¡Sorpresa!

9 0 0
                                    

- ¡Auch!- dije sintiendo el dolor punzante de mi pie, ya era la 3ra vez que me golpeaba con un escalón.

- A la otra..mejor te cargo- dijo soltando una risita.

- Vamos Jake, sólo sígueme guiando- dije desesperada por ver a donde me llevaba.

Llevábamos caminando una media hora, no se a donde íbamos pero estaba claro que no iba a ser tan paciente por más tiempo, estaba
a reventar. En mi mente pasaron todas las opciones de a donde podía llevarme, desde que salí de casa estuve haciendo un mapa en mi mente tan solo supe que doblamos tres cuadras de lo demás no tenía ni idea. Empece a sentir un hormigueo en el estomago, sabia que era: emoción combinada con nervios.

- Ya estamos cerca- dijo Jake doblando a la izquierda- Cuidado, escalón- dijo mientras me pegaba por cuarta vez.

- Serias un pésimo vigía de barco- dije poniendo esta vez bien el pie en el escalón- para cuando dijeras que hay una roca en frente ya habrían chocado- pude oír que se rió.

Subí 30 escalones según había contado, estaba agotada pero seguía sintiendo esa emoción que me recorría el cuerpo, ya quería saber que me esperaba. Camine un poco hacia adelante, podía escuchar cuando Jake ha abrió una puerta, como se escuchaba parecía grande y pesada.

- Vamos, con cuidado..entra- me guío hacia dentro de algún edificio, podía notarlo por la menor cantidad de ruido que afuera, escuche como se cerraba la puerta detrás mío, adentro gobernaba un silencio apacible.

- ¿Puedo abrirlos ya??- dije suplicando.

- Esta bien, ábrelos- inmediatamente obedecí su orden, mis ojos se abrieron como plato y se me salió un grito bajo pero alegre.

No había ni cincuenta si no como mil hileras de libros a mi alrededor que se extendían a lo largo de la enorme sala, llegaban como 20 metros encima de mi, me tape la boca y di vueltas sobre mí misma para admirar mejor la sala. Era impresionante, era una biblioteca enorme y los estantes que llegaban hasta el
Techo estaban hechos de madera con adornos impresionantes estilo del Renacimiento. Había letreros dorados que decían la categoría de libros : ficción, romance, terror, historia, humanidades, ciencias...música...¡todo estaba aquí!, Clásicos...Mire a Jake que se divertía con mi expresión, la verdad ¿quien no lo haría ? Mi cara parecía haber visto el país de las maravillas, cuando solo era una biblioteca, bueno, eran las maravillas de los libros.

- Bueno, al menos se que no la odiaste - dijo acercándose sin dejar de reír.

- Jake..¿De-de dónde han salido tantos libros??- las palabras apenas me salían estaba demasiado impresionada como para hablar bien.

- Bueno, la biblioteca "Magium" lleva en mi familia 3 generaciones, contando la mía; mi abuelo decía que no había mayor poder y don que el conocimiento, dijo que quería que las personas lo experimentarán y pues...la construyo.

- ¿Por que no me había hablado de ella?, Jake...es impresionante- dije mirándolo.

- Pues; era una sorpresa, además si vas a la escuela y presumes de tener una biblioteca es igual a que dijeras que no tienes una, a la gente ya lo le interesan los libros- dijo dando unos pasitos alrededor de mí- Pero cuando vi que a ti te fascinaban, no pude evitar esperar a enseñártela.

- Ósea.. ¿que esperaste hasta el día de mi cumpleaños para mostrármela?- el asintió sin dejar de dar vueltas al rededor de mi- Vaya..Jake ¡amo mi sorpresa!- dije corriendo a abrazarlo, el me apretó fuerte hundiendo su cara en mi pelo.

- eh, espera, esta no es tu sorpresa, falta la mejor parte- dijo separándose de mi.

¿¡Que podría ser mejor?!! Debió de adivinar mi expresión, porque al momento me entrego una canastita. Lo mire esperando que me dijera que hacer con ella.

Hola! New YorkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora