Amor Eterno ©

Capítulo 5

Al despertar Fiorella no estaba a mi lado.

Me fuí a mi habitación, me bañe y vestí y decidí bajar.

- Buenos días- dije entrando a la cocina. Risas intentando ser contenidas se oyeron se oían de parte de las chicas.

Sabía porque reían pero no les preste atención y nos sentamos a comer, cuando ya todos estábamos sentados se oyeron pasos suaves y una cabellera rubia se vió desde la puerta.

Fiorella entró y se sentó sin mirar a nadie. Cuando comenzó a comer levantó el rostro.

- ¿Como pasaste la noche?- le preguntó Zack divertido. Ella lo fulminó con la mirada.

- Mucho mejor que tú a decir verdad, porque si no me equivoco la pelirroja te dejó con la polla levantada- dijo mirándolo con un gesto repugnante, las burlas no tardaron en hacerse ver.

Terminamos de comer entre charlas.

***

-Alesandro, necesito hablar contigo- dijo Christoffer, nos fuimos al patio donde había una mesa.

- Dime- él suspira.

- Necesito regresar a Italia, pero el detalle es que no quiero llevar a Fiorella hasta que sepa que la situación esta perfecta- asentí-. ¿Podrías quedarte con ella aquí en Brasil?

- No tienes que pedirlo- dije tranquilo.- ¿Cuando se van? -pregunté en general, ya que, Christoffer no actuaba solo.

- Esta noche.

***

Todo esta en silencio, solo estamos Laura, Fiorella y yo.

Me encuentro mirando la televisión y Fiorella baja las escaleras, no me mira pero yo si a ella.

Entro en la cocina y ella esta de espalda, coloco mis manos en su cintura haciendo que de un salto.

- ¡Maldición! -grita del susto- Quita las manos Alesandro- dice apática.

No quito mis manos y en vez de eso la jalo hacia mi pecho.

- ¿Vas a seguir haciendo qué nada paso?- le susurro y ella voltea los ojos.

- Nada paso Alesandro- dice simplemente.

- ¿Vas a negar el beso a media madrugada?- ella se sonroja- Lo sentí completo Fiorella. Habla conmigo.

- ¿Qué quieres Alesandro? No quiero recordar esa noche, hice algo indebido e idiota. No quiero hablar contigo, no quiero nada que no provenga de ti - dice intentado soltarse

- No te molestes porque no lo respondí pero venías de que casi te violaran y la verdad no quería que te sintieras incomoda- ella sigue intentando soltarse, la volteo y quedamos frente a frente.

» Si no quieres hablar y no me quieres ver,  ¿por qué no me has golpeado para soltarte?- ella suspira y yo me acerco más a su boca- ¿por qué tengo que sentir esto por ti? Maldición cariño no sabes cuanto estoy conteniendo para no besarte ahora- digo mirado su boca y  sus ojos.

- No lo hagas- me susurra, uno mis labios con los suyos en un beso desesperado.

Sus piernas se enroscan a mi cintura y el beso se vuelve más hambriento, nos separamos jadeando por aire, sus labios se ven rojos e hinchados.

La mantengo cargada sin querer soltarla. Ella coloca su cabeza en mi cuello y

- ¿Sabes?... Llevo muchas noches soñando cosas contigo que parecen muy reales, siento que a mi me ocultan cosas, sé que tú lo haces- dice segura- quiero saber.