Patito Feo → HunHan

u n o

El regreso.

Un año fue suficiente para que se borrara el recuerdo de Lu Han en toda la facultad, menos en Oh Sehun. No es que estuviese contando los días, las semanas, los meses, o quizá los segundos. No es que Jongdae le estuviese preguntando a cada momento «¿No me digas que extrañas a Patito» y claro que no, no es que se hubiese ganado un golpe de Minseok por preguntar acerca del paradero de Luhan.

Un año después de aquel momento, la facultad dio un vuelco inesperado. Uno que incluso revolucionó el corazón de Sehun.

«Oh, ¿cuántos años tiene?»

«Dicen que viene de China»

«Es muy guapo, le vi saliendo de la oficina del director»

«¿Cómo se llama?»

Los comentarios acerca de un nuevo estudiante proveniente de China, estaban resonando en cada lugar de la facultad. Todos estaban a la expectativa de quién podía ser, y Sehun especialmente, se sentía indescriptiblemente nervioso; como todo lo que tuviese que ver con «China».

Era un lunes común, Sehun estaba reunido en la mesa de los populares, que no eran naa más que Jongdae, Kris, Joonmyun y él. Jongdae estaba comiendo las frituras de la bandeja de Joonmyun mientras Kris se dedicaba a revisar su teléfono celular.

Los comentarios acerca del chico nuevo tenían pies propios, por lo que en menos de un segundo, Jongdae estaba afilando esa sonrisa gatuna que le caracterizaba, su pelo castaño perfectamente peinado y su uniforme en el lugar correspondiente. Era el líder. Un puto dios.

—Creo que una apuesta no vendría mal —dijo Jongdae, a modo broma—. Aunque Sehun sea un aburrido retirado a corta edad, aún podemos divertirnos. He escuchado que el chico es muy guapo.

Sehun, a su lado, rodó los ojos. Como le molestaba la presencia de Jongdae, todo él exudaba una maldad tan siniestra que era cansina de soportar, mas debía morderse la lengua porque Jongdae era su hyung y porque tenía mucha voluntad en ese grupo estúpido de populares.

—Hyung, bien sabes que.... —Y Sehun puede jurar que su intención era decir «Bien sabes que no estoy dentro del juego» pero su boca mudó y su lengua se enredó cuando, por la puerta principal de la cafetería, entró una figura de piel pálida, ojos claros y cabello castaño. Todo su cuerpo se puso en alerta—. Lu..., Han..

—¿Luhan qué, Sehun? ¿Hasta cuándo va a tratarse de él? —Jongdae se echó a reír pero su risa murió cuando Joonmyun y Kris miraron hacia el mismo lugar. Y para su sorpresa era Luhan, Patito Feo, después de un año—. Esto es imposible, no puede ser él.

—Sí..., si es él —dijo un Sehun nervioso—. ¡Esos ojos, Chen, esos ojos los reconozco a kilómetros, Chen yo vi esos ojos de cerca, Chen es Luhan, ¡yo sé! —A estas alturas, Sehun estaba alterado, para qué ocultarlo.

Jongdae gruñó y le dio un manotazo a Sehun en el brazo para que pudiera calmarse un poco. No funcionó, cabe destacar.

—Cálmate —demandó, Jongdae—. ¡Y no me llamas Chen, no me gusta y lo sabes!

Luhan estaba solo, no tenía ninguna compañía. Llevaba el uniforme de la facultad perfectamente pulido sobre él, no tenía gafas de pasta gruesa y su pelo estaba peinado con meticulosidad, y teñido de un color castaño claro, parecía un modelo; ni la sombra de lo que era antes. Muchas chicas murmuraban y sonreían a su alrededor, Luhan sólo les obsequiaba miradas indiferentes y resoplidos cuando éstas chillaban a su paso.