-Te estaba pidiendo matrimonio, tonto.-

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-Te estaba pidiendo matrimonio, tonto.-

Miyavi cogió a Suzu en brazos y la llevó al baño. Una vez allí la despertó y le dijo que se metiera en la bañera.

-Mmmm... no.- Respondió aún con los ojos cerrados.

-Por favor, no quiero que Yuu piense mal.- Insistió Miyavi.

-¡Yuu ya no me ama! No puede pensar mal si ya no me ama.- Suzu giró su cabeza y abrió los ojos llenos de lágrimas.

-¿Por qué dices eso?- Ella apretó los labios antes de emitir un sonido incomprensible.

-Él me odia por haber perdido el bebé.- Miyavi abrió los ojos y luego suavizó la mirada.

-Entiendo, por favor quítate la ropa.- Suzu se levantó y se empezó a quitar la ropa, se quedó desnuda delante de Miyavi el cual se sonrojó mientras la ayudaba a meterse en la bañera.

-¿Le echas de menos?- Le preguntó Miyavi a Suzu mientras deslizaba la esponja por su brazo.

Ella miró hacia otro lado con los ojos brillantes.

-Muchísimo.- Susurró.

-¿No crees que él también te echa de menos?- Suzu miró a los ojos a Miyavi.

-No, él dejó de ser el mismo desde que se enteró que perdí al bebé.-

-¿No has pensado que quizás él se culpa por tu perdida?- Suzu se quedó callada y asintió.

-Pueda que tengas razón.-

Después de bañar a Suzu, Miyavi la llevó a la cama y la dejó dormir.

-¿Miyavi qué ha pasado?- Preguntó preocupado Aoi.

-Aoi creo que debes regresar lo más pronto posible, Suzu no está bien.-

-¿Qué le ha pasado?-

-Ella se culpa de la pérdida del bebé y dice que por eso tú ya no la amas.-

-¡Pero qué tontería es esa!-

-Vuelve lo más pronto posible, he pensado que cuando ella se despierte la mejor solución será llevarla a un psicólogo.-

-Está bien.- Aoi colgó y Miyavi se sentó en el sofá, esperando a que Suzu se levantara.

-Pov's Aoi-

-¿Qué ha dicho?- Preguntó Uruha que estaba al lado de Aoi.

-Suzu está muy mal, se culpa de la pérdida del bebé.-

-¿Qué harás?- Preguntó Kai apoyado en el marco de la puerta.

-Volveré, no puedo dejarla sola.- Uruha sonrió.

-Es la mejor decisión, vete.-

-¿Ahora?-

-Claro, Suzu es más importante que el trabajo.- Respondió Kai con una sonrisa de oreja a oreja.

-Gracias chicos.-

-¿Crees que todo se arreglará?- Preguntó Uruha que ya estaba al lado de Kai, viendo como Aoi corría hacía la salida.

-Sí, después de todo Aoi es un experto en las chicas.- Respondió Kai sonriendo.

-En el apartamento de Aoi-

[En edición] Mi agradable vecino [the GazettE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora