Por primera vez.

EPÍLOGO PARTE 1

Ya era miércoles, todavía me quedaban 5 días para empezar las clases y sinceramente no me apetecía nada, desde que pasó eso con Tom he estado hecha un auténtico desastre, en pijama todo el día, sin peinar, sin maquillar, inluso Ana sacaba a pasear a Dylan porque yo no tenía fuerzas para nada. Creo que en estos días solo he comido dos o tres veces, Ana se desespera intentando que coma algo, y no es porque yo haya decidido matarme de hambre, es que no me entra nada.

No he recibido ninguna llamada, ningún mensaje, y mi cabeza no para de darle vueltas a dos frases "Tuve una noche interesante", "Me quiero dedicar a otras..cosas". Sabía perfectamente a que se refería, aunque no quería reconocerlo, no quería pensar que me quisiera tan poco, sabía que a Dylan si, es su hijo pero a mi? que chiste, parece ser que hacía tiempo que había dejado de hacerlo o yo que se.

-Me tienes ya harta, vistete ahora mismo que nos vamos.- me dijo Anna en tono autoritario desde los pies de mi cama.-

-Es que no tengo ganas.- dije en tono quejumbroso mientras me tapaba la cara con la almohada.-

-Por dios Camila te van a salir raíces como sigas ahí tumbada, así que venga.- me rendí.-

-A dónde vamos?.- una gran sonrisa se instaló en su cara.-

-A comer por ahí, voy a vestir al pequeñajo este mientras te das una buena ducha y te vistes.- yo asentí y ella salió con Dylan en brazos asi que me dispuse a coger un chandal.- y nada de chandal!.- gritó desde el salón, suspiré cogí unos pitillos vaqueros ajustados y una blusa blanca muy bonita, todavía hacia un poco de calor a estas horas.-

He de reconocer que la ducha me sentó de maravilla, me puse la ropa, mis zapatos oxford marrones, me sequé el pelo y lo dejé suelto y ya que iba tan mona pues me maquille, me eché máscara de pestañas, delineador negro y un poco de colorete.

-Eso esta muchísimo mejor.- me dijo Anna desde el umbral de la puerta.- quiero verte así siempre a partir de ahora vale?.-

-Lo intentaré.- sonreí sinceramente por primera vez en estos días, cogí mi bolso, el carricoche de Dylan y salimos.-

Hacía muy buen día, todo despejado, lleno de gente aprovechando los últimos días antes de volver a la rutina. Dylan miraba todo muy atento, no se le escapaba nada, y me di cuenta de cada vez se parecía más a Tom, eso me hizo dejar de sonreir instantáneamente, pero sacudí la cabeza para quitar esos pensamientos, no quería volver a estar mal por alguien como él.

Llegamos a una terracita, pedimos un aperitivo y un par de cervezas, se estaba muy pero que muy agusto.

-Qué vas a hacer este fin de semana?.- preguntó Anna con cautela, sabiendo las dos que se refería a que Tom vendría a por Dylan.-

-No tengo la más remota idea.- dije sincera.- la verdad es que no tengo nada de ganas de verlo, si lo hago creo que me daría el bajón otra vez.-

-Ah no, eso no, yo se lo doy y tú si quieres te quedas en la habitación mientras.-

-Sería un favorazo la verdad.-

-Sin problemas, para eso estamos.- dijo sonriente.-

-No sé como agradecertelo, de verdad.-

-Yo sí, come, ríe, bebe, estudia y sigue tu vida con tu pequeño, es lo mejor que puedes hacer Camila, eres joven, guapa, inteligente, seguro que ahí fuera hay miles de tíos que se matarían por tenerte, así que no estés mal, si Tom no quiere estar contigo pues él se lo pierde.- se me saltaron las lágrimas al escuchar eso pero me las limpié rápidamente.-

-Me apetece salir este fin de semana.-

-Por su puestísimo que si! cuando volvamos llamamos a todos, a ver si se animan a venir y si no pues le digo a Jonh que se traiga a algunos amigos.- dijo guiñándome un ojo coqueta, lo que me hizo reir.-