joder!
Se giró en plena marcha.
-¡¡¡Qué demonios haces aquí Rubí!!!-me soltó el brazo bruscamente y me miró muy enfadado. Y posé una mano sobre mi cadera. ¿En serio me lo está preguntando? ¿Es que acaso este tío es un imbécil supremo? Es muy simple, estoy aquí, porque me casé con su padre y ahora soy su hermosa y sexy madrastra, ni más ni menos. Alcé una ceja - ¡No me puedo creer que tu obsesión por mí te haya llevado a casarte con mi padre!-Flipo, evité soltar una carcajada ¿Podría ser más egocéntrico? No, no lo creo, patético-¿Es que te has vuelto loca? ¿No te das cuenta que podría ser tu padre? ¿Cómo es posible que juegues así con sus sentimientos? ¡Pero te voy a advertir una cosa…! Cómo le hagas daño, te juro que…
¡Se acabó! ¡Me cansé! A mí este egocéntrico de mierda no me va a tocar los ovarios…
-¡¡¡Qué!!! ¡A ver chulo! ¿Con qué me vas a salir ahora? ¡¿No te enteras de que yo no sabía que Alejandro es tu padre?! ¡¡¡Eres imbécil o que te pasa!!! Jamás me casaría con él si hubiese sabido esto ¿¡Me oyes!?
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Nunca Podrás Conmigo
Misteri / ThrillerUna chica mala, mentirosa, perversa, que le encanta jugar con los demás a su antojo. Una persona manipuladora, calculadora, soberbia, altanera y fría que hace que con sólo mirarla sientas miedo por todo tu cuerpo. Pero toda su verdadera personalidad...