Memorias. /Yaoi/ [Finalizada]

Capítulo 37

Thaiel estaba depositado en la silla junto a la cama de Drew mirando como el otro joven dormía. Ya había pasado por esta situación tres veces y cada una se sentía peor que la anterior. Pasó sus dedos por el brazo de Drew hasta llegar a su mano y así envolverla con la de él.

Sus amigos y familiares estaban en diferentes partes de la habitación hablando entre ellos, se habían preocupado cuando recibieron la llamada de Thaiel pero después de que el medico les dijo que fue solo otro ataque común se habían relajado. Aunque lo único que no dejaba de inquietar al pelirrubio es el hecho de que hayan pasado tres días desde el accidente en la discoteca y Drew aún no despertaba ni daba indicios de hacerlo.

—¿Como va el embarazo?—Le pregunta Tom a Ana los cuales están depositados en los dos sillones junto al armario del pequeño cuarto. Todos estaban entretenidos en lo suyo mientras que Thaiel no dejaba de pensar en lo que podría estar ocurriendo con el joven acostado en la cama. Tal vez las palabras del medico debían haberlo tranquilizado pero no era así, sentía que no le estaban diciendo algo o habían cometido un error.

La chica sonrió y se encogió de hombros.—Fui un par de veces al medico y hasta ahora todo va bien.

—Me alegro de que así sea.—Ambos amigos se sonrieron.

Toc, toc, el sonido de dos golpes en la puerta alertó a los presentes y a más de uno le sorprendió la aparición de Lea. Su cabello rubio estaba sujeto en una coleta alta y parecía que acababa de salir de trabajar

—Hola.—Saludó. Todos ya sabían lo que ella había hecho por Drew y Thaiel el día de la fiesta, sabían que había sido de gran ayuda y todo lo que había hecho anteriormente solo había sido porque estaba siendo chantajeada por Vanessa, nadie le guardaba rencores.

Ella se acercó hacia la cama.—¿Cómo esta?—Le pregunto a Thaiel.

Este se volvió encontrándose con sus ojos—El medico dice que fue solo un ataque, pero Drew no despierta desde hace días.—Murmuró.—Me preocupa.

Silenciosamente Lea se acercó hacia Drew, el joven estaba con los ojos cerrados, completamente dormido. Simplemente parecía estar descansando.—Seguramente sigue durmiendo porque su cuerpo se siente agotado y se lo pide, dale un poco más de tiempo.—El contrario asintió.—¿Donde ocurrió el ataque?

—En una discoteca a un par de calles de aquí.

Matt miró a Thaiel—¿Y qué estaban haciendo?—Aquella pregunta se había vuelto un poco incomoda teniendo en cuenta que habían estado a punto de tener sexo, pero lo habían interrumpido en el ultimo momento.

El pelirrubio respondió.—Nos estabamos besando.

Todos en la habitación se paralizaron al oír eso, seguramente se esperaban cualquier cosa excepto escuchar que se estaban besando. Se sentían felices de escuchar aquello, por fin estaban volviendo a ser lo que eran, una pareja que se amaba o por lo menos a eso se encaminaba.

—¿Y ahí fue cuando ocurrió el ataque?—Intentó averiguar Zac depositándose en el apoya brazo del sillón en el que estaba Ana.

Thaiel asintió, tal vez él había sido el causante de que a Drew le ocurriera eso, pero no pudo evitar el besarlo. Pensó que había sido una buena idea pero tal vez solo había empeorado las cosas. No podía dejar de pensar en lo que ocurriría cuando Drew despertara y su mayor miedo era el que cuando este lo hiciera volviera a olvidarlo. Justo como después del accidente. Cuando sintió que su corazón se había detenido, el que Drew no lo haya reconocido fue lo peor que le pudo haber ocurrido. Sintió que se estaba cayendo en pedazos con solo una pregunta.

¿Quién es él?

Era una herida que había sanado, pero su cicatriz permanecería siempre plasmada en su pecho. No quería volver a sentir aquello de nuevo.