La observe dormir con dulzura en mi pecho, mi brazo la abrigaba junto a las sabanas, hacia frio y ambos necesitábamos calor, por más que mi ropa fuera gruesa y la pijama de ella fuera muy cubierta nuestros cuerpos se erizaban con la temperatura por debajo de cero que hacia esa noche. No sabía exactamente qué hora era, calculé que debían ser la una o dos de la madrugaba, yo solo había dormido un par de horas y me desperté por una pesadilla en donde perdía a Madison, al despertar me tranquílese de verla a mi lado, con sus ojos cerrados y descansada después de haber discutido conmigo esa noche cuando le fui hacer compañía como habíamos quedado en la tarde. Volvimos a pelear por culpa, me atrevo a decirlo, de su hermana. Ya que Mellany le había dicho un montón de cosas horribles por haberme perdonado tan fácilmente además que sabía que permanecería la noche entera con su hermana en su cuarto sin que sus padres supieran, eso la había irritado aún mas pues quería contarle todo a su padre pero le pedimos que no lo hiciera, fue difícil convencerla pero lo logramos, o más bien, yo lo logre después de hablar a solas con ella y explicarle lo que mucho que necesitaba estar con Madison en ese momento."-Si alguna vez amaste a alguien entiéndeme - esas fueron mis palabras.-¿La amas? - pregunto sorprendida.-Lo que siento por ella no tiene explicación - use esas palabras para responder esa pregunta tan comprometedora.""Amor" Esa palabra que tiene tanto significado, yo amo a mis padres porque fueron los que me dieron la vida, amo a mis hermanos, amo a mi familia, amo a Dios, pero ¿Amo a Madison? Amar es algo muy serio, esa palabra no se le dice a cualquier persona si no lo sientes, reconozco que un par de veces lo hice para conseguir a una chica pero era todo un juego, nunca antes había dicho un "Te amo" sincero a un mujer.Pensaba en aquello mientras admiraba a mi morena descansar, acaricie su cabello lentamente, respiraba su aroma, aquello me encantaba pues era como una especie de droga para mí. Y fue allí cuando me di cuenta que lo que sentía por ella era demasiado fuerte, no podía pasar un solo día sin escuchar su voz, sin su compañía, sentía esa necesidad de protegerla de todo y de todos, quería verla sonreír todo el tiempo, cada vez que me besaba sentía que ya había encontrado mi razón de vivir, todo eso quizás significaba que yo la amaba, pero decírselo me daba miedo que cualquier otra cosa que hubiera hecho antes. Y mi temor no era hablar y decirlo sino que ella no me creyera pues últimamente en nuestra sociedad muchos dicen "Te Amo" sin sentirlo ya que simplemente lo utilizan como medio para tener a una mujer en la cama, yo lo hice varias veces y mi temor era que Madison se dejara guiar por eso. Pude ver como se estaba despertando, tal vez por culpa de mis carisias, se aferro más a mí y con un suave movimiento me miro a la cara. Visualice ese rostro, que yo consideraba perfecto, gracias a la luna que nos alumbraba, ella sonrió y me pregunto porque no estaba dormido, yo solo le respondí que no tenia sueño y que ella podía seguir en lo que estaba pero tampoco lo logro.-A veces pienso que mi hermana tiene razón - dijo cortando un silencio que se había formado entre nosotros.-¿A qué te refieres? -Que tú me lastimas y yo fácilmente te perdono, soy una especie de masoquista pero el caso es que yo ya no puedo...No termino la frase.-¿Ya no puedes, que? -Ya no puedo estar sin ti.Hice que se acercara a mí y la bese dulcemente en los labios.-Yo tampoco puedo permanecer sin ti -susurre.En sus ojos interprete tristeza, algo le pasaba y no quería decirlo, se lo pregunte pero me dijo que estaba bien. Dejo de mirarme, se acomodó como estaba inicialmente y empezó hacer círculos en mi abdomen por encima de mi camisa, me causaba un cosquilleo extraño pero me gustaba, nuevamente permanecimos callados por varios minutos hasta que ella se sentó en la cama recostada a la pared, acto seguido yo hice lo mismo mientras ella ponía su cabeza en mi hombro.-No puedo dormir - dijo.-Ya somos dos.Me miro a los ojos y tomo de mi mano con sutileza. -Harry, si yo algún día llego a partir prométeme que harás tu vida, serás ese chico alegre que siempre has sido, si quieres vuelve a ser el patán de antes - rio pero yo no lo hice, no me daba gracia lo que estaba diciendo - Pero por favor no te deprimas, no me llores, déjame marchar en paz...-¿Qué estás diciendo?-Déjame terminar. Sé que me dijiste que no fuera pesimista pero lamentablemente soy realista, y si llego a... morir, no quiero que te des mala vida, solo quiero que disfrutes de el milagro tan hermoso que es vivir.Sus palabras me habían formado un nudo en la garganta difícil de tragar. No sabía ni que responder, no quería llorar, ni verla llorar, tampoco discutir por llevarle la contraria pero si quería que cambiara esa forma de ver su enfermedad, que nos entendiera a los que la rodeamos porque me imagino que a su familia no le gusta escucharla hablar de esa manera. Le pedí que se pusiera frente de mí porque quería verla cara a cara para decirle lo que le diría, ella asintió y lo hizo. - Madison, recuerdas cuando aquella vez en el parque que te pedí que olvidaras todo - ella asiento - Hoy te vuelvo a pedir lo mismo, olvídate de tu enfermedad, de tus padres, tus amigos, el pueblo, la escuela, tu hermana, las personas que conoces, olvídalo absolutamente todo pero no te olvides de mi. - Sonrió - Ahora Cierra los ojos y respira profundo.Ella obedeció.-Imagina un mundo, donde nada tenga sentido - proseguí - El cielo sea de dulce, el piso azulado como el mar y mientras caminas manchas tus pies pues en ese mundo no usas calzado, los arboles llegan hasta el cielo y cada uno es capaz de dar más de un solo fruto, los animales expresan lo que sienten igual que el ser humano, no hay calor ni frio solo una temperatura normal, no hay sol ni luna pues están ambos adornando el cielo acaramelado, puedes elevarte y volar en el aire sin necesidad de abordar un avión, no hay enfermedades, no hay guerras, no hay ni sufrimiento ni felicidad. Estas en un valle usando un vestido largo de color blanco, totalmente rasgado, tu cabello suelto, tu sonrisa adornando tu rostro y estas esperándome porque allí me encontraras - tome sus manos - Me vez, me abrazas y me besas, te digo cuanto significas para mí. No pensamos ni en lugar ni tiempo porque no tenemos que rendirle cuentas a nadie, solo existimos tu y yo respirando un aire fresco y puro, haciéndonos compañía. Te tomo el rostro y encima de tus labios susurro "No te irás, porque no dejare que te vayas, no te perderé porque no me rendiré, no morirás porque tienes quien te salve, no serás feliz si no tienes fe y sobre todo te prometo estar contigo en esta vida y mas allá de ella" Sus ojos se abrieron mientras yo sostenía su cara tal cual como lo había dicho, sentí sus lágrimas rozar mi piel. Ella me dio uno de esos besos que me volvían loco, me abrazo y acaricio mi nuca, mientras lo hacía yo trate de sostenerla para que se le hiciera más cómodo. Estaba seguro que mis palabras la habían hecho recapacitar a cerca de hablar de su muerte de esa manera y me lo estaba agradeciendo. ¡Ojala todo me lo agradeciera de esa forma!-No me arrepiento haber aceptado ser tu novia - dijo muy cerca de mi rostro sin aun soltarme de su agarre - A pesar que muchos me dijeron que tu no eras bueno para mí no me arrepiento de quererte de esta forma - me dio un beso corto - Gracias por crear un mundo inexplicable para ti y para mi esta noche. Te quiero, Harry.Volvió a besarme pero una parte de mi no se sentía conforme, pero así es el ser humano, lo podemos tener todo pero nunca nos conformamos. Yo quería escuchar otras palabras y no un simple "Te quiero". Pero a pocos segundos se me olvido porque ambos caímos totalmente dormidos abrazados el uno al otro.Me desperté mirando alrededor, allí permanecía Madison dormida a mi lado, mire la hora y eran más de las diez de la mañana, no fuimos al ultimo día de clases, a mi no me importaba pues ese día no se hacía mucho pero estaba seguro que a Madison si le preocupaba y tal vez se alteraría al enterarse, espere a que se despertara, pues no interrumpiría su sueño.Cuando despertó no se molesto por haber faltado al colegio, eso me alegro. Después de refrescarnos, desayunar tranquilamente ya que sus padres no estaban en la casa, ella me acompaño a la mía.Mientras yo me bañaba, Madison compartía con Kieran en su habitación. Desde el baño se escuchaban sus risas, aquello me hacia sonreír mas de lo normal. Al vestirme les fui hacer compañía un rato, ella se veía más radiante, con un brillo especial en los ojos, una sonrisa que no podía ocultar, definitivamente nuestra conversación de la madrugada le había hecho muy bien pues parecía una mujer renovada y eso me encantaba.-Harry, Justin está en la ciudad y te vino buscando temprano - comento mi hermanito.-¿En serio? - Pregunte - ¿No te dijo más nada?-Que volvería luego - al terminar de hablar sonó el timbre de mi casa - Debe ser él.Los tres bajamos las escaleras, y mientras yo abría la puerta Madison y Kieran fueron a la cocina por algo de comer. Mi hermano había aceptado, si era mi mejor amigo el que tocaba la puerta.-RULITOS - grito al abrirle.-Justin - reí dejándolo pasar.Ambos nos dimos uno de esos abrazos que en vez de mostrar el cariño que sentíamos el uno por el otro demostrábamos lo mucho que extrañábamos pelear pues eran más fuertes las palmadas en la espalda que el apretón. Desde niños siempre nos saludábamos de esa forma cuando pasamos tiempo sin vernos ya que competíamos a ver quien golpeaba más duro al otro.Madison salió de la cocina de mano de mi hermanito.-¡Tenía que venir y verlo con mis propios ojos! - Dijo acercándose a mi morena - Tenía que comprobar que era verdad lo que me contaban: la pequeña Madison cambio al imbécil de mi mejor amigo.Ella rio ante el comentario.-Yo no lo cambie, él cambio porque quiso. -Hay mujeres modestas y tú - se saludaron como normalmente lo hacían pues a diferencia de mi ella si mantenía una buena relación con Justin en el pasado.-Yo los dejo. Supongo que tienen muchas cosas de que hablar - sugirió mi morena.Yo asentí, la despedí con un corto beso en la boca y susurrándole al oído que la vería luego.Al trancar la puerta y marcharse Justin se empezó a reír en mi cara, sabia porque lo hacía si yo fuera él hubiera hecho exactamente lo mismo, Kieran que no desconocía el motivo de su risa también lo acompaño con carcajadas pequeñas. Yo solo me digne a esperar que los dos se calmaran, mi amigo se sentó en el sofá aun riendo de forma irritante, me senté a su lado ya cansado de esperar que se tranquilizara pero él mientras más me veía más se reír.-Vamos dilo - le exigí.-¿Qué cosas? - se estaba haciendo el desentendido.-Tú tenías razón.-Quería que tu lo dijeras - se siguió riendo - "Yo nunca podría estar con Madison, no es mi tipo de chica" - dijo remedando palabras que había dicho en el pasado - ¡Yo tenía razón! Estabas y estás babeado por ella y a mí no me podías mentir.-La lengua es el castigo del cuerpo, ¿no? -Exacto. Aunque creo que para ti ella no es castigo - le di un leve golpe en el hombro - Todo lo contrario. Tan solo tienes que ver como la miras.-Justin... creo que me enamore.Volvió a reír como loco. Lo entendía pues desde siempre le había dicho que no pensaba enamorarme, eso no estaba en mis planes y ahora heme aquí dispuesto a darlo todo por una sola mujer.-El tema es serio - recobro la compostura - Solo te digo que no lo estropees, tu más que nadie debe de saber por lo que está pasando Madison.-¿Tú lo sabes? - le pregunte.-Claro. Mi mamá y la de ella siempre fueron muy buenas amigas y cuando ella enfermo yo era uno de esos chicos que la apoyaba y jugaba con ella. Pues recuerdo que Madison no quería que nadie se enterara, éramos pocos los que sabíamos.-¡Genial! Todo el mundo sabía menos yo - eleve la voz enojado.-¿Cuándo te enteraste?-Hace muy poco. -Disculpa por no decirte nada pero eso no me tocaba a mí hablarlo contigo.-No importa, ya paso.-Harry, ¿Le has dicho que la amas? - Negué- ¿Y qué esperas? -El momento correcto.Ambos seguimos hablando, el me comentaba que realmente se notaba lo mucho que Madison me importaba. Entonces es cierto, en el fondo si cambie y no como yo pensaba, si no que el cambio fue radical, necesitaba desahogarme con alguien y aproveche a Justin para contarle lo que había pasado con los exámenes, las discusiones, lo inútil que me sentía y el dijo lo que me esperaba, no era mi culpa, me prometió que vería como podía ayudar pero mientras tanto yo debía estar con ella y no abandonarla en este momento de su vida.Mi mente se distrajo un poco ganándole a mi amigo en los video juegos, gritábamos y comíamos como locos, el estaba en sus vacaciones así que podía hacer aquello pues usualmente no se lo permitían por su voz pero él de todas formas lo hacía, yo ganaba y el pedía revancha, el ganaba y era yo el que la pedía, así pasamos toda la tarde. Mi celular empezó a sonar, le pedí que se callara para atender.-Harry, soy la doctora Manrique. Te llamo a ti primero porque así me lo pidieron, una chica vino dispuesta a donarle el riñón a Madison - mi expresión cambio completamente - Y está en perfectas condiciones para hacerlo además de ser compatible. Se llama Paula, dijo ser tu prima.No hallaba palabras para responder aquello, antes de cortar la llamada solo le pedí que aun no dijera nada, que al día siguiente estaría allí junto a mi prima.¿Paula? Ella era compatible y estaba dispuesta a ser la donante. Tenía muchas cosas que aclararme, ¿Cómo se entero? ¿Por qué lo hacía? ¿Qué quería a cambio? Me alegraba en el interior pero sentía desconfianza también, no entendía porque ese sentimiento pues mi prima nunca fue vanidosa pero se me resultaba extraño que ella quisiera hacer aquello.
***
ooooh cada ves más buena :c espero que les guste y no se olviden de votar y si quieren comentar :) gracias
PD: quedan poquitos capitulos por ende subiré otra novela :) es de la misma escritora que está :) pero mucho mejor...
ESTÁS LEYENDO
No debí juzgarla HarryStyles&Emily
RomanceHarry el mujeriego de la clase y del colegio empieza a averiguar sobre emily y sobre su misteriosa situación y actitud, él deja de lado muchas de laa cosas que hacía antes para acercarse a emily pero no se le hace fácil ya que emily no es la típica...