Un año más tarde.
Thaiel alzó la mirada encontrándose con sus ojos azules los cuales estaban brillantes reflejados en el alto espejo de pared. Su cabello peinado hacia atrás, un traje negro se ajustaba perfectamente a su cuerpo en este día tan esperado.
Una sonrisa se dibujaba en sus labios por inercia, es que se le hacía imposible no encontrarse tan feliz sabiendo que estaba a punto de casarse. Pero no solo eso, sino que se estaría casando con la persona que más amaba en su vida. Por la que más había luchado y finalmente había obtenido lo que tanto anhelaba. Poseerlo.
El año que habían dejado atrás no había sido el mejor de todos. A pesar de que las cosas mejoraron después de que Drew recuperara su memoria, aquellos recuerdos que habían construido en esos meses, ese dolor que habían sufrido no sería olvidado fácilmente.
Después de ese incidente en la clínica Vanessa renuncio completamente a Thaiel. Tuvo que darse por vencida y permitirles ser felices a ambos jóvenes. Pero no solo eso, sino que estaba pagando los tratamientos de Teo, el cual ya había sido operado un par de veces y de a poco se iba recuperando. Lea y él se habían mudado definitivamente a Boston, pensaron que sería lo mejor para comenzar su vida. Así que visitaban a Drew y a Thaiel con bastante frecuencia.
La familia de Vanessa continuó con su tan aclamado negocio familiar poniendo en un puesto bastante alto a su hija, así que hace tiempo que nadie sabía nada de ella. Había rumores de que había vuelto a Madrid. Otros decían que había conocido a un chico y estaba por mudarse a Nueva York con él. De todas formas, a todos le daba igual su vida, con tal de que no volviera a interferir en las suyas todo estaría en orden.
—¡Eh Romeo, que bien te ves!—La voz de Jack atrajo la atención de Thaiel.—¿Nervioso?
—Siento que voy a vomitar.—Admitió el pelirrubio.
Su amigo le dio un golpe juguetón en el hombro.—Tranquilo, nadie va a comerte ahí afuera.
Un suspiro se escapó de los labios de Thaiel, sus manos estaban sudando, realmente estaba asustado. Tenía miedo de decir algo que arruinara toda la perfección que habían estado buscando al planificar esta boda. Aunque tenía que admitir que tanto él como Drew querían algo pequeño y bastante personal, sus familias y amigos no lo permitieron. Ellos querían un fiestón que todos recordaran por mucho tiempo—El día que te cases te diré las mismas palabras y ahí tú me dices si ayudan o no.—Soltó Thaiel.
Jack sonrió para sí mismo y mordió su labio inferior, la idea de casarse con Luke lucía tentadora ahora que lo pensaba. ¿Quién diría que ahora estaría pensando algo como eso después de todo lo que habían pasado con el otro chico para llegar a convertirse en pareja? Pero bueno, eso era parte de otra historia. Por ahora toda la atención tenía que recaer en Drew y Thaiel.
La puerta del cuarto donde estaban ambos jóvenes se abrió de repente mostrando la figura de Ana la cual lucía un vestido color marfil no muy escotado llevando a su pequeño hijo en brazos, el cual dormía plácidamente.—Todo listo.—Dio el aviso.—¿Asustado?—Levantó una ceja hacia su amigo.
Thaiel puso los ojos en blanco.—Vámonos que quiero casarme.
###
Matt arregló el moño de su hermano menor mientras miraba sus ojos cafés, su respiración salía tensa, no dejaba de estar inquieto. Se notaba de lejos que estaba nervioso.—Tranquilo Drew, todo saldrá bien.
ESTÁS LEYENDO
Memorias. /Yaoi/ [Finalizada]
RomanceLa realidad se difumina y todo se convierte en memoria. Hasta tú, poco a poco, has dejado de ser un deseo y te has convertido en un recuerdo. "Segunda parte de la novela Negación"