El emperador y la emperatriz

Capitulo 13

*En el infierno*

Akuma despertó de su sueño, recordó todo lo que había pasado con Alucard, sintió como su corazón se quemaba ante el recuerdo; La ira hizo estremecer el cuerpo de la Nosferatu y ahí se dio cuenta de que lo odiaba, su corazón ahora negro odiaba a Alucard por traicionarla, cuando ella le había dado su cuerpo y su alma así le pagaba.

Se levanto de un salto y noto que estaba en pijama, Yokkyū seguramente la había cambiado, camino hacia su armario y se vistió con el vestido más oscuro que tuviera, era negro con circuitos azul en el, los símbolos del infierno se encendían en sus brazos, sus ojos inyectados en sangre ahora eran tan rojos como el fuego mismo.

Se termino de vestir y salió a paso largo hacia su corte real portando en la cabeza el símbolo al que todos le temen, la corona de espinas de hierro reposaba en su cabeza. Llego con un estruendo y todos los presentes voltearon sorprendidos, los tacones de aguja de Akuma sonaban en el mármol negro de la sala, camino sin decir nada hasta el trono echo de sombras y almas que estaba en lo más alto de la habitación.

-su majestad-dijeron todos al unísono inclinándose ante la reina de su mundo.

-Hades-dijo Akuma suavemente

El mencionado subió las escaleras hasta el trono y se arrodilló frente a Akuma.

-si majestad?

-empezaremos guerra-dijo levantándose-todos mis demonios prepárense, una nueva fuerza nos amenaza y viene de arriba! Preparen sus armas siervos míos, la batalla se avecina y venceremos!-gritó Akuma y las sombras y demonios presentes gritaban y celebraban-Hades tú dirigirás mis tropas y los guiaras a la victoria-Hades solo asintió-montaras a Cerbero y condenarás con tu espada a todas las almas, las llevaras al Limbo-dicho esto Akuma hizo su señal y todos los presentes se fueron a preparar.

Antes de que Hades se retirara esta le hablo.

-Gracias por salvarme Hades, tienes mi completa gratitud-dijo Akuma tomando una de las manos de su sirviente.

-no tiene que agradecerme mi reina, es mi trabajo y deseo protegerla. Hay algo más que pueda hacer por usted?-Akuma asintió

-prepara a Fenrir-dicho esto Akuma se fue hacia la torre sombría a prepararse.

Hades asintió y bajo hacia el sótano, en el último piso, encerrado con cadenas de sombra y desesperanza estaba El Fenrir, un lobo monstruoso y demoniaco que comía personas, destinado por la mitología nórdica a matar a Odín; este lobo era la criatura más peligrosa que poseía Akuma y además era su mascota. El lobo era más grande que Cerbero y vestía armaduras bañadas en la sangre de quienes se atrevieron a desafiarlo.

En la torre sombría estaba Akuma preparándose, la noche se avecina en el mundo de los mortales y Akuma se preparaba, ya con traje puesto, armadura de plata en su cuerpo y corona en su cabeza miraba el paisaje de sus billones de almas preparándose a pelear, todos ya formados en frente del portal, faltaba poco, la melodía de la guerra ya estaba resonando, ese sería el día.

Hades subió donde su reina a avisarle que todo estaba listo, que los soldados ya estaban formados y preparados para salir.

-excelente Hades, solo una cosa, maten a todo el que se les cruce pero el Vampiro Alucard, es mío-dicho esto Hades asintió y bajo con Akuma a formarse para la guerra.

Yokkyū escuchaba detrás de la puerta de la torre, a pesar de que no conocía mucho a Alucard lo había investigado, sabia de sus poderes y de sus batallas, tenía que avisarles a los de Hellsing la guerra que se aproximaba, y sin más, desapareció dentro de un portal.

*vaticano*

Todos los soldados ya estaban en sus puestos, los aviones ya volaban hacia Londres, la guerra se acercaba, cada segundo era un paso más cerca para destruir todo lo que para ellos era impuro, entre esas cosas estaba Hellsing.