Towards Love

Condena / Sentence

Últimos 2 capítulos.

Y así es como la historia regresa al prólogo.

Ya habían transcurrido dos semanas desde el incidente. Dos semanas en las que Pochė tuvo que estar bajo custodia policial. Todo el día. Pero no era la única que estaba en esta situación. Calle y  Christina pasaron las últimas semanas con custodia, pero al menos estaban en sus casas -de hecho, ambas estaban en casa de Christina - y con permiso de salir.Pochė, en cambio, tuvo que pasar las 15 noches en prisión preventiva.

Pero el juicio había llegado, finalmente.

Todos los presentes en el tribunal sabían lo que había ocurrido, Pochė lo había relatado minutos antes. Bajo la mirada de su madre, de su familia, de su mejor amiga y de su amada, había confesado ser ella quien disparó el arma que acabó con la vida del señor Klein. Lo había reconocido abiertamente, porque era la verdad. Pero cuando no parecía querer dar explicaciones sobre por qué había ocurrido eso, Calle pidió permiso para declarar frente a la jueza, quien luego de escucharla hablar durante varios minutos, no pudo más que decirle:

-¿Por qué la defiendes con tanta pasión? Es decir, estás aquí gracias a ella, y supongo que eres consciente de la gravedad de este asunto. Ella asesinó a tu padre, ¿cómo puedes estar hablando de lo admirable que es?

Calle dejó escapar un largo suspiro. Parecía que todo el mundo le preguntaba lo mismo una y otra vez pero sin embargo nadie podía entender.

Calle: Ella es admirable. Ella me dio esperanzas cuando no había ninguna, y no conforme con eso arriesgó su vida para salvar la mía. Jueza, usted no tiene idea del infierno que era mi vida antes de conocerla. Y era un infierno gracias a ese hombre al que usted le otorga el honor de llamarlo "padre", porque déjeme decirle que eso no es un padre.

La jueza se reclinó en su silla y preguntó:

-¿Te importaría contarnos la historia?

Calle sabía que la jueza no le estaba pidiendo que declare contra su padre, ¿para qué querría que declare contra un muerto? Sabía que quería escuchar toda la historia, completa. Sonrió al mismo tiempo que negaba con la cabeza.

Calle: Lo siento, pero no. Mi historia con María José Garzón es demasiado especial y privada. No dejaría que alguien como usted la arruine con sus opiniones.

-Conozco los hechos de esa noche, pero no son suficientes para determinar la culpabilidad de cada persona. Si no me dices lo que ocurrió, no puedo dejar que te vayas. Ni tú, ni tus amigas.

Calle bajó la mirada hacia las esposas plateadas en sus muñecas. Era increíble pero, hubo ocasiones en las que se sintió aún más prisionera. Echó un vistazo alrededor de la sala, y vio los ojos marrones de la morocha en una esquina del lugar. Sus muñecas estaban como las de ella. Esa era la chica que la había liberado, pero que al mismo tiempo la había puesto en esta situación. Vaya dilema.

Calle: De acuerdo. Le contaré -volvió a suspirar -prepárese para escuchar la mejor historia de amor jamás contada.

Pudo sentir como Pochė sonreía.

***

3 horas. Calle estuvo hablando sin parar durante 3 horas. Relatando cada pequeño detalle de su relación con Pochė, y cada pequeño detalle del infierno con su padre.

Lo sorprendente es que nadie se levantó del lugar ni siquiera para ir al baño, y todos las escuchaban encantados. Más de uno tenía lagrimas en sus mejillas, e incluso el oficial, que se encontraba junto a Pochė, pestañeaba rápidamente para obligar a las lagrimas a permanecer dentro de sus ojos.