¿Y Quien eres tu? | Sebastián Villalobos (Terminada)

"¿Tambien?"

Capítulo once

Mi padre se le había ocurrió la idea de salir al centró comercial, pero como era de esperarse yo me sentía excluida, Adeline iba de la mano con su novio, muy simpático el muchacho por cierto. Alan tenía un nuevo amigo qué de echó me caía de maravillas, ellos iban en otra dirección, Matt escuchaba música, Mi padre y Melissa iban tomados de la mano muy cariñosamente, en verdad me sentía excluida.

-_____________, hay un Starbucks cerca al oeste del Cristal- comentó mi padre, había notado mi adicción al café y a los frappe.

-Ahh claro- dije sonriendo tímidamente.

-¿Tienes dinero?-

-Si lo suficiente-

Me aleje de ellos y me fui en dirección contraria, varias chicas me miraban extraño, su mirada era fruncida y muy poco cortés,¿Seria mi forma de vestir? Iba totalmente casual, un bluson negro, shorts Jeans blancos, cabello totalmente recogido y despeinado y lentes de sol. no le había dado mucha importancia a esa y seguí caminando, pero era algo poco común, volvían a pasar chicas y en algunas sus gestó era de asco, algo ocurría y yo no sabia, algo malo debería a ver hecho. ¿He echó algo?.

Suspire y me adentre a la tienda de Starbucks, era tal cual me gustaba su olor a café me hipnotiza y el olor a crema y dulces me hacían agua la boca, allí estaban un par de personas mayores, unos que otros jóvenes y yo. El hombre del mostrador me regaló una calidad sonrisa, para luego seguirla de un Saludo de cortesía de parte de la compañía Starbucks. Muy amablemente pedí un Toffe nut Frappucino, no habían tardado mucho, y le di el primer sorbo cómo si fuera el último, la sensación del café me daba alegría y serenidad. Pero fui interrumpida de mis pensamiento cuando un chico decidía por una Merengada o un Berry Refresher, para mi gustó definitivamente y sin pensarlo tomaría el Berry Refresher, seguí caminando hacía la salida pero alguien me detuvo.

Un chico, se había parado frente a mí, lo miré con el ceño fruncido, bebí otro poco de mi Frappucino y lo esquive. Pero fue en vano el no me dejaba pasar, me queje y lo miré con una ceja arqueada.

-¿Me dejas pasar?- gruñí con el entrecejo fruncido.

-Yo a usted la he visto-

-No eso no lo creo- Me moví hacia la derecha pero era inútil el no me daba el paso.

-No, claro que si-

-Que no, yo no soy de aquí-

-Por su acento, obvio-

-¿Me dejas pasar?- volví a repetir, el chico mantenía una mirada perdida en mi, me sentía incomoda. bebí del Frappucino y lo esquive. Aun nada. no me dejaba pasar.

-¡Claro es usted!- dijo victorioso, fruncí el ceño y negué, no sabia de que hablaba, tampoco entendía porque decía que era yo y que me había visto, porque definitivamente yo a el jamas.

-Entonces, a ver.... ¿Quien soy yo?- me cruce de brazos y lo mire con una ceja arqueada.

el muchacho era lindo, mas alto que yo, llevaba aretes y su mirada era un tanto misteriosa, la cual me llamo la atención, no quise entrar en detalles y espere unos segundos a que hablara.

-Yo a usted la vi, saliendo del departamento de Patiño-

Mis ojos se ensancharon pude notarlo, lo mire confundida. ¿Como el sabia eso? El Frappucino se había colado mal lo que me hizo toser, como padeciera de tuberculosis. el intento ayudarme pero me aleje.

-¿Perdón?-

-Vea, ese día usted tenia una camiseta que yo le regale a Sebastian- sonrió, mi mirada seguía siendo de confusión yo a el no lo había visto antes.

-¿Usted me vio?- dije un poco preocupada, tanto así que había hablado en su acento, lo cual le causo gracia, pero yo seguía sin entenderlo.

-No solo yo, sino las Piezas del cubo-

-¿Las Fans de Sebastian? ¿Me vieron saliendo de ahí?-

mi corazón estaba apunto de salirse por mi boca, deje aun lado el Frappucino y me senté en una butaca, aquello me avergonzaba. Estaba claro de que no lo toleraba, el se sentó a mi lado y estrecho su mano, la cual no tome, no iba hacerlo.

-¡Sebastian!-

-¿Que hay con el?-

-Jaja, No mi nombre es Sebastian-

-¿También?- arquee una ceja.

-Si, ¿Algún problema?-

-Con el todo- susurre.

-Ahhh entiendo-

Cerre mis ojos, había pensando en que el no había escuchado nada, pero no era cierto. Escucho claramente lo que dije me ruborise y bebí de mi Frappucino.

-No te vieron exactamente allí, sino en el instagram de Sebastián-

-¿La foto?- arquee una ceja, pensé que eso era algo pasajero.

-¡Sí! Hay muchas críticas respecto a éso-

-¿Críticas?-

-No entiendo nada- bati mi cabeza a ambos lados

-En la foto se ve claramente, que usted no quiere una foto con el, cosa que les molestó a muchos-

-¿Deberían molestarse?- gruñi.

-Tu pudiste tener una foto que todas quieren y el puso "Encontrarse con mis Piezas de mi cubo, es increíble" igual tu la desaprovechaste -

-Yo le dije, qué no quería ninguna foto- Rodé los ojos.

-¿Ustedes salen?- preguntó un poco tímido, me eché a reír pero luego frunci el ceño.

-Éso sería lo más asqueroso que yo haría- Bufe, a el no le dio gracias, pero yo no le di importancia.

-Usted es diferente, no todas dirían eso-

-Porqué no todas se mueren por el- el rió y tomó de su bebida, sin dudas aquél chico era adorable.

Se acercaron un par de chicos, eran todo de su mismo estilo era único y agradable. Habia una chica que llevaba el cabello verde, era realmente hermosa, otro de ellos llevaba el cabello morado, no podía negar que se veían bien juntos, De tras de ellos habían dos chicos que ya habia visto antes, le dije a Sebastián qué tenia que irme, el accedió pero Daniel gritó mi nombre cuando me vio, cerré los ojos y me voltee para regalarle una sonrisa. No quería verlos, ya estaba cansada de ellos

Mario intentó abrazarme pero me aleje, sus amigos hicieron un gestó de preocupación o de confusión, no habia puesto mucha atención a ello, el sabia lo que me ocurría y se disculpó.

-¿Usted esta pérdida no?- comentó burlón Daniel, sonreí y me encogí de hombros.

-No se ha pasado más por haya- gruñio Mario, miré un poco apenada al resto, esperé unos segundos para ver si algo se me ocurría pero nada, mordí mi labio inferior y me crucé de brazos.

-¿Usted ahora es muda?- dice Daniel enmarcado su ceja levantanda

-Debería con ustedes- susurre.

-¡____________!- dijo Mario un poco decepcionado, Cerré los ojos y sonreí tímidamente, nuevamente me habían escuchado, debía aprender a guardarme ésos comentarios.

-Lo siento, tengo que ir me-

-¡Espera....!- Daniel se acercó y me sonrió alegremente