Dreams Fulfilled (Parte 2)

54. Adios

Todos nos volvimos a vestir y nos dispusimos a entrar en el coche, pero hangeng se quedó sentado en la orilla sin hacer caso de lo que decíamos en ningún momento.

Corrí hasta el para avisarle de que ya teníamos que irnos.

- Hangeng vamos!- le anime dándole dos palmadas en la espalda.

- Id vosotros- me dijo este cortantemente.

- Pero...- dude.

- Ya volveré yo solo al piso, quiero... quiero estar aquí ahora, vale?

Asentí con la cabeza.

- Puedes... puedes traerme la bolsa que he llevado conmigo? Tengo el móvil y la cartera ahí.

- Claro- asentí.

Eche a correr hacia la furgoneta, cogí la bolsa de hangeng y eche a correr de nuevo para dejársela a el. Pesaba demasiado para solo llevar el móvil y la cartera, pero no dude, la deje a su lado me acuclille y apoye mi mano sobre su hombro.

- No te preocupes- sonreí- ya verás como todos se soluciona, el te quiere demasiado.

Me levante y deje a Hangeng atrás. Ojala hubiese sabido que ese sería la última vez que lo veríamos.

Me subí a la furgoneta y me senté en la ventana.

- No viene?- me susurro donghae al oído.

- No... quiere pensar y creo que es lo mejor que puede hacer.

Este apoyo su barbilla en el comienzo de mi hombro, y bizcamente me miro a los ojos con dulzura mientras yo sonreía.

- Oh por dios parad ya!- se quejó yesung riendo.

Los dos nos reímos, y donghae se cogió a mi brazo, apoyo su cabeza en mi hombro y se durmió.

El trayecto fue largo y cansado, ya era de noche y eso era peor.

Cuando aparcamos, por nuestra sorpresa no había ningún manager esperándonos, al igual que al subir las escaleras, pero al llegar al pasillo del piso, vimos que heechul estaba sentado delante de la puerta con la cabeza metida entre las rodillas.

Nos hoyo, pero este ni se levantó, simplemente ladeo la cabeza nos miró con odio y volvió a hundir la cabeza entre las piernas.

Leeteuk abrió la puerta y paso por su lado sin inmutarse, pero los más jóvenes nos quedamos parados delante de él.

Tenía las manos completamente blancas, y temblorosas, al igual que sus pierna parecían gelatina en medio de un terremoto.

- Donghae... - susurro este- donde esta hannie?

Donghae me miro antes de responder.

- Se ha quedado en el rio...

Este levanto la cabeza y nos miró a todos.

Tenía la cara sonrojada, los labios hinchados al igual que los ojos, unas ojeras de kilómetros y la nariz pelada de tanto sonarse.

- No...- lloro- no va a volver...

Nunca había visto a heechul en esta situación. Heechul no lloraba, heechul no mostraba sus sentimientos, o eso era lo que yo me creía.

- Como que no va a volver?- se acuclillo donghae delante de el.

- Le dije que se fuese, que no quería volver a verlo más... en mi vida... donghae....- le cogió la cara con las dos manos mientras se hacía a añicos por dentro.

Balbuceaba como un bebe. Estaba tan harto de llorar, que sus cuerdas vocales no le dejaban emanar más sonido. Este se tiró al suelo y se rodeo la cintura con los brazos, haciendo presión en su propio cuerpo.

- Vamos a buscarlo!- lo estiro donghae intentando levantarlo del suelo

- Ya no estará ahí...- dijo entre lloros

- Pues vayamos a buscarlo sea donde sea que este- le dijo cabreado donghae.

Este lo intentaba levantar, estirándolo del codo, del brazo, levantándole la cabeza del suelo, estirándole de las axilas, pero lo único que conseguía era darle cada vez más golpes a heechul.

- Donghae para...- le aparto este sin fuerzas.

- No, no voy a parar!- chillo- tu me dijiste que luchara por lo que quería y lo he echo! Quieres tu lu-char ahora! Heechul, es tu turno!

- Pero hang...

- Que, qué?!- chillo de nuevo asustando a heechul- es la persona a la que quieres y...

- Cállate!- le tapó la boca este.

Yo ya sabía la historia, pero parecía ser que los demás que estaban con nosotros no.

Heechul nos miró con odio a todos, se levantó y se limpió los pantalones. Se dio la vuelta cuando fue a cruzar la puerta le pare.
- Heechul...

- Que quieres?- me dijo este en tono sereno.

- Sabes que lo necesitas, deja de lado tu orgullo, por una vez no seas tan egoísta, el... el te quiere, no ha parado de decirlo en todo momento....

Este agacho la cabeza.

- Eso crees?...

- No lo creemos- contesto donghae- lo sabemos.

Heechul nos miró se mordió los labios y echo a correr escaleras abajo.

- Vamos- cogí la mano de donghae estirándolo persiguiendo a heechul.

Este se subió a su coche personal y arranco. Casi ni nos dio tiempo a subirnos.

- Dónde vamos?- pregunte con nerviosismo ya que iba como loco conduciendo.

- Al aeropuerto- dijo sin apartar la mirada de la carretera.

- Heechul, cuidado!!!- chillo donghae, que estaba sentado detrás de nosotros, ya que heechul se saltó un semáforo en rojo y casi provocábamos un accidente.

- Dejadme!- chillo- ahora dejadme...

Mire a donghae con incertidumbre y me agarre al asiento con miedo. Lo que menos necesitábamos ahora era matarnos en un accidente de coche.
H
eechul entro a más de 100 por hora en la terminal 8, que era donde estaban las entradas para los pasajeros que se dirigían a china.

Heechul se subió encima de la acera con el coche, echo el freno de mano brutamente delante de la puerta y salió del coche despavorido llamando la atención de todo el mundo.

Le dije a donghae que se pusiese la capucha al igual que yo, y salimos detrás de heechul corriendo.

Delante de la zona de embarque ya no había nadie, y heechul se había lastimado la rodilla por correr.

- Joder, joder- se quejaba este- he llegado tarde...

- Preguntare a una azafata- corrió donghae.

Pero el móvil de heechul comenzó a sonar.

Todos nos quedamos parados delante de el. Quien le estaba llamando, era hangeng.

Este lo cogió sin dudarlo

- Hangeng!?!?, hangeng, donde estás? Hangeng háblame!- chillo, pero de repente callo- ha... ha colgado- dijo mirando el móvil-joder...

Donghae fue hacia Heechul y le abrazo.

- Hae, dime ahora, dímelo, como podré vivir sin el...