Bring Me To Life [Newtmas]

Capítulo 11

La imagen que obtuve al llegar no fue nada agradable, su cuerpo estaba esparcido por el pasto, cubierto de mugre y sosteniendo una botella de Whisky en su mano. Quiso incorporarse al verme pero no logró hacer más que un raro movimiento con su brazo, el cual acabó cayendo nuevamente a su posición original.

-Thomas- pronunció después de un leve salto en su voz.

-Chad.

-Thomas mi Thomas querido, ven, ayuda a tu padre aquí.- Puse mis ojos en blanco mientras suspiraba y me acerqué a él, colocando mis manos en sus brazos, tirando de ellos hasta sentarlo contra el banco más cercano.

-¿Qué quieres?- Pronuncié con algo de dolor en mi voz.

-Hijo, necesitamos hablar.

-Te escucho.

-Sabes que estoy sin trabajo, ¿Verdad?- Fue mas una afirmación que una pregunta pero de todas formas asentí- por lo tanto no tengo dinero- palmeó el lugar donde tendrían que estar sus bolsillos ya que su deportivo pantalón no tenía.- ¿No traes nada contigo? ¿50 centavos aunque sea?

-¿Me llamaste para pedirme dinero?

-Sí. Y también porque ¡te amo hijo mío!

-¿Cuándo dejarás de beber?

-No lo sé, ésta cosa- elevó la botella de alcohol- salva mi vida, me ayuda a olvidar todos los problemas que tengo. Bendito sea el que lo creó- Le dio un buen sorbo.

-¡Esa cosa es la que arruino a la familia!- Suspiré agobiado- Piensa, si tú dejas de tomar y consigues un empleo, la cosas podrían volver a ser como lo eran antes.- Su vista decayó, su cuerpo estaba algo tambaleante pero conseguía mantenerse en su lugar.- Te extraño papá...- susurré, intentando tragar el nudo que se formó en mi garganta.

-También los extraño- Confesó después de un suspiro, lo abrazaría justo ahora, pero prefiero hacerlo cuando este sobrio, así podría disfrutarlo sabiendo que está consciente y sabe lo que hace, si lo abrazo ahora puede ser que a los cinco minutos lo olvide, incluso la charla...- ¿Siquiera dos centavos?- Volvió a preguntar. Mientras negaba con la cabeza me levanté y caminé directo a casa.

Ya no aguantaba verlo así, me dolía ver en lo que se había convertido, tengo en mi mente los buenos recuerdos aún de los partidos que íbamos a ver juntos, cargándome en sus hombros para que alcanzara a mirar ya que era pequeño y con la gente delante de mí no lo lograba, también cuando me iba a buscar a mi habitación por las noches para ir al patio trasero y mirar los conejos que salían por la madrugada a buscar la zanahoria que él colocaba para atraerlos, cuando me enseñó a andar en bicicleta y a conquistar mujeres, algo en lo que soy bastante bueno, recuerdo que me hacía practicar con Fofo, mi perro pequinés de la infancia. Tengo tantos guardados en mi memoria que es como si fuesen todos imaginación mía, es muy increíble ver que mi héroe, mi ejemplo a seguir ahora sea solo un vago más, una decepción.

Mas que cuando lo veo en el estado de recién me lleva a la situación de Newt en aquella fiesta de Minho, estaba peor que ese hombre al que yo solía idolatrar. Pero el rubio está a tiempo de cambiar, es reversible su situación.

Al llegar a casa, fui directo al cuarto de mi hermano. El creció sin papá a su lado, no pasó ni por la mitad de las cosas que pude pasar yo además de que soy la única figura varonil a la cual aferrarse, no podía simplemente dale vuelta el rostro y alejarme como ha hecho ese hombre con nosotros, solo porque le dio un inocente beso a su compañero. Tuvo el valor y la confianza para contármelo y yo me enfurecí, no era para nada justo.

Dos golpes en su puerta fueron suficientes para que abriera observándome mientras abrazaba a su muñeco de los Angry Birds.

-¿Puedo pasar?- Dio unos pequeños pasos hacia atrás, dejándome el paso libre.

Me senté al fondo de su cama pero él quedó parado donde estaba, como si me tuviese miedo.

-Ese muñeco es muy lindo- comenté pasivamente, el observó el objeto entre sus brazos y aumentó su fuerza- Escucha Winston- suspiré- lo lamento ¿Sí? Había tenido un mal día y me desquité contigo. No voy a alentar lo que hiciste, no debes besar a otros niños tú debes besar niñas pero tampoco fue para que te respondiera de aquella manera... ¿Me perdonas?- Asintió mientras se acercaba a mí y lo envolvía entre mis brazos. Adoraba a este niño.

Alboroté sus cabellos antes de bajar a la planta principal para ayudar a mamá con la comida.

-¿Han hecho las paces?- Preguntó con la vista sobre la lechuga que estaba cortando. Tomé una manzana del tacho que descansaba sobre la barra, apoyando mis codos en la mesada, a un lado de la mujer.

-Así es- Le di el primer mordisco y ella dejó salir una sonrisa.

-Sobreactuaste demasiado esa vez, no creo que haya sido para tanto. Está bien que no debe hacerlo pero...- la interrumpí cuando acabe dé pasar la manzana por mi garganta.

-Está en la etapa de la prueba, lo sé.- Me senté sobre el lugar donde descansaban mis codos hasta hace un momento.- Ma, ¿Puedo hacerte una pregunta?- Asintió dándome un vistazo veloz en lo que agarraba otro manojo de lechuga.- Si tú conoces a alguien que tiene todas las adicciones que puedas imaginar, tiene problemas con su familia y le da la espalda al mundo, ¿Cómo haces para ayudarlo?- Dejó de hacer su actividad para buscar alguna respuesta.

-Yo creo que... es complicado ayudarlo, quizá alentarlo a tomar la decisión de ir a rehabilitación pero más que eso no se puede cariño.

-Sí, pero si ese sujeto confía en ti, de hecho eres la única persona en la que confía y comienzas a descubrir que el problema es que esta absorbido por el dolor y la pena ¿Cómo haces para encender la luz en su interior que guíe su camino y salga de allí?- Para ese entonces me bajé casi de un salto, colocándome cerca de mamá como si tuviese la respuesta de todo. Me sonrió con ternura y volvió a su corte.

-Mira Thomas, yo sé que quieres ayudar porque tienes un alma noble y no sabes cuan orgullosa me pone que la poseas pero lamentablemente a veces hay problemas que no tiene solución, quizá lo que puedas hacer es buscar la manera de hacerlo sentir bien ya sea con salidas, visitas, sorpresas, cosas que sabes que no la tendrá por parte de otros amigos o de su propia familia. Eso ayudará pero no te aseguro que logré abandonar sus adicciones.

-¿Y cómo se que lo que estoy haciendo funciona?

-Te lo hará saber, notaras ciertos cambios en él o ella, como por ejemplo... comenzará a sonreír, verás que disfruta, que se sorprende, veras por sobre todo un brillo especial en sus ojos, uno que probablemente jamás hayas visto, te apodará y lo usará en los momentos que desee recordar, se sentirá con energía, lleno o llena de ánimo, tratará de tener los mismos detalles contigo, hará de cada situación especial porque será el comienzo de una nueva vida.- Suspiró- No es imposible, cariño, pero cuesta mucho lograrlo y no es fácil, por eso repito que es lindo que quieras ayudar pero intenta entretenerte con otra cosa.

Sabía que no lo decía con maldad, ni para tirar mi sueño abajo pero ya tenía la ventaja de que confiaba en mí, sonríe y me ha apodado, eso significa que voy por un buen camino. Besé la mejilla de la mujer antes de correr a mi habitación.

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Hola hermosas/os es un capítulo muy corto, lo sé, perdonen es que no tuve mucho tiempo de escribir en estos días pero quería actualizarla, prometo que el próximo sera mas largo :3 y de paso quería pasar para desearles una Feliz Navidad (atrasada) <3 y un prospero año nuevo <3 Espero que hayan tenido un lindo día el 25 :') Gracias por leer <3 Las/os amooooo! :3