Profugos / Fugitives

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Calle: Hola Bella Durmiente –dijo asomándose a Poché cuando abrió los ojos. Una sonrisa apareció en el rostro de la morocha. Calle comenzó a llorar cuando la vio sonreir. Hasta hacia 2 horas pensó que nunca la vería sonreir de nuevo.

Doctor: Poché –dijo acercándose a ella con sus instrumentos médicos –necesito ver si no hubo daños en tu cerebro.

Dicho eso, comenzó a examinarla. Calle intentaba observar lo que hacia, pero Elena obstruía su vista. Lo único que pudo ver fue cuando examinó sus ojos con una luz.

Doctor: Repite después de mi: "Ni si, ni no, ni sin peros"

Poché: Ni si, ni no, ni sin peros.

Doctor: Bienvenida a la vida de nuevo Poché–dijo sonriente.

***

Poché: No tienen una idea de lo feliz que estoy por poder irme de este lugar –dijo mientras subía sus cosas al auto, algunos días después. Se dio la vuelta y vio al doctor de ojos celestes entregando unos papeles en la recepción –amm... enseguida vuelvo, olvide algo.

Elena: Por favor ve con cuidado.

Poché: Claro.

Poché tendría que tomar varios cuidados desde ahora, no sólo en lo que respecta a la medicina para su corazón y cerebro.

Calle la vio alejarse hacia el hospital, y no pudo evitar pensar en lo hermosa que se veía, aun con la cabeza vendada y esa cicatriz que sobresalia por su blusa. Se veía hermosa porque era feliz. Miró hacia el cielo, pero no en busca de respuestas, miró al cielo para agradecer porque ambas estaban con vida. Ambas estaban con vida y eso era algo para festejar. Por primera vez, sentía que la vida era justa.

Poché: ¡Doctor! –gritó cuando entró al hospital nuevamente.

Doctor: Señorita –dijo volteando sonriente -¿ocurre algo?

Poché: No, estoy muy bien. Sólo quería agradecerle por todo lo que hizo por mi en estos días. Usted salvó mi vida.

Doctor: No tienes que agradecerme, es mi trabajo.

Poché: Se que es su trabajo, pero me da la sensación de que a los doctores no se les agradece tan a menudo como debería. Así que gracias.

Doctor: De nada. Cuídate mucho alla fuera.

Poché: Lo haré. Adiós –dijo dándose la vuelta para alejarse, pero la voz del hombre la detuvo.

Doctor: ¡Poché, casi lo olvido!

Poché: ¿Qué ocurre? –dijo regresando.

Doctor: ¿Sabes por qué nos demoramos más tiempo del indicado durante la cirugía?

Poché lo miró dudosa.

Poché: No, creo que no me lo ha dicho.

Doctor: Fue porque el coagulo no estaba en la parte del cerebro en la que creíamos que estaba.

A la morocha le tomó algunos segundos entender a lo que el doctor se refería.

Poché: Eso significa que?....

Doctor: Así es. Tu fortaleza no era un síntoma. Simplemente eres la persona más valiente del mundo.

Poché sonrió sientiendose alagada.

Poché: Disculpe, ¿Cuál es su nombre?

Doctor: Gwreen.

Selena: Gwreen. No me olvidaré de usted.

Doctor: Ni yo de ti, lo prometo. Ahora regresa con tu madre, te están esperando. Oh, y muchas gracias.

Poché: ¿Por qué?

Towards LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora