Loco no, completamente desquiciado (Larry Stylinson)

Capitulo 24

Louis POV

Cuando Harry y los chicos se fueron, sabía que iba a estar en problemas. Era obvio que se iban a dar cuenta que Niall y Liam no estaban. Seguramente recibiría un castigo. Las llaves de la celda seguían en su mano y pudo ver que el guardia delante de él, las había visto.

-¿Dónde están los otros?- Le pregunto el guardia mirándolo fijamente.

-N-no l-lo se.- Le dije susurrando mirando para abajo.

-Bien, si no vas a hablar, haremos las cosas difíciles entonces.- Sentí un escalofríos recorrer mi cuerpo al sentir que la puerta de la celda se abrió bruscamente.

La mano del guardia tomo mi brazo tan fuerte que casi podría quebrarme la muñeca. Estaba demasiado débil y sin fuerzas para luchar así que solo deje que haga lo que quiera conmigo.

-Veo que no pones resistencia, me gusta cuando son sumisos.- Me miro con una mirada perversa.- ¿Vas a hablar?- Me miro por un segundo.

-No...-

-Bien- No dijo más nada solo me empujo contra una pared haciendo que mi cabeza golpeara contra ella dejándome medio mareado. No pude reponerme del golpe porque sentí que me quedaba sin aire al recibir otro en mi estómago. -¿Todavía no vas a hablar? Mira que puedo hacer cosas peores.-

Negué con la cabeza mientras escupía hacia un lado. Vi hacia el piso y era sangre. Lo vi acercarse a mí, quería retroceder pero no podía, la pared me impedía ir hacia atrás y a mis costados habían celdas, estaba atrapado.

-¿Sabes?- Dijo mientras se acercaba.- Ahora que te veo bien, no eres feo, ya se porque Styles se fijó en ti.- ¿Quién era este y como conocía a Harry? No podía expresar mi confusión, estaba demasiado aturdido por el dolor de cabeza.- Me imagino que debes ser toda una putita en la cama ¿verdad?-

-¿Qué...- No me dejo ni hablar que ya había atacado mis labios con su boca. Con su asquerosa boca. Sentía un asco dentro mío y no podía hacer nada al no tener las fuerzas necesarias para separarlo de mí. Se separó de mi al ver que no le respondía el beso.

-¡Bésame putita!- Volvió a mis labios con más fuerza, me mordía y trataba de meter su asquerosa lengua.

Al sentir que no le respondía el beso me dio una cachetada haciendo que girara la cabeza. No sé en qué momento comenzó a llorar, me di cuenta que lo hacía al sentir mi mejilla arder por la lagrima que paso por la marca que el guardia había dejado.

-Lo quieres difícil ¿eh?- Me agarro la cara apretando mis mejillas haciéndome doler la mandíbula.- Veo que no eres tan sumiso después de todo.-

-S-Suéltame... p-por f-favor.- Comenzó a suplicarle pero no hacía caso.-

-Claro que lo hare putita, luego de estar dentro de ti me iré.- ¿Qué? Mis ojos se abrieron del miedo por lo que acaba de decir.-

-¡No...no! ¡Suéltame no me hagas nada!-

-¡Cállate!- Me dio otra cachetada en la otra mejilla. Me seguía moviendo tratando de liberarme pero no lo lograba.- ¡Quédate quieto!-

Agarro mis brazos y los puso tras mi espalda impidiendo que los mueva. Yo no tenía fuerzas y el tipo era el triple de mi tamaño era obvio que no podría liberarme nunca de él. Necesitaba un milagro.

Me dio vuelta pegando mi pecho contra la fría pared, mi cuerpo estaba helado pero la pared era hielo puro. Sentí una de sus sucias manos bajar por mi espalda haciendo que mi cuerpo tiemble.

-Tranquilo, putita.-Su mano llego hacia mi trasero tocándolo por afuera de mis boxers.- Mmmm... me gusta esto putita, te destruiré por completo.-

No podía más, sentía que esto terminaría por matarme, mi cuerpo no soportaba todo lo que le estaban haciendo, y mi mente tampoco. No respondí a su comentario, solo seguí llorando por lo que me estaba pasando y pensando en lo que pasaría en unos segundos.

Su mano se deslizo dentro de mis boxers, pero fue hacia adelante tomando mi miembro. Lo apretó con fuerza causándome dolor, haciendo que de mi salga un grito que se habrá escuchado por todo el edificio. Me soltó las manos al darse cuenta que no seguiría luchando por mi libertad y con su otra mano, bajo rápidamente mis boxers dejando mi trasero al descubierto.

-Vamos a ver qué tan bueno eres, putita.- Susurro en mi oído lamiendo mi oreja.

Y sin más, se metió en mi de una sola estocada. Un grito desgarrador salió de dentro mi alma que sentí que me rompió las cuerdas vocales.

-¡Si, así! Grita más fuerte, putita.- Decía mientras iba más rápido y más profundo causándome un dolor potente y dejándome sin fuerzas.

Mis gritos seguían ya que el dolor no disminuía, sentí que me golpeó el trasero con la palma de su mano haciendo que pegue otro grito.

Siguió por unos minutos más entrando y saliendo de mí. Estaba ido, ya no sentía nada, las lágrimas caían de mis ojos por si solas. Solo pensaba ¿Por qué a mí?

De repente, sentí que bruscamente se separaba de mi pero yo no movía ni un musculo, no podía moverme. Estaba en una especie de trance, no escuchaba nada a mi alrededor y tampoco podía ver.

-¡Voy a matarlo déjame!- Escuche una voz conocida para mí.

-¡Harry, ya déjalo esta inconsciente! Ve a ver a Louis.- Otra voz que no pude identificar hablo. ¿Harry? ¿Qué? ¿Mi Harry? No podía ser posible, él tendría que haberse ido.

-Lou...-Sentí una mano en mi hombro y me asuste. No quería que me tocaran. Me separe de su mano lo más que pude ya que estaba la pared.- ¿Gatito? Soy yo Haz...- Me miro con tristeza por haberme separado de él, pero tenía miedo. No quería que me lastimaran de nuevo.

-N-No m-me t-toques...-

-Gatito... no te hare daño, soy Harry. Tu Haz...- Lo mire desconfiado.- Ya nada te va a pasar lo juro.

Tenía miedo, pero era mi Harry, sabía que él no me haría daño.

-¿Haz?- Le dije mientras me acercaba lentamente hacia el.- ¿No me vas a lastimar?- Le pregunte al borde de las lágrimas.

-No, Gatito. Jamás lo haría. Antes me lastimo yo.- Le toque la cara para comprobar que en verdad era él. Cuando lo hice, me acerque a su pecho y comenzó a llorar en el.-

-Ya, Lou. Ya paso todo. Estás conmigo, bebe.- Decía mientras acariciaba mi pelo y espalda.

-F-Fue h-horrible H-Haz... y-yo n-no q-quería...-

-Lo se bebe, tú no te mereces nada de lo que está ocurriendo.-

-M-me d-duele t-todo...-

-Ya bebe, ya pasara tranquilo.- Sentí que me cargaba agarrando mis piernas y espalda tratando de no tocar mi lastimado trasero.-¿Zayn?-

-Dime Harry.- Era Zayn, él había venido con Harry, como la última vez.

-Debemos llevarlo a la enfermería no puedo dejarlo así. No me importa que nos encierren de nuevo, pero él tiene que estar bien.- Me miro a los ojos y vi los suyos llenarse de agua.

-Sí, claro Harry, como tú digas. Vamos entonces.- Él fue adelante mientras Harry lo seguía atrás conmigo a cuestas.

-Ya está bebe, ya paso.-Decía mientras me pegaba a su pecho.- No te pasara nada... estás conmigo- Eso fue lo último que logre escuchar antes de que mis ojos se cierren.