Lo único que miraba eran los autos pasar, casas, edificios, tiendas, lo típico ya me había cansado de leer y de dormir así que saqué mi iPod para escuchar música, mi padre se me quedo mirando un rato e hizo una mueca.
- Ya te dije que esta vez.. el tiempo es indefinido- dijo esbozando una sonrisa.
Yo que aún no me ponía los audífonos abrí mucho los ojos, por primera vez me estaba diciendo que me quedaría más de una semana en ese lugar.
- Enserió?- pregunte entusiasmada.
- Te lo iba a decir.. Era una sorpresa pero con esa cara no pude más, no soporto verte triste por mi culpa.
- Papá no es tu culpa- dije mirándolo- es tú trabajo, lo entiendo.
- Lo se, se que entiendes es por esa razón que compré esto- dijo estacionando el auto en lo que parecía una casa con lindas ventanas y una hermosa fachada.. ni cuenta me había dado de que ya habíamos llegado a New York que era mi nueva ciudad.
Nos bajamos y lo mire atónita.
- Que es esto?- pregunte observado la casa de arriba a abajo.
- Esto para ti y para mi se llama casa- dijo abriendo las manos como si la presentara.
Sonreí y lo fui a abrazar, al fin tenía una casa! Al fin me quedaría en un lugar determinado y podría tener amigos, al fin tendría un futuro.
- Pero como?!- dije emocionada aún.
-Me ofrecieron un buen trabajo aquí! Y pues acepte- dijo- pero lo mejor de todo es que aún te falta conocerla anda ve y entra- dijo señalando la entrada.
Mire la entrada y jale la perilla, no había palabras, ya estaba amueblada..tenía todo sala, televisión, cocina, armario, comedor..
Mire a mi padre esperando una explicación.
- Les pedí un adelanto- dijo metiendo se las manos en el pantalón- no vas a subir a tú habitación?- sonreí y me apresuré.
Subí las escaleras, y busque mi habitación había un baño en un pasillo y al fondo dos puertas una decía con letras grabadas: JANE, era como los apartamentos o mejor tenía todo, donde poner mis libros,un sillón, una cama con dos lámparas..era suficiente para mi.
Baje y cargue las pocas cosas que tenía, las acomode en cajones y en el armario; me sentía feliz de estar ahí.. De estar es casa.
Mire hacia la ventana de mi habitación no tenía un sillón a lado pero tenía la vista hacia la entrada de la casa, pude ver a mi padre hablando con lo que parecía una mujer. Baje para saludar.
- Hola! ella debe ser Jane- dijo la mujer en cuanto me vio salir de la casa, tenía pinta de unos 50 años, bastante grande para papá.
- Hola- le estreche la mano.
- Jane ella es la señora Fink, es nuestra vecina que nos ha dado la bienvenida- dijo Papá quien traía un rico pie en la mano.
- Eres muy hermosa- continuo diciendo la señora Fink- les deseo suerte en su instancia, les aseguró que aquí no se van a aburrir- dijo y sin más se fue vivía en la casa de enfrenté.
- Gracias hasta luego señora Fink- alcanzo a gritar mi padre.
- Lista para la escuela- dijo minutos después.
- No- dije
Echo una carcajada y nos metimos a la casa.
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Me dormí temprano ese día, estaba cansada de desempacar, mi padre dijo que me había inscrito a una escuela que al parecer "ayudaban a instalarse fácilmente". Llegaré mañana a la mitad del semestre sólo de pensarlo me ponía la almohada en la cara y cerraba los ojos. Sólo espero que esto funcioné.
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Hola! Esta es mi segunda novela y espero que les gusté, lamento que algunos capítulos estén más pequeños que otros, necesito organizarme!! XD pero lo importante es que le encuentren sentido y pues deseen me suerte!!
Gracias por aquellos que les den votos, en serio significa mucho para mí. Bye, bye
