Era la primera noche que había sido capaz de dormir de un tirón. No había soñado, pero tampoco había tenido pesadillas. Mireya me llamo poco después de haberme despertado.
- No te he despertado ¿no?
- No no me has despertado qué pasa Mireya.
- Nada, es solo que estaba preocupada por ti. Ayer te fuiste derrepente ¿estas bien?
- Si, no te preocupes todo esta bien.
Le conté todo a Mireya para que así se quedara tranquila. No se lo podía creer, pero termino por darse cuenta que el también había "desaparecido" derrepente. Mientras se lo iba contando Mireya no paraba de interrumpirme con preguntas y grititos. Termino con un yo te lo dije cuando llegué a la parte en que le decía que Tom me había confesado que yo le gustaba, y yo no pude evitar reírme.
Terminamos de hablar y bajé a desayunar. Después de comer volvió a sonar el teléfono. Esta vez no era Mireya, era Tom. Quedamos a las cinco. Estaba nerviosa, era la primera vez que quedaba con Tom, por lo menos sin estar rodeados de todos sus amigos. No sabia que ponerme y después de revolver el armario durante media hora me decidí por mi vaquero favorito, estaba muy desgastado de tanto ponérmelo, pero me seguía gustando, una camiseta de tirantes a rayas y mis zapatillas blancas. Mi pelo lo llevaría, como siempre, suelto. Me maquille solo un poco, no necesitaba pote porque al estar en verano ya me había puesto morena, por lo que me hice la raya y me puse un poco de rimel. Tom llegó justo cuando había terminado. Solo me quedaba coger el bolso y las llaves. Fui a abrir la puerta y cuando lo hice allí estaba él mirándome con una sonrisa. Me podría acostumbrar a esto.
- hola - me dijo cogiéndome la mano
- Hola - le respondí con una sonrisa - ¿cual es el plan para hoy?
- ¿Te gustaría ir al cine? - me reí al recordar lo que había pasado el día anterior.
- Claro, pero esta vez no te iras ¿no?
- No, esta vez me quedare contigo
No tardamos mucho en llegar, en lo que si íbamos a tardar era en entrar. No había tanta gente como en el día anterior , pero aun así había demasiada gente. Suponía que era porque no era un día muy caluroso para ser verano. Por lo menos tenia una buena distracción. Tom había estado todo el rato haciendo bromas, contándome cosas o la mejor distracción de todas besandome. Estábamos en uno de esos momentos de distracción cuando alguien llamo a Tom.
- ¿Tom?
- ¡Paula, que sorpresa verte!
- ¿Quien es ella?
Eso me molestó. Entenderme no es la pregunta en si lo que me molestó, fue el modo en el que lo dijo, como si estuviéramos haciendo algo malo, como si se mereciera alguna explicación.
- Ah, si, claro. Esta es Vero, una amiga de Ana
Me resulto raro que me presentara como amiga de Ana, pero tampoco habíamos dicho nada de que fuéramos novios, solo que yo lo había supuesto.
- Amm, encantada - dijo Paula. Se notaba que aunque su boca dijera eso en realidad no pensaba eso.
- Igualmente - dije. No estaba en mi ser antipática aunque las personas lo fueran conmigo.
- Pasároslo bien. Adiós - se despidió con la mano una vez que estuvo alejada de nosotros.
- Encantadora - dije con algo de sarcasmo. Tom se me quedo mirando con una pregunta en la cara. Sabia que se estaba aguantando las ganas de reírse.
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Diario de una indecisa
RomanceVeronica es una adolescente de 15 años que lleva enamorada 3 años de Dani, un chico que esta en su grupo pero con el que apenas habla. Dani empieza a acercarse mas a ella pero justo llegan las vacaciones y Dani se va a Londres. ¿Que sera lo que quer...