Internado de Pijos [Corrigiendo.]

Capítulo49: Una nueva manada.

Damien, aparece por la puerta, cómo si fuera una persona normal que viene a comer pizza, pero el movimiento que hace su cabeza indica que busca a alguien. Debería de disimular mejor, aunque eso es un punto a favor para nosotros. Al mirar hacia nuestra mesa sonríe levemente, bueno ya sabemos a que a venido.

-Olvidaros de los ultimos dos días- murmuró observando como Damien se acerca a nosotros.

-Chicos, que casualidad.- sonríe el castaño, me relajo olvidandome de que éste psicópata a matado a su propia madre y le devuelvo la sonrisa.

-Damien hola, que haces por aquí?- pregunto amablemente, los chicos observan la escena.

-Bueno, pensé en venir a comer una pizza ya que hace mucho que no como una.- sonríe, demasiadas explicaciones chico.

-Siéntate con nosotros.- Indica Scott con una sonrisa, Damien asiente con una sonrisa amable y falsa. Coje una silla y se sienta entre Scott y yo.

-Bueno chicos el es Damien, el hijo de Sofía y Damien.- Presento.- Ellas son Morgan, mi prima, Victoria, la prima de Scott, Josh y Mike- señalo a los chicos.- Y la pareja Dani y Jonh.- sonrío, con los chicos choca la mano en uno de esos saludos masculinos y a las chicas les da la mano en un suave apretón.

-Bueno y de que hablabais?- pregunta acomodandose en la silla.

-De nada, realmente.- me encojo de hombros cojiendo una rebanada de mi pizza. El chico se ríe y antes de poder darme cuenta los chicos y Damien están hablando entre risas sobre coches y qual es el mejor motor. Entiendo algo sobre coches por culpa de Max, el cual nos aficiono a mi y a Daisi.

Después de unos minutos llega el camarero con la pizza y la bebida que había pedido minutos antes. Casi todos nos hemos acabado nuestra comida y nuestra bebida, con las chicas me dirijo hacia el baño dándole un beso en la mejilla a Scott.

-Cuidado.- susurro en su oído refiriéndome a Damien, él me da un suave apretón en la mano y me sonríe. Me dirijo al baño junto a las chicas, al entrar abro el grifo del agua y lavo mis manos.

-¿Entonces...?- pregunta Victoria.

- Entonces Damien, el hijo de puta, va a empezar con su plan y vamos a tener que estar más que atentas.- Señalo a las chicas.- Hay que seguir disimulando, el no tiene que notar nada y mucho menos os tenéis que tensar cuando os sonría, hable o os toque.- Aviso cerrando el agua, mi móvil empieza a vibrar y lo saco de mi bolsillo para ver una llamada entrante de Amanda. Descuelgo y llevo el móvil a mi oreja.

-¿Que pasa?- Contesto.

-El 37 de la segunda avenida, piso dos B?- pregunta la voz de Drew, nuestra dirección.

-Hola Drew.- sonrío.- Y si justo ahí.- me reí.

-Hola Dana, estamos aquí junto a un buen grupo de amigos.-Estoy más que segura de que está sonríendo.-

-Quedaos ahí que no os vea nadie.- suspiro.- Ahora os envio la llave, estáis delante de la puerta?- pregunto sacando la llave de mi bolsillo trasero.

-Sí.- confirma. Me arrodillo en el suelo notando la mirada de las chicas encima de mi.

-Espera.- dejo el móvil a un lado y cierro los ojos visualizando a Drew.- Diorti cambi, diorti cambi- susurro apretando la llave, hasta dejar de sentir el frío metal contra la palma de mi mano. Cojo el móvil.

-¿Te a llegado?- pregunto.

-Sí.- se ríe.- Bruja, mujer loba.- murmura, oigo como mete la llave en la cerradura y abre la puerta.

-Sí Drew, asumelo ya.- ruedo los ojos.- No entréis en las habitaciónes, o te rompere las bolas oh y hay cerveza. En media hora estamos ahí, hasta luego.-cuelgo guardando el móvil en mi bolsillo.- Tenemos invitados, chicas.- sonrío. Ellas me miran confundidas.