Bad Boy (Bronnor)

15

NARRA BRAD:
Me despierto algo desorientado, al abrir los ojos me escuecen como si no hubiera dormido nada. Alguien zarandea a Connor para despertarlo y él parece en la misma situación que yo.
- ¿Qué...? ¿Austin?
- Necesito tu ayuda Connor. -dice ese tal Austin. Connor asiente y se levanta, se agacha un momento y me susurra:
- Sigue durmiendo amor. -y se marcha de la habitación. Pero yo no puedo dormirme otra vez. Así que espero pacientemente a que vuelva. Cuando lo hace su cara me dice que no hay muy buenas noticias.
- ¿Qué pasa? -pregunto empezando a preocuparme.
- Tengo que irme a un sitio. Será un momento.
- No. Quiero ir contigo.
- Es mejor que no Bradley.
- Connor por favor, no me dejes aquí solo...
Suspira redido y al final asiente. Nos vestimos y el me deja ropa suya ya que yo sólo tenía el uniforme del instituto. Sus pantalones me iban algo anchos y su camiseta más olgada que a él, luego cogio unos zapatos y me los dio y también una chupa de cuero.
- ¿Es necesario que lleve todo esto?
- Bradley por favor no hagas preguntas, cuando lleguemos allí lo entenderás todo. No te va a pasar nada, ¿confías en mí? -asiento lentamente con la cabeza y el sonríe y me acerca cogiendome de la cintura, cuando paso los brazos por sus hombros me besa dulcemente.- Todo va a ir bien.
Media hora más tarde conduce a toda pastilla por las calles casi desiertas de Birmingham. Las luces amarillas hacen que me vuelva el sueño pero lucho contra él lo mejor que puedo. Cuando quiero darme cuenta estamos entrando en una especie de fabrica abandonada. Parece caerse a trozos desde fuera pero una vez dentro estaba llena de motos, coches, tuneados con colores brillantes y metalizados. La gente viste de negro con ropa rota y collares de pinchos, es todo un mar de pelos y crestas de diferentes colores. Inconscientemente abrazo más fuerte la cintura de Connor a lo que él responde susurrándome que confíe en él. Se acerca a un grupo de chicos que parecen más de su edad y apaga el motor de la moto. Se incorpora y se quita el casco. Yo le imito. Entonces él suelta el agarre de su cintura y me sonríe tranquilizadoramente aunque claramente no produce un efecto tranquilizador en mí sino más bien de nerviosismo. Nos bajamos de la moto mientras los otros chicos se acercan. Uno es rubio, algo más alto que él, tiene muchos pendientes en las orejas y un mechón teñido de azul, lleva una camiseta de alguna banda que desconozco y unos pantalones rajados por las rodillas. El otro chico también es rubio y va vestido más o menos igual, solo que este tiene una bonita sonrisa que me relaja un poco. El otro es moreno con unos rizos parecidos a los míos, pero es mucho más alto.
- ¿Qué tal tío? Hacía siglos que no nos veíamos. -dice el rubio con pendientes.
- Hola. -le saluda Connor cogiendome de la mano.
- ¿Quién es él? -dice el moreno de rizos.
- Es mí novio. Se llama Bradley. Bradley estos son Drew, Nate y Levi. -saludo timidamente mientras noto como mis mejillas se sonrojan. Ellos me saludan con la cabeza.
- Me suena... -dice ese tal Drew. Y la verdad es que él a mí también, pero no sé de qué.
- ¿Has venido por lo de Aus? -Connor asiente.
- Me ha contado lo que ha pasado con su moto. ¿Dónde están?
- Allí. -dice Levi, y señala hacía otro grupo que hay más allá que también miraban hacia nosotros. Connor bufa y va hacia ellos. Pero yo se lo impido cogiendolo del brazo.
- ¿Qué vas a hacer? -pregunto algo asustado, la voz me tiembla y me siento estupido y miedica pero es que yo no estoy acostumbrado a estas situaciones.
- Tranquilo Braddy, todo va a estar bien.
- ¿Pero qué vas a hacer?
- Voy a hablar con ellos.
- ¿Qué ha pasado con la moto de Austin? -él suspira.
- Bradley aquí se hacen apuestas. La gente corre y se juegan sus motos, dinero, incluso chicas. Austin ha perdido su moto en una apuesta.
- Pues entonces es su problema.
- No lo entiendes. Austin necesita mi ayuda y le debo una. Ves con Drew, Nate y Levi y no te preocupes por mí.
Asiento y lo veo irse, habla con esos chicos y parecen discutir, quiero acercarme pero Levi me retiene.
- Connor está bien, tranquilo. -asiento, pero me da algo de mal rollo todo esto. Sé que algo va mal.
Después de esperar un rato Connor vuelve.
- ¿Lo has conseguido? -le pregunta Nate.
- Sí.
- ¿El qué? -pregunto yo. Connor me mira y murmura:
- Una carrera de revancha.