20.- Descubrimiento.

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Al día siguiente, estaban todos no muy cómodamente instalados en un compartimiento del tren que los llevaría a la estación de King's Cross. Los asientos no eran suficientes, así que Lorcan y Louis se habían sentado en el suelo, en medio de ellos. Estaban tan apretados que Tessa estaba prácticamente sobre el regazo de Scorpius, para su diversión y disgusto de James.

—¿Irás a la boda de Teddy? —le preguntó mientras James y América discutían sobre algo completamente estúpido, como siempre.

Él asintió. —Sí. Él es parte de nuestra familia, por así decirlo, así que tenemos que ir.

Suspiró, acomodando su cabeza sobre su hombro. —Eso será tan incómodo, hombre.

Scorpius se rió, probablemente imaginando lo mismo que ella. Harry Potter y Draco Malfoy, cerca uno del otro. Probablemente esto acabe con un duelo a lo muggle.

—Vamos, será divertido.

—Y además, mis tíos acaban de divorciarse, y Hermione aparecerá escoltada por tu padre. —se estremeció al imaginarse la escena—. Dios.

—Y eso que se divorciaron pacíficamente. —intervino Louis—. Imagínate si se hubiesen divorciado por un engaño.

—Literalmente sería un derramamiento de sangre. —rió Lorcan.

—¿Ustedes van a ir? —le preguntó Scorpius a Claire y Vanessa.

Ellas asintieron, pero fue la rubia quien contestó. —Sí. Según Teddy, somos como de la familia, y ya que pasamos la Navidad con ustedes, iremos.

Tessa sonrió. —Teddy las ama. Tiene una debilidad por ustedes.

—Por nosotras tres. —corrigió América—. Y por Lily.

—Sus princesas. —se burló James, haciendo reír a los otros chicos.

Tessa les dedicó un mohín. —A ustedes nadie los quiere.

—Claro que sí. —exclamó James, fingiendo estar ofendido—. Tú nos quieres.

—Sólo por conveniencia. —se burló Tessa, siguiéndole el juego—. Nadie quiere llevarse mal con ustedes. Probablemente nos harían una broma mientras dormimos o algo así.

—Y tú te vengarías al día siguiente. —rió Lorcan.

—Como la vez que Lorcan metió una araña del tamaño de un puño en la blusa de Tessa. —recordó Louis—. Y ella se vengó cambiando su champú por poción pegajosa.

Louis, Lorcan, James y Tessa se carcajearon ante el recuerdo, mientras los demás simplemente sonreían al imaginarse la escena.

—O la vez que teníamos siete años, y James había construido una casa del árbol. Tessa se subió allí y él la encerró. —dijo Lorcan, negando con la cabeza—. La mantuvo allí hasta la noche.

—Nunca vi a papá tan enojado. —comentó James—. Me castigó por un mes.

—Te pasa por idiota. —criticó Tessa, estremeciéndose ante el recuerdo—. Ese día pasé mucho miedo.

Scorpius frunció el entrecejo. —¿Por qué estabas asustada?

—Yo en esos tiempos todavía tenía pesadillas. —le explicó—. En las noches soñaba con mis días en el orfanato. Muchas veces tenía que dormir con James.

Scorpius fulminó al hermano mayor con la mirada. —¿La dejaste sola en la noche sabiendo que tenía pesadillas?

Él se encogió de hombros. —No puedo decir que fuera inteligente.

Tessa Potter y los Herederos Tenebrosos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora