ESPECIAL DE NAVIDAD: La mejor manera de estrenar el auto.

209 20 10
                                    

Primero que nada les quiero desear una muy feliz navidad y próspero año nuevo a todos :D Que pasen un lindo día junto a sus seres queridos -w- ¿Qué recibieron de regalo ustedes? Yo unos chocolates nada más, todos los otros regalos eran para mi hermanita ¬¬ jaja, bueno ahora sí, ahí viene el especial, disfrútenlo 7w7

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Narra Roy

Ya tenía todo planeado y fríamente calculado. Esta noche buena nos reunimos todos en casa para celebrar la llegada de la navidad, los invitados Akemi, Kevin, mis padres y algunos vecinos y amigos, habían traído comida y nosotros también pusimos la nuestra en la mesa, cenamos tranquilamente y en armonía. Todo estaba listo y perfecto, ahora solo había que esperar, eran las 23:55 y faltaba muy poco. Salimos afuera, la noche estaba hermosa, llena de estrellas que brillaban intensamente en el cielo, todos estaban muy contentos y ansiosos.

Las agujas de mi reloj de mano parecían moverse lentamente, hasta que por fin dieron las doce. Miramos hacia arriba, fuegos artificiales de mil colores comenzaban a cubrir el cielo. Brindamos y comenzamos a repartirnos los regalos.

Yo recibí un libro con recetas y muchos artefactos de cocina, ya que decían que tenía talento para ser chef; a Santi le dejamos muchos juguetes en el árbol de navidad, a mi hermana le compramos un celular nuevo y un manga yaoi, a Yuki le dimos un ratón de peluche -el cual no duró mucho tiempo sano-; a la señora Moore le regalamos un karaoke, pues dice que siempre le gustó cantar; y Bryan recibió un cuadro de pared. Al parecer se veía muy feliz con ese simple regalo, pero lo que no se esperaba es que yo aún tenía un algo especial para él...

Cuando se estaban yendo los invitados, me acerqué a mi padre procurando que nadie más escuchara y le dije que se llevara el auto que me había prestado. Me miró extrañado y tuve que contarle mi plan, entonces largó una carcajada, me deseó suerte y se fue en su auto.

Finalmente la casa quedó en silencio cuando se fueron todos, la Sra. Moore y el Sr. Wright dormían juntos en su habitación, el pequeño Santi también descansaba en su cuna, y solo quedábamos Bryan y yo.

-Mi amor, tengo un regalo para ti- Dije tomando su mano.

-¿Qué?- Me miró sorprendido. No le dije nada más y lo llevé hasta la esquina.

Allí estaba estacionado un auto 0km recién comprado, su sorpresa fue mayúscula al verlo. Se llevó las manos a la boca emocionado por aquel magnífico regalo que en definitiva era para los dos, porque dentro de poco yo iba a enseñarle a manejar también. Él, encantadísimo entró en el coche para ver su interior, yo lo acompañé y cerré la puerta.

-Y no es todo- Lo miré con una sonrisa.

-¿Ah, no?

-Hay otra sorpresa.

-Entonces sorpréndeme- Respondió él con picardía.

-Ven.

Lo llevé hasta la parte de atrás. Una vez allí empezamos a besarnos lentamente mientras lo acariciaba despacio, comenzamos a hacer movimientos más rápidos con nuestros labios y ahora con la lengua, sensualmente bajé hasta su cuello besándolo, mientras seguía tocando su cuerpo, sintiendo cada parte de él, y así poco a poco empezaba a escuchar sus gemidos. Bryan también acariciaba mi cuerpo y me traía hacia él mientras nos besábamos con más pasión. Aquello me estremecía y encendía de a poco, pronto nos quitamos las camisas y jugué con mi legua en sus pezones, algo que sabía que a él le gustaba. Ahora Bryan me empujaba hacia atrás besando mi cuello y luego descendiendo por mi abdomen hasta abajo con su habilidosa lengua.

Quitó mis pantalones y comenzó a lamer mi entrepierna por encima de los bóxers, luego se deshizo de estos y agarró mi miembro ya erecto con una mano mientras lo introducía en su boca jugando con él y masturbándome. Conocía muy bien todos mis puntos sensibles y sabía cómo darme placer, me estaba dejando llevar pero pronto recordé que esta vez me tocaba a mí hacerlo gozar a él, pues ese era su regalo de navidad.

Así que cuando llegó la hora, introduje dos dedos primero en su boca para humedecerlos y luego en su entrada, comenzando a moverlos despacio, él solo gemía pidiendo que se lo meta.

-¿Te sientes listo?- Le pregunté antes de pasar al siguiente nivel.

Solo contestó moviendo la cabeza indicando un sí, entonces no me hice esperar más y lo puse boca-abajo en posición de perrito, suevamente lo penetré sintiendo el calor de su interior. Mientras tanto yo le hablaba despacio y acariciaba su espalda para darle más seguridad, comencé a moverme lento para ayudar a dilatarlo, poco a poco sentía como empezaba a ceder y ya podía aumentar un poco la velocidad y profundidad. Pronto el lugar se llenaba de gemidos y jadeos, cada vez que aumentaba la velocidad también aumentaba el placer.

Con una mano lo tomaba de su hombro para darme más impulso, y con la otra masajeaba su miembro para complacerlo. Los vidrios del auto ya estaban empañados por nuestros suspiros y respiraciones agitadas. Podía notar como él gozaba con cada movimiento y arqueaba su espalda por el placer.

Hicimos cada una de las posiciones que el pequeño lugar nos permitía hacer, ahora lo tenía debajo de mí, mirándolo a los ojos. Bryan gemía pidiéndome más, empecé con envestidas más fuertes y pronto comenzó a llegar aquella sensación máxima de placer que me hacía ver las estrellas.

-Me vengo...- Le avisé.

-Y-yo... también, ahh- Alcanzó a responder cuando yo, soltando un gemido me corrí en su interior y él también se corrió en su abdomen.

-Feliz navidad amor- Le dije entre jadeos mientras me recostaba sobre él casi sin aliento.

-Feliz navidad a ti también- Me respondió Bryan. –Gracias, ha sido el mejor regalo que me podrías haber dado.

Nos dimos un beso y nos quedamos ahí un rato más. Una vez que recuperamos las energías, nos vestimos y llevamos el auto hasta la casa. Sin dudas esa había sido la mejor manera de estrenarlo.



No se asusten, este no es el final :D el próximo capítulo, si es el final.

Bye pequeños pervertidos 7w7


Sorpréndeme (Yaoi/Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora