La espera / Waiting

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 MIÉRCOLES

-Todo esto es perfecto. Es más que perfecto. Parece sacado de una serie Disney. Perfecto.

Pochė no podía hacer más que reír, al igual que siempre lo hacía ante las ocurrencias de su amiga.

Ambas estaban en casa de Pochė, desayunando en el living antes de ir al instituto. Pochė revolvía los cereales en su tazón mientras sentía ese cosquilleo en la panza que siente la gente cuando están hablando de la persona a la que más aman en el mundo.

Pochė: Todavía no sé si volveremos a estar juntas.

Christina dejó caer su cuchara en el tazón bruscamente, salpicando el contenido por todas partes.

Christina: ¿CÓMO QUE NO SABES SI VOLVERAN A ESTAR JUNTAS? ¿ESTÁS JUGANDO CONMIGO? -dijo gritando.

Pochė: Cálmate, estás escupiéndome cereal en la cara -dijo en voz calma y serena mientras retiraba restos de comida de su rostro. -No puedo dejar que todo sea como antes sin pensarlo bien.

Christina: ¿Qué es lo que tienes que pensar? Tú la amas, y ella te ama, y está muy arrepentida por lo que ocurrió; eso es todo lo que deberías necesitar.

Pochė: Es difícil confiar de nuevo en alguien que ya te lastimó antes; de hecho es estúpido volver a confiar en alguien que ya te hizo daño. Ese es el problema. No tengo dudas de su amor ni del mio, es sólo que...

Christina: Sólo que ¿qué?

Pochė: Es sólo que, si la perdiera de nuevo, no sé si podría soportarlo. Necesito estar preparada para el día en que nuestra relación termine definitivamente. Porque es obvio que terminará.

Christina se tomó unos segundos, alejó el cereal de ella, y se puso de pie, frente a Pochė

Christina: Escucha... Sí, es cierto; hay una gran posibilidad de que su historia de amor tenga fin; es muy probable que no envejezcan juntas, pero esas probabilidades son iguales para cada pareja del mundo, no sólo para ustedes. Y sí, debes estar preparada, porque todo lo que sube tiene que bajar, y tienes que asegurarte de caer de pie cuando caigas, eso está bien. Pero no dejes que ese miedo a caer te impida amar. No puedes pasar toda la vida con miedo a vivir sólo porque sabes que un día vas a morir; de la misma forma en que no puedes temer amar sólo porque existe la posibilidad de salir herida. Las cosas terminan, es una ley del universo y nadie puede cambiar eso; pero lo que si puedes hacer es vivir las cosas al máximo mientras las tengas. Ahora mueve el trasero de esa silla y vamos a la escuela o llegaremos tarde.









***









JUEVES

-No creo que estés pensando con claridad. No sólo no lo creo, estoy segura; no estás pensando con claridad.

Desde luego, demasiada positividad era mucho pedir en la vida de Pochė; así que por cada persona pensando que era algo favorable la reconciliación con Calle, había otra persona diciéndole que era una locura.

Su madre formaba parte del segundo grupo.

Pochė: Mamá, por favor... es importante que me apoyes en esto.

Elena: Lo sé -estaban sentadas en el sofá del living, luego de que Pochė le dijera todo lo que había ocurrido con Calle... bueno, no todo; sólo lo que necesitaba saber -se que es mi trabajo como madre apoyarte en tus decisiones, pero también es mi trabajo como madre avisarte cuando estás a punto de tropezar con una piedra con la cual ya tropezaste antes.

Pochė: Ella no es una piedra para mi.

Tenía una sensación molesta en la garganta, una mezcla extraña entre furia y tristeza. No creo que ese sentimiento tenga un nombre, pero no se sentía bien.

Towards LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora