¿Y Quien eres tu? | Sebastián Villalobos (Terminada)

"Esto es Incómodo"

Capitulo veinte

Era algo estresante ir a donde tenia que ir Sebastián, no podía hablar con Daniel porqué Sebastián estaba presente, tenía qué escuchar sus chistes de mal gusto, sus eructos, qué eran del asco el lo sabía pero igual lo hacía a cada rato, su risa escandalosa, sin dudas tanto Sebastián me iban a volver loca, mi mal genio era de burla para los chicos no me tomaban enserio.

-Esto cuenta cómo secuestró- admiti un poco desesperada.

- No sí tu padre creé que te vas a quedar en casa de una amiga- dice Daniel mientras su boca estaba llena de palomitas.

-Eso es absurdo, yo no tengo amigas en Colombia-

-Matt dice qué sí, y tu padre le creyó-

Suspire y seguí viendo el partido de fútbol con ellos, no podía evitar cuando Sebastián se emocionaba, el tenía más fuerza qué yo y si el quería saltar allí estaba yo de perrito faldero, le grite en un momento qué se quedará quieto pero era como hablar sola, no me escuchó y lo siguió haciendo, unas que otras veces intento besarme pero siempre lo esquivaba o terminaba lastimado.

-¡Quiero ir al baño!-

Mis ojos se abrieron más de lo normal y negué varias veces, Daniel decía unos comentarios para nada agradables que me hacían sonrojar, Sebastián tampoco decía nada pero era algo intensos, había pensado todo el día en éso ¿Como haría para ir al baño?.

-¡No!-

-Pasame una botella, Mario- comentó, Mario soltó una pequeña risa y se la pasó.

-¡NO! ¿Que vas hacer?-

-hacerlo Aqui ya qué no quieres que vaya al baño-

-¿Tu pensaste a la hora de esposarme a ti?-

-No en eso-

Lo fulmine con la mirada y le di un golpe, me levanté bruscamente del mueble y lo llevé arrastradas al baño, el reía a carcajadas, y entró, pero mi brazo no permitía qué la puerta cerrará.

-¡___________!- dijo algo penoso, su voz lo delataba.

-¿Ahora que Sebastián?-

-No lle..- tocio un par de veces al hablar, no entendí muy bien y no llegué a escuchar lo que dijo.

-¿Que? No te escuché-

-No puedo- dijo entre dientes.

-¿Por qué no? ¿Que pasa?-

-No llegó-

-¿No Que? ¿No llegas? ¿A donde?-

-Esta muy lejos no llegó- gruñó algo desesperado.

La mitad de mi hombro estaba dentro del baño, era algo realmente incómodo.

-¿Ahora?-

- Falta un poco más- gritó, Suspire y frunci los labios.

-No voy a entrar si es lo que quieres- gruñi un poco alterada.

-¿Qué carajos? Que no llegó-

-Entonces hazlo en el lavadero-

-Es muy alto-

-Coño-

Sentí que se sobresalto cuando me vio dentro de baño con los ojos tapados, me pase del lado de la ducha con la ayuda de el, y me fui del lado donde las puertas no dejaban ver nada, al momento qué debía quitar sus pantalones fue aún mas vergonzoso, intentaba quitarlo con ambas manos pero grité antes y el se percató de lo que quería decirle, el ruido se escuchaba de lo más asquerosos y intenté cantar para evitarlo.

-¡Lalalalala!-

-¿Que haces?-

-Esto es asqueroso, intento cantar para distraerme-

Habia obligado a Sebastián que se lavara las manos al igual que yo, los chicos habían echó una expresión fuera de lo común y rieron incluyendo Sebastián, yo solo me senté en el mueble y tomé mi teléfono le escribí a Mario, el me miró con una ceja arqueada y le sonreí.

-necesitó tu ayuda-

- de acuerdo, ¿Cómo? -

-Necesitó hacerle una broma a Sebastián-

-Me agrada la idea-

Le comenté lo qué tenia planeado, me pareció raro qué tuviera algunas de las cosas que le había pedido, éso era poco inusual, esperamos a qué Sebastián se durmiera, me enfureció un poco aquéllo que habia dicho, Sebastián era tan estúpido como para no pensar en las consecuencias que traía esto, discuti con el nuevamente por enésima vez odiaba estar tan cerca de el, le grité que no dormiria con él que lo arreglará porqué no lo iba a dejar dormir, me habia dicho que dormirá en la alfombra y yo en su cama. acepte porqué estaba brava aunque sentí algo de culpabilidad.

Sebastián se durmió mi brazo estaba extendido hacía el suelo, le escribí a Mario y entró con las cosas, debían sera 1:44am el intento no hacer ruido pero tropezó con la puerta, Sebastián se movió un poco pero no se despertó, siguió y se acercó a mí.

-No conseguí la pega qué quería- susurró.

-¿Y qué es esto?-

-Pega de zapatos, fue la única qué encontré-

-Esta es mejor-

Tomé la pega y me acerqué a Sebastián y la eché por toda la parte donde estaba su barba, el se movió y quedé un poco nerviosa que se despertará, Mario no podía evitar la risa y me pasó un poco tembloroso de la risa una barba blanca, la pegué por todo el rededor y corté un trozo de la barba y la pegué a los costados donde se Supone qué estan las patillas. Mario chocó su mano con la mía y se fue riéndose.

...

Habia visto que Sebastián se movía mucho y no me deja dormir, aún así un rato después estaba dormida y caí en suelo, el golpe me había dolido como ninguno, golpee a Sebastián y el rió a carcajadas su risa era seguida me preocupé y lo miré raro, el no podía verme porqué empezaba a morir de riza, aunque tambien me pareció gracioso el echó de que tuviera una barba como la de un indigente, sucia y añejada.

-¿De qué te ríes?-

Me pasó un espejo y me enseñó mi rostro, grité cuándo me vi ain cejas, tenía esa zona super clara y sin un bello, Sebastián gritó de la risa mientras se tiraba en suelo, le jale la barba y se quejó aquélla estaba realmente pegada.

-Mis cejas-

-¿Cuáles?- soltó nuevamente una carcajada haciendo que sus ojos no se detallaran, lo golpee tantas veces pude pero su risa era aún mas fuerte.

-Eres un Imbécil, mis cejas Sebastián-

-Mi barba, ___________. - se acuario su extensa barba y no aguantó la risa.

-Éso se quita-

-¡Seguro!-