Capitulo 3:"Imbécil"

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-¿Realmente me estas escuchando? - Le pregunte a Madison mientras corregía un par de ejercicios de Matemáticas que le había puesto - Están mal, y te lo he explicado ya mil veces. ¿Qué te está pasando? Un día lo haces bien y otro lo haces mal - la regañe.-No lo sé. No me puedo concentrar bien - dijo - Disculpa.-¿No te puedes concentrar? - Alzo sus hombros - Yo sé que soy irresistible pero deberías poner tu mente en las matemáticas no en mi - le dije.-¿Perdón? ¿Escuche mal? - Me miro indignada - Primero: Créeme que si no me puedo concentrar no es por ti, egocéntrico. Y segundo: Mi mente está en mil cosas que ni puedes imaginar, no solo en las matemáticas.La bibliotecaria nos mando hacer silencio por nuestro tono de voz alto. -Escucha - dije en susurros - No puedo seguir malgastando mi tiempo así. Esto te lo he explicado ya varias veces, mañana es tu prueba y tienes que sacar una nota excelente.-Lo sé - me respondió en el mismo tono- Pero es que no sé qué me pasa, de verdad quiero aprobar pero esto es difícil.Canas verdes, eso era lo que ella me iba a sacar. ¿Cómo es posible que no entienda un contenido que ya le he explicado un montón de veces? Si ella no aprobaba el profesor pensaría que no la quise ayudar y no me darán los puntos en otra materia y eso no me convenía. Algo tenía que hacer para que la rarita aprobara con la mejor nota de la clase, después de mí, Claro. -Rara, hagamos algo...-Deja de llamarme de esa forma. Respétame - Me interrumpió.-Lo siento, ya me acostumbre a decirte así. - Iba a decir algo pero no la deje - Voy hoy a tu casa. Sacrificare mi tarde para explicarte nuevamente y ponerte a practicar ¿Te parece? Madison lo pensó por unos minutos hasta que acepto. Ambos teníamos clase así que fuimos a nuestro salón, llegamos separados pues no nos gustaba que nos vieran juntos ¿Qué pensara la gente cuando me vea con ella? Tenía que ahorrarme esa vergüenza. Durante la clase se me vino a la mente una frase que Madison había dicho: "Mi mente está en mil cosas que ni puedes imaginar" Y otra vez volvía a mí esas ganas de saber qué es lo que le sucede a esa niña. ¿Qué es eso tan grande que la afecta? ¿Eso que nadie me quiere decir? Odiaba esa sensación de que algo estaba pasando y todos me lo ocultaban, esas ganas de querer saberlo todo. Ya hacia una semana que le estaba dando clases a Madison y pues digamos que le agarre cariño. Muy poco aunque no se lo demostraba mucho. Cuando estaba con ella no mencionaba el tema de su chaqueta, pero admitiré que varias veces tuve ganas de quitársela y ver que tenía en sus brazos pero me controle.El timbre de salida sonó y todos tomaron sus pertenencias retirándose del aula. "Te espero a una cuadra del colegio" le dije y ella asintió. Camine hasta la salida y justo ahí me encontré a Mary, una chica con la que salí hace unas semanas atrás. Ella me veía como esperando que dijera algo y yo solo sonreía sínicamente.-No me llamaste mas - dijo.-¿Debía hacerlo? - pregunte.-Se supone.-No pequeña, no lo creo. - Me moví y avance dándole la espalda.Yo no llamo dos veces a la misma chica. Las disfruto y luego, si ellas quieren, podemos mantener una amistad lejana. Suena cruel, pero soy así.Madison me hizo esperar más de 20 minutos parados como un idiota y eso era otra cosa que odiaba. No hay nada peor que estar parado en plena calle mirando a los lados mientras todo el mundo pasa y te ve, eso hace que me sienta escaneado por todos, lo acepto no están malo cuando las chicas son las que me observan pero cuando es cada persona que pasa por ahí se vuelve molesto. Cuando la niña se digno a llegar ni una disculpa me ofreció por el tiempo que se demoro.-¿Nos vamos? - pregunto y empezamos a caminar.-¿Por qué tardaste tanto? - Le pregunte - espere como un imbécil más de 20 minutos.-Esperaste como lo que eres - dijo - además me distraje haciendo cosas.-¿Me dijiste Imbécil?-¡No! Tu solito te llamaste así y yo lo afirme - sonrió falsamente - Estas lento hoy. -¿Qué te pasa, rara? - le pregunte.-A mi nada. ¿Por qué?-Me estas atacando -¿Por decir que eres imbécil? - Rio - bueno no estoy mintiendo, ¿Sabes el significado de esa palabra? - No me dejo responder - ¡Obviamente no lo sabes! Eres tan imbécil como para saberlo. Te explico: Una persona "imbécil" es aquella que es tonta, poco inteligente o que sufre una deficiencia mental. Y solo un "Imbécil" como tu es capaz de tratar a una mujer como si fuera basura desechable. "Auch" Golpe bajo. Me dolió.-¿De qué hablas?-Y ¿Todavía tienes el descaro de preguntar de que hablo? - Negó con la cabeza- Vi la forma tan imbécil con la que trataste a Mary, y ella no es la única que he visto llorar en el baño por tus tratos. O sea ¿Qué te crees, Harry Styles? Tú no eres mejor que nadie para tratar a una persona así. - me grito.-No es tu problema lo que hago con las mujeres que salgo. ¿Y sabes qué? Si eso me hace ser imbécil, pues me encanta serlo.-Tienes razón, no es mi problema - camino más delante - Mantente a una buena distancia de mí, me da vergüenza que me vean contigo - dijo.No quise seguir discutiendo pues justo a esa distancia tenía una buena vista de su perfecto trasero. Si tan solo ella supiera lo que estaba pasando por mi mente en ese momento me estuviera insultando y hasta golpeando. Que lastima que ella sea tan rara, porque si no hace rato hubiera sido una más de mi lista, me gustan las rubias pero ¿Por qué no intentar con una morena? Ya lo hice una vez con su hermana, romper mi regla de "Solo rubias" dos veces no sería tan malo. Pero por desgracia ella no era mi estilo, nunca me metería con alguien como Madison Booth.Llegamos a su casa, era grande. Al entrar ella pego un grito avisando que había llegado, cosa que me causo risa, se veía tan graciosa. -¿Quieres algo de comer? - pregunto seca.-Si no me vas a envenenar, Entonces sí - rio ante mi comentario.Fuimos hasta la cocina, olía exquisito y con el hambre que cargaba seguro me comería una vaca entera.Ella me sirvió un gran plato de pasta en cambio ella no se sirvió ni la cuarta parte, Fue muy poco lo que coloco en su plato.Nos sentamos en un mesón que estaba allí, comimos en silencio, la observe detenidamente, comía despacio.-¿Te puedo decir algo? - le pregunte.-Aunque te diga que no, de todas formas lo harás.-Cierto. Madison tú no eres una mujer... ¿Como decirlo?... No tienes mal físico como para que estés acomplejada. Me miro mal.-¿Acomplejada? - Soltó una pequeña risa irritante - Obvio no, Daria todo por comer el mismo pedazo que te estás comiendo tu pero no puedo. No porque este acomplejada, si no por... - su mirada se entristeció - olvídalo.-No, no. Dime, ¿Por qué no puedes?-¿Harry no has escuchado un lema que dice: "Mientras menos sabes mas vives"?- negué con la cabeza - A veces en esta vida es mejor no saber una que otra cosa.La mire a sus ojos marrones esperando a que su mirada me dijera algo mínimo, pero nada. A la cocina entro una mujer madura, blanca con cabello negro corto y liso, estatura mediana, muy parecida a Madison, supuse que era la madre.-Hija, ¿No me dijiste que teníamos visita? - dijo la mujer y yo sonreí.-Madre, el es Harry - me miro - Harry ella es mi madre.-Mucho gusto Sra. Booth, yo soy el excelente tutor de su hija.-¡Oh! Con que así le dicen ahora - Madison y yo nos miramos las caras, ella se sonrojo - No me digas Sra.; Dime Nina.-Pues Nina, no es lo que usted cree, yo solo le doy clases a su hija - dije.-Exacto mamá, yo no saldría con un imbécil como él - aporto la rara.-¡Madison! Esa no es forma de hablarle a tu compañero, ¿Cómo crees que se sentirá? - la reprendió su madre.-Nina, su hija es muy mala conmigo. No entiende que eso hace que mi autoestima roce el suelo- dije haciéndome la víctima - Por cierto su comida está muy rica.-Hija te agradecería que no le hables más así a este joven. Además se ve que es muy buena persona. - reprimí mi risa ante aquello.-Pero...-Me voy para que estudien - Nina se retiro sin dejar que su hija se defendiera.Me fulmino con la mirada. Y yo solté la risa que estaba aguantando.-Eres un manipulador de lo peor - dijo.-Lo sé - seguí riendo.Al terminar de comer, subimos a su habitación. Era amplia, con computadora, cama matrimonial pero adornada como una niña de 10 años con sus peluches alrededor, paredes pintadas de rosa y morado, un gran televisor pantalla plana, juegos de video -Eso sí era extraño en el cuarto de una chica- Unos cuantos posters de sus bandas favoritas mas una pared decorada con fotos de ella con su hermana, su amiga y su familia, un closet grande, hasta tenía una mesa para estudiar. "Esta chica sí que debe ser consentida" pensé.Allí me dedique a explicarle mil veces más los temas que iban para la prueba del día siguiente, no me iría hasta que mínimo hiciera 50 ejercicios completamente excelentes. Haría que la cabeza le doliera toda la noche pero Madison tenía que aprobar el examen.¿Saben una cosa? Ella en ningún momento se quito la bendita chaqueta que yo tanto odiaba. ¿Cuál era el misterio?

No debí juzgarla HarryStyles&EmilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora