MARATÓN 3/4
Ir caminando por la calle y ver a Madison sentada en el mismo parque donde yo la llevaba, hablando con su nuevo amigo, ese que nos interrumpió mientras peleábamos con la pintura, ese que después de un día ya le hablaba como si se conocerán de toda la vida, ese que había conseguido que ella me ignorar más, haberla visto con él hizo que me llenara de rabia. Pero por primera vez decidí no ser tan impulsivo y pensar antes de actuar. Recordé ese dicho que la gente solía decir muy a menudo: “A los amigos hay que tenerlos cercas, pero a los enemigos más cerca”. Tenía que actuar bien, no como actué cuando conocí a Jake, que lo golpee mientras jugamos y fui inmaduro. Esta vez invite al chico a que nos acompañara a Louis y a mí a un partido de hockey. Él acepto.Se podría decir que estudie todo su comportamiento, ¿Qué era lo que tenía que hacía que Madison quisiera estar con él? Definitivamente no encontré nada, ¿Sentido del humor? Es algo con lo que yo también cuento. Al salir del partido nos fuimos en el carro de mi padre, me molestaba que hasta Louis se empezara a llevar bien con el tipo, pues en ciertos momentos me sacaban de la conversación, sería el colmo que me robara a uno de mis mejores amigos también. -He visto que te llevas bien con Madison ¿Te agrada? – le pregunto Louis.-Por supuesto, es una chica increíble – respondió Hebert.-Sí y es mía. – Dije.-Nadie es de nadie ¿No crees? Además hasta donde tengo entendido ustedes ya no son novios.-Me impresionas, te informaste – dije estacionando el carro frente a su casa mientras él se bajaba riendo de una forma irritante.-Claro, me gusta informarme de lo que me interesa – dijo asomándose por la ventana – Y tu ex novia me interesa mucho.Con eso dicho se marcho. -¡Se te complico todo! – exclamo Louis riendo.Lo mande a callar, no estaba de humor para sus comentarios de mal gusto. Mi intuición no fallaba, el nuevo pretendía quitarme a Madison. Y creo que lo estaba logrando. Pues si antes respondía a mis distintas maneras de llamar su atención ahora solo me ignoraba por concentrarse o darle más importancia a él. Sentía que cada vez la perdía más y más. Se me hacia tan doloroso ver como ya ni siquiera notaba que yo estaba a su lado o le hablaba, pues ni un insulto me dedicaba. Nunca antes había insistido tanto con una chica como lo estaba haciendo con ella, pues de alguna manera ella me enseño a suplicar o insistir por lo que realmente me importaba. Estuve a punto de rendirme, de echar todo por la borda, dejarla ser feliz con alguien más, no molestarla y empezar a superarla pero se me hizo imposible cuando todos los días cruzaba con ella o escuchaba su melódica voz cada vez que intervenía en clase, se me hacía difícil porque mi hermanito hablaba de ella todo el tiempo y porque mi propia madre estuvo allí para impulsarme a no hacerlo. Mientras Madison más me ignoraba yo mas pensaba en ella. Mi cerebro ya no se le ocurría mas idea para estar cerca de ella o por lo menos distanciarla de Hebert, ambos pasaban casi todo los días juntos con esa excusa de ponerse al día con las clases.Entonces mi Harry patán tuvo una idea que aunque le haría daño a una persona seria mi último intento, si funcionaba estaba dispuesto a dar el todo por el todo pero si no lo hacía estaba decidido a dejarla en paz. Tenía que hacer las cosas bien pensar como llegar a la persona que me ayudaría y cómo hacer para que no me odiara más de lo que ya lo hacía, después de que le planteara lo que quería. La mire, estaba sentada en las escaleras del instituto con su celular en mano, me acerque a ella con cierto temor, le pregunte si le podía hacer compañía y raramente accedió. Necesitaba las palabras correctas para que me dijera un rotundo “si” pero de mi boca no salía nada, se estaba creando un silencio muy incomodo.-¿Qué quieres, Harry? – pregunto.-Necesito un favor tuyo y créeme que estoy muy desesperado, Mellany – dije.-¿Qué cosa?-Se que sonara ridículo porque cuando lo pensé también me pareció de esa forma, pero es que ya no se qué hacer.Le plantee la situación y lo que necesita, pero no reacción de la forma en la que espera, se sintió ofendida y del tiro se puso de pie. Sabía que no había utilizado las palabras correctas.-¿Qué tu quieres que yo haga qué? Estas muy loco si crees que voy acceder – sentencio.-Mellany estoy desesperado, este es mi último intento si esto no funciona pienso tirar la toalla con tu hermana.-¿Y dándole celos conmigo es una buena manera de recuperarla? Invéntate algo mejor, vas a conseguir que te odie más de lo que yo lo está haciendo.-¿Pero cuál es el problema? No te estoy pidiendo que te acuestes conmigo solo quiero ver la reacción de Madison al vernos juntos, si me cela le importo y si no lo hace la dejare en paz.-¿Te estás dando cuenta lo patético que suena eso? – pregunto-Lo sé, suena estúpido. Pero es que ya no se qué hacer, veo como día tras día esta con el tipo ese…-Hebert – me interrumpió.-Él. Esta con él en vez de estar conmigo, veo como ríe a su lado y me siento mal, le dedica tiempo a él y a mí me ignora ¿Cómo crees que me siento, Mellany?-Te entiendo – dijo volviendo a tomar asiento a mi lado – Te confesare algo, hubo un tiempo en el que yo estuve… ¿Cómo decirlo? Flechada contigo, y me daban celos ver como estabas con mi hermana pero lo supere. Y no te voy a pedir que superes lo que sientes por Madison porque eso sería completamente ilógico ya que ustedes se aman. Pero piensa algo mejor que darle celos con su hermana, porque de esa forma se alejara más…-Te equivocas en algo, ella ya no siete lo mismo por mí.-Ya entiendo porque mi hermana te dice “imbécil”. No te ciegues, ella allí donde la vez riendo y compartiendo con otro tipo está tratando de hacer algo que es imposible para ella: Superarte. Harry mi hermana sigue enamorada de ti, le dolió lo del engaño con Candela, yo la escuche llorar, aunque no dejo que la consolara ni que la escuchara, prefirió callarse todo ese dolor. Pero a pesar de todo eso Madison no se puede olvidar de ti. Y tú si no intentas…-Mellany he intentado de todo – la interrumpí.-Pues intenta más. Por lo menos consigue quedar como amigos antes que sea demasiado tarde.-¿A qué te refieres con eso?Bajo la mirada.-No importa. Yo ya por lo menos te di un dato que te puede servir: ella sigue perdidamente enamorada de ti. Le agradecí y se marcho pues tenía que entrar a clase.En cambio yo permanecí allí, pues la siguiente clase que me tocaba era Matemática y sinceramente esa ya era una materia a la que no se me era obligatorio entrar pues siempre salía eximido en los exámenes y cada tema que daban era algo que yo ya sabía o dominaba muy bien. Me sirvió haber estado allí sentado sin la molestia de que alguien me hablara, pensé con claridad y Mellany tenía mucha razón, si la quería recuperar no debía hacer cosas que la enojaran más de lo que ya estaba.Disfrute de un paisaje natural frente de mis ojos, personas que pasaban de una lado a otro, no se veían muchos niños porque era horario escolar, pero paso alguien que desde hace mucho tiempo no veía. Era una chica que estuvo conmigo un par de años atrás, y aun recordaba su nombre, porque recuerdo lo difícil que fue conseguir que estuviera en mi larga lista, Fernanda se llamaba. La vi pasar tomada de manos con un chico, supuse que era su novio, me sentí culpable de cómo la lastime pues era una gran persona. Ella noto que la miraba y sonrió, dándome las gracias con los labios, no entendía el porqué pero le dije: De nada. Después de eso siguió su camino abrazada del chico. Ella me había superado. Por un momento temí que eso pasara con Madison en un tiempo más, pero trate de sacar esa idea de mi cabeza recordando las palabras de Mellany. El timbre había sonado, dando la señal de que ya podían ir a su casa. Todos pasaban por mi lado deprisa por salir del colegio, eso es entendible, creo que alguna vez, todos hemos sentido esa sensación de libertad al tocar la campana. Escuche la risa de Madison tras de mi acompañada con la del tipo. Me gire para verlos, ambos venían bajando cuando se acercaron lo suficiente le tome la mano a ella. Se detuvo y me vio con esos ojos que tanto amaba, pidió que la soltara pero negué, acaricie su mano con la mía mientras la sostenía, con los ojos le suplique que me acompañara. -¿Me dejas a solas con ella? – le pregunte al tipo.El la miro como esperando su autorización.-Después te llamo, Hebert – le dijo asintiendo.Por lo menos el lenguaje de miradas aun funcionaba, ella había aceptado hablar conmigo. Sin soltar su mano, la lleve aquel restaurant de comida rápido donde la había encerrado una vez, delante de ella le pedí la llave a James del depósito y sin decir palabra alguna entramos al lugar. Cerré la puerta pero sin candando, gire para mirarla mejor y ella estaba insegura, como si estuviera debatiendo consigo misma el estar allí. -¿Recuerdas la primera vez que te traje aquí? Yo solo buscaba un beso tuyo y use esa excusa de ser amigos para retenerte y antes de besarte me dijiste “Los amigos no se besan” – dije acercándome a ella.-Lo recuerdo, Harry.-Madison, todos comentemos errores de los cuales nos arrepentimos y pagamos muy caro, tu indiferencia ha sido el peor castigo. – Acaricie su rostro – A diferencia de aquel día, la puerta está abierta, es tu decisión si te quieres ir a encontrarte con él, sonreírle a él, remplazarme… No pude siquiera seguir hablando, ella me quitaba el aliento con solo mirarme, permanecimos de ese modo, sin decir una sola palabra pero con los ojos nos decíamos tantas cosas, le pedía a gritos que me besara mientras yo interpretaba en los de ella que me necesitaba tanto como yo.Desee sus labios como nunca antes lo había hecho, y cuando menos lo espere me beso. Si, ella había juntado sus labios en los míos nuevamente después de tanto tiempo, tenía que disfrutarlo, enrolle mis brazos en su cintura alzándola para que alcanzara mi altura con comodidad mientras ella aferraba sus dedos en mi nuca con firmeza, dándome a entender que no me quería soltar. En ese beso, si lo estaba dando todo por el todo como había planeado hacerlo. Su celular empezó a sonar interrumpiéndonos.-No atiendas – suplique sin soltar sus labios – por favor.Hizo caso y no contesto, se dedico a seguir besándome. ¡Dios, como había extrañado su manera de besarme! Pero el molesto sonido del celular volvió a interrumpir así que la solté dejando que contestara.-Hebert estaré allá en poco minutos – dijo al contestar para luego colgar – Lo siento Harry, debo irme.-¿QUÉ? ¿Te vas con él? – le reclame.-Debo hacerlo.-¿Me besas y luego decides irte con él? ¿En serio?Me dedico una mirada triste y se marcho.
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wouw que onda madison?
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No debí juzgarla HarryStyles&Emily
RomanceHarry el mujeriego de la clase y del colegio empieza a averiguar sobre emily y sobre su misteriosa situación y actitud, él deja de lado muchas de laa cosas que hacía antes para acercarse a emily pero no se le hace fácil ya que emily no es la típica...