Todos sus compañeros de clase lo han llamado y tratado como a un enfermo mental, su familia no es la excepción.
Kyungsoo está enamorado. Y no sólo enamorado, sino jodidamente y perdidamente hundido en el amor. ¿Pero cómo no estar enfermo de cariño? Jongin brilla en los cielos por las noches y le cuenta los más oscuros y preciosos secretos, sólo son para él, para nadie más y se siente feliz.
Las manos creadas de estrellas de su amante acarician su aterciopelado corazón con delicadeza hasta sanar con poderosos astros su herido órgano. Besa con sus planetas cada rincón de su cuerpo y le hace el amor, hundiéndolo más en él con sus agujeros negros.
Las galaxias vecinas les tienen envidia. Cuando Kyungsoo flota en el espacio y se deja llevar con Jongin, ellos pueden ver todo, el amor de un humano y una galaxia se respira en rosas y contamina sus lunas al respirar.
Todos aborrecen su relación, la detestan y quieren acabar con ella. Pero mientras los amantes no se dejen, nada ni nadie podrá separarlos.
Nada.
Ni siquiera las pastillas que los hombres vestidos en bata le hacen tomar al pequeño Kyungsoo cada vez que se revuelca en los suelos (y a veces por los techos). Nada les impide hacer el amor, ni siquiera aquella camisa blanca que apretuja sus extremidades cada que Kyungsoo intenta masturbarse.
Nada.
Su amor es infinito como el universo.
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Polvo brillante (EXO).
FanfictionHistorias cortas, one-shots o drabbles de EXO, contenido homosexual.