Mi Cheque al Portamor

CAPITULO 10.

Irina: ¿Qué? ¿Qué le pasa a mi cara?

Siomara: Tienes un...

Irina: ¿Un qué Siomara?

Siomara: Un arañón... ¿te hizo el amor muy duro? Jajaja

Irina: Eso he sido yo durmiendo, y no te interesa lo que haga con Sergio.

Siomara: Vamoos... soy tu mejor amiga, tu hermanita... ¿En serio? ¡Si nos hemos visto sin ropa y todo!

Irina: Sí, lo hemos hecho. Pero callate, no le digas nada a mis primas.

Siomara: Cuenta con ello.

Irina: No tía, te lo digo en serio, que te conozco.

Siomara: Que si boba, que yo no digo nada de nada, secreto entre mejores amigas. Bueno descansa, un besitoooo.

Irina: Venga chaauu, ¿mañana a que hora sale el vuelo?

Siomara: Ni idea, creo que era a las 16:00. En un rato subo a dormir contigo.

Realmente me quiere y me cuida como si yo fuera su hija, no como su mejor amiga. Me dio uno de sus amorosos besos en la frente, apagó la luz y se fue. Es tan linda. Mi móvil vibra, y me llega un mensaje de Sergio "Me lo pasé genial hoy, buenas noches princesita". Dejé el móvil en la mesita de noche y me dormí. A la mañana siguiente...

Mamá: Cielo, levanta que es muy tarde.

Irina: ¿Que pasa mami?

Mamá: El aeropuerto, tenemos que irnos ya.

Irina: ¡¿Ya son las 16:00?!

Mamá: Hija, el vuelo salía a las 12:00, hay que estar allí dos horas antes y entre que llegamos y no... ¡venga levántate!

Irina: Voy, voy.

Que pereza más grande... ¿Los aviones tienen que irse tan temprano? Agg. Me vestí rápido, fui al baño (a arreglarme, por que tenía cara de Zombie) y bajé con mis primas, Siomara nos acompañaba al aeropuerto. Nos montamos todas en el coche junto con mis padres y después de 45 minutos de viaje, llegamos al aeropuerto. Allí tuvimos una gran despedida con mis primas.

Anabel: Gracias por todo y nos vemos muy pronto.

Laura: Prima... te quiero muchísimo... ven a vernos... ¿vale?

Irina: Mi amoor... no me llores... que sabes que yo soy muy mala para las despedidas... anda ven aquí y dame un abrazo.

Siomara: Chicas me habéis caído genial, en serio, cuando queráis, podéis venir aquí que en mi casa tenéis un sitio.

Raquel: Bueno nos vamos que tenemos que embarcar, os queremos mucho.

Mamá: Adiós mis niñas lindas.

Papá: Irina irá pronto, un beso chicas.

Que mal llevo yo las despedidas, aunque conozca a alguien de solo hace un día, ya lloro, con que con ellas... Cogimos de nuevo el coche, dejamos a Siomara en su casa y volvimos a casa. Nos llevó el resto del día recoger toda la casa, así que nos fuimos temprano a la cama, ya que era domingo y la semana de vacaciones ya se había acabado, vaya rollo, mañana instituto.

'Pipipipí...pipipipí...pipipipí...'

'Maldito despertador, ya te vuelvo a odiar' De vuelta a la rutina, levantarse, ir al baño, vestirme, desayunar y coger el autobús... ¿Por qué las vacaciones duran tan poco?

Lunes a primera hora, Ciencias Sociales con Israel, menos mal que también es nuestro tutor y nos entiende.

Israel: Chicos... tengo una noticia para vosotros.

Andrea: Buena... o mala..?

Israel: Depende de como os la toméis, para mi es buena, a saber para vosotros. Isabel, pasa por favor.

Isabel: Buenos días chicos, como ya sabéis todos, soy la directora de este centro y como directora que soy, me gustaría presentaros a vuestra nueva compañera de clase. Ella viene de Lanzarote, se llama María.

María: Ho... Hola... Buenos días...

Inma: Ven siéntate aquí, conmigo, vamos a ser buenas amigas.

Israel: No María, mejor quiero que te sientes con... con Irina que hoy está sola, ¿sabes que le pasa a Siomara?

Irina: Se habrá quedado dormida, hola María, encantada.

María: Hola... mucho... mucho gusto.

La directora se marchó y empezamos a dar la clase de sociales. María me sorprendió bastante. Yo soy una de las chicas más listas de clase y la verdad es que ella está a mi altura ¡contesta todo! Encima de lista guapísima... Alta, con el pelo negro, liso y con flequillo, ojazos color miel y una piel muy clarita, pues eso, muy guapa. Hoy todas nuestras asignaturas nos tocaban en la misma aula, menos la última.

María: Perdón por ser tan tímida antes, es que como no conozco a nadie...

Irina: No importa, ya me conoces a mi, nos llevaremos bien, no te preocupes.

María: Oh... que linda, muchas gracias. Mira que... tengo un problema...

Irina: ¿Que te pasa?

María: Verás, me toca plástica y no se en que clase es...

Irina: No te preocupes, a mi también me toca, vamos juntas. La profesora es Marta, es maravillosa, te va a caer genial.

María: Que bien, eso espero. El dibujo se me da genial... ¿y a ti?

Irina: Bueno... si me concentro me salen dibujos magníficos.

Entramos en clase de plástica y yo misma presenté a María, mi nueva amiga. Marta comenzó a decirnos las nuevas cosas que íbamos a necesitar para una nueva actividad que había pensado. Se pasó casi toda la hora hablando, a veces es pesadita... Quedaban unos minutos, así que se me ocurrió hablar con María.

Irina: ¿Y por donde vives?

María: No recuerdo bien el nombre de la calle, pero según sales del instituto tienes que girar a la izquierda, ¿y tú?

Irina: ¡Yo también giro a la izquierda! ¿Quieres que volvamos juntas del instituto?

María: Vale... pero yo tengo que ir a la parada de autobús, que para llegar a mi casa lo necesito.

Irina: Sin problema, yo también tengo que cogerlo.

María: Que bien, así yo te enseño donde vivo.

Irina: Me parece genial ¿vamos bajando? Quedan dos minutos, así no hay cola, que al salir esto parece el Madrid Arena.

Bajamos las escaleras y justo tocó el timbre. Giramos a la izquierda en la salida y allí me esperaban como de costumbre unos amigos de clase, a los que no puedo irme sin decirles adiós. Los despedí y nos subimos al autobús juntas. Mi casa está a unos 15 minutos del instituto.

Irina: Yo me bajo aquí María, hasta mañana.

María: Ah sí, yo también, ¿vamos?

Irina: Sí, vamos.

María: Mira yo vivo aquí, en este edificio...