Capitulo 25 ∞

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¿EN QUE ESTABA PENSANDO RUTH?

— A mi no me amenazas. — dijo Cody, con la mandíbula tensa.

— Y tu a mi no me llamas puta y te quedas tan tranquilo.

— Eso es lo que eres —espetó Cody. —Soy un hombre que se anda sin rodeos. Un hombre que dice lo que siente y lo que ve.

— Me das lastima Cody. — Ruth se alejó.

Miré a Cody y luego a Ruth.

— Vamos Nicole. — me llamó.

Fruncí el ceño. — ¿Adonde? — pregunté.

— No, Nicole se queda conmigo. — exclamó Cody, iracundo.

— No seas estúpido. — Ruth rió sin gracia. — Las visitas se terminan dentro de cinco minutos y Nicole es una visita.

Cody me miró, con una ceja fruncida y expresión confusa. — Estoy seguro de que alguien puede quedarse. — musito.

— ¿Que? — Ruth se rió nuevamente. — ¿Acaso te da miedo quedarte solito?

— Joder. Ya lárgate. — Cody señaló la puerta.

— Me largo pero con Nicole. — se acercó a mí, y me agarró del brazo.

Me jaló hacia la puerta, sin tener en cuenta las advertencias de Cody.

— ¡Que la sueltes! — repitió Cody, pareciendo frustrado.

— Debe irse. Quieras o no. — dio media vuelta y se alejó cuando salió por la puerta. — Te espero Nicole. — gritó.

Miré la cara de Cody. — Debo irme.

— ¿Te irás sin despedirte? — preguntó Cody, parecía molesto.

— Espero que tengas una buena noche. — Me acerqué a Cody. — También espero qué te sientas mejor para mañana. — susurré, incliné mi cara hacia la suya, y planté un pequeño beso en sus labios.

Cuando estaba a punto de alejarme, Cody me cogió de la nuca y me besó nuevamente, A diferencia del beso anterior, este era salvaje y lleno de necesitad.

— Te amo, Nicole. — Cody rompió el beso con delicadeza. — No lo olvides.

Yo también te amo. Quise decirlo, pero simplemente no podía. Ni siquiera sé el porque accedí a besarme con él. Esto afectaría mis planes.
— Descansa Cody. — no correspondí a sus palabras anteriores. Caminé hacia la puerta.

— Eres solamente mía. — lo oí decir, antes de que pudiera salir.

Cerré los ojos con fuerza y di un grito ahogado.

Cerré la puerta, y me contuve. ¿Eso fue todo? Lo eché a perder. Una vez más me había dado cuenta de que en los planes de Cody no estaba cambiar. Él no iba a dejar de presionarme con su posesividad. Nunca.

— Vamos. — me dirigí a Ruth.

+++

Me tiré a la cama luego de que salí del baño. Me había dado una larga ducha, y efectivamente había logrado olvidarme de los problemas por unos minutos. Alcancé el control remoto y encendí la televisión. Pasaban Hello de Adele por MTV.

—Hello from the other side
I must have called a thousand times
To tell you I'm sorry for everything that I've done — tarareé.

Estaba a punto de levantarme para ir al baño cuando recibí una llamada, miré la pantalla, me di cuenta de que era Ruth y contesté.

— Hola Ruth.

— Hola Nikki. — saludó, parecía animada. — ¿Adivina qué?

— ¿Qué? — fruncí el ceño.

Oí que se rió. — Acabo de encontrarme con unos viejos amigos. Estamos pensando en ir a una fiesta. Nada formal, es en una hora.

— ¿Tan temprano? — solté.

— Sí. — informó. — Arréglate, estamos debajo de tu casa.

Me sorprendí. — ¿Qué? — exclamé.

— Sí. — carraspeó. — Sabía que me dirías que no, así decidí venir.

— Ruth... No creo que sea prudente luego de lo que ha pasado con Cody.

— El maldito de Cody está bien. — escuché enojo en su voz. — Arréglate y baja. — colgó.

Maldije, y me levanté de la cama. Caminé hacía la ventana, y miré a través de la persiana. Observé un auto negro, era deportivo. Observé adentro y vi a Ruth acompañada de otros tres chicos, a los que no les pude distinguir. No los conocía.
¿Adonde se supone que iríamos? ¿En que estaba pensando Ruth?

Cody el PosesivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora